Criptomnesia, cuando tu cerebro plagia inconscientemente ideas

La criptomnesia es una forma bastante particular con la que nuestra mente copia ciertos patrones que observamos. Esto tiene su parte buena y mala, como todo. Te lo explicamos a continuación.
Criptomnesia, cuando tu cerebro plagia inconscientemente ideas
Gema Sánchez Cuevas

Revisado y aprobado por la psicóloga Gema Sánchez Cuevas.

Última actualización: 28 agosto, 2021

“Hay recuerdos que han sido aparentemente olvidados

para reaparecer confundidos con el tiempo presente”

(Adrián Triglia)

Resulta difícil pensar que nuestro cerebro puede plagiar ideas de manera inconsciente, pero es algo que ocurre más veces de las que pensamos.

El plagio inconsciente se refiere a una idea, creación o solución que consideramos nueva, pero que realmente ha existido previamente. Es decir, no somos los pioneros de ninguna de estas tres cosas, aunque así lo creamos.

¿Cuántas personas han inventado algo que ya ha sido creado, pero ellas consideraban que era una idea original? Realmente, no son conscientes de que están plagiando.

El plagio inconsciente sucede en muchas ocasiones. Quizás a ti también te haya ocurrido…

El plagio inconsciente

El término criptomnesia tiene su origen en la palabra griega “kryptos” (oculto) y “mnesia” (memoria o recuerdo). En otros términos, plagiamos sin darnos cuenta, algo que nos parece nuevo, pero ya ha sido creado.

Nuestra mente suele almacenar en algún lugar de nuestro cerebro, todo aquello que percibe por los sentidos. Por eso, normalmente, nos acordamos o “nos suena” algo que rememoramos en determinado momento.

Es normal que no nos acordemos de todo, pero sabemos que no es de nuestra propia cosecha, que no es algo que se nos ha ocurrido de repente.

Cuando sucede todo lo contrario, cuando creemos que es una idea original nuestra y realmente no es así, se le denomina criptomnesia.

Hombre pensando ideas

¿Es algo que podemos evitar? No, es algo que sucede inconscientemente en nuestra mente. No lo podemos controlar y, en muchas ocasiones, nos juega malas pasadas.

En la criptomnesia recuperamos constantemente recuerdos que han sido olvidados, pero que los vivimos como si fuesen originales.

Como es algo que se escapa de nuestro control, desde siempre y aún ahora, se continúan presentando problemas de plagio constantes que deberían estar ya erradicados. En algunos casos, son causa de la criptomnesia.

En el mundo de la música, del cine, de la literatura, ha habido varios problemas de plagios. Pero, ¿hasta qué punto pueden estar justificados? Si la criptomnesia es algo inconsciente, ¿qué culpa puede tener la persona víctima de este fenómeno?

¿Qué nos hace susceptibles a ella?

¿Pueden padecer todas las personas criptomnesia? ¿Cuáles son los factores que nos hacen ser susceptibles a ella?

Existen una serie de causas que pueden provocar un mayor riesgo de padecerla. Cuando la criptomnesia puede afectar a nuestro trabajo o a nuestra propia vida, esto tiene un motivo.

El primero de ellos, puede ser la elevada concentración que podemos tener en el momento de considerar una idea.

La gran tensión mental que presentamos, puede provocar que no memoricemos de manera eficaz ese recuerdo, porque nuestra capacidad de atención se ve reducida por esta tensión. Por ello, posteriormente, podríamos recordarlo como algo totalmente nuevo.

El segundo de ellos, trata la posibilidad de dejar una idea en el olvido demasiado tiempo. Es decir, cuando contactamos con una idea, pero hay un largo periodo de tiempo en la que la olvidamos y no la recordamos, cabe la posibilidad de que cuando lo hagamos, creamos que es algo original y nuevo que no ha ocurrido antes.

En el último y tercero, el motivo es la búsqueda de la solución a una idea. Similar al primero de los puntos, encontrarle una solución a algo hace que prestemos toda nuestra atención. Esto provoca que la idea no quede debidamente impregnada en nuestro cerebro. De este modo, la creeremos nueva cuando regrese ese recuerdo.

“La finalidad del arte es dar cuerpo a la esencia secreta de las cosas,

no copiar su apariencia”

(Aristóteles)

Hombre frente a una bombilla

Debido a esta explicación, muchos plagiadores verían una luz para justificar sus plagios. Pero no hay que dejar de pensar en lo mucho que debe de afectar a una persona descubrir que la idea no ha sido suya. Puede sentirse una ladrona inconsciente, quizás se deprima por no lograr tener ideas originales.

Hoy en día, casi todo está pensado y creado. Aunque siempre hay una nueva visión, una nueva postura que ofrecer. No debemos olvidar que el plagio es un delito.

Y si por alguna razón somos víctimas de la criptomnesia, debemos aceptar nuestro error y no rebelarnos contra un plagio del que no hemos sido conscientes.

Si alguna vez te ha ocurrido esto, ¡cuéntanoslo! Seguramente, una nueva idea, opinión o cualquier otra cosa que consideras original y de tu propia cosecha puede no ser así. La criptomnesia es más habitual de lo que parece.

 

 


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.