El sol después de la tormenta: la historia de Irene Villa

El sol después de la tormenta: la historia de Irene Villa
Gema Sánchez Cuevas

Revisado y aprobado por la psicóloga Gema Sánchez Cuevas.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 06 octubre, 2022

¿Cuántas veces no te has cuestionado que la vida no tiene sentido? ¿Cuántas veces le has dado más importancia a cosas que realmente no la tenían? En este artículo vamos a reflexionar un poco sobre estas preguntas a través del caso de Irene Villa.

Irene Villa fue víctima de un atentado terrorista con tan sólo 12 años y en él perdió sus 2 piernas y algunos dedos de una mano. Sucedió cuando se montaba en el coche con su madre, víctima también del atentado. Sin embargo, lo importante de su historia no fue lo que le ocurrió sino lo que ha hecho después. Ha conseguido todas las metas que se ha propuesto en su vida, tiene 3 carreras universitarias, entre ellas psicología. Está felizmente casada, tiene un hijo y actualmente está embarazada.

Irene Villa no se siente una víctima

Lo primero que quiero destacar es que da multitud de Conferencias. En ellas, deja claro que no quiere ser una víctima, que el atentado fue algo que le ocurrió igual que a otros les ocurren otras desgracias. Dice que fue un hecho importante, pero ha habido cosas que le han pasado o que ha conseguido que considera que han marcado de una manera más profunda su vida, de una manera mucho más significativa.

“La vida es un regalo maravilloso y fugaz, así que ríete”

-Irene Villa-

En su discurso, escuchamos cómo ella ha integrado el atentado en la historia de su vida y cómo entiende que ahora es muy feliz; que lo es gracias a todo lo que le ha pasado, haya sido bueno o malo. Quiere y ama la vida que tiene, la que ella ha construido con esfuerzo, dedicación y… ¿Por qué no? Disfrute y placer.

Mujer con los brazos levantados y feliz

La toxicidad del rencor

En algunas entrevistas se le ha preguntado por el rencor y ella habla de él como un sentimiento que no merece la pena tener, que no merece la pena guardar. Haberlo trasladado hasta hoy, desde aquel momento, sería como haber arrastrado una piedra que cada vez pesa más y a la que cada vez es más difícil dejar.

Porque el rencor se acostumbra a nosotros, igual que nosotros a él, hasta que consigue contagiar todo lo que hacemos y sentimos, disfrazado y pasando desapercibido.

El caso de Irene Villa nos demuestra que las peores situaciones de tu vida también forman parte de ella y que las integras en tu historia, en tu sentido propio, o las aíslas para que cada vez se hagan más grandes y terminen echando a todos los pensamientos positivos de tu mente. Esa misma Mente que es Maravillosa.

“La vida te recompensa…no hay que tirar la toalla jamás…la única derrota es el desaliento…no hay que dejar nunca de luchar…hay que perdonarse a uno mismo y a los demás…no somos víctimas ni aunque nos pongan una bomba…somos responsables de nuestra vida, de nuestro futuro”

Así, con todo mi cariño os recomiendo que cuando tengáis un ratito o un día de esos “tontos” que todos tenemos, pongáis un vídeo de esta chica o leáis algunos de sus libros.

 

¿Cómo sobreponerse a una situación difícil?

Hay mil situaciones en las que uno piensa que la vida lo supera, que ya no puede más. Pero, ¿Qué podemos hacer en estos casos? Estas son algunas claves a las que podemos prestar atención.

1. Intenta ser todo lo positivo que puedas

Sabemos que es muy difícil en esos momentos pero quizás lo que más fuerza pueda darte sea pensar que tienes que continuar porque tu hijo, la sonrisa de tu nieto o la preocupación de tu madre te están esperando.

2. Piensa que hay cosas maravillosas que te van a ocurrir en algún momento de la vida

Porque la vida da una de cal y otra de arena y aunque no lo creas algún día te sorprenderá y te brindará nuevas alegrías, nuevas oportunidades.

3. No hay mal que 100 años dure

Sí es cierto que la situación es insostenible, pero pasará, todo pasa… Aunque ahora mismo parezca que esta situación estará presente indefinidamente, lo cierto es que tendrá su final.

Mujer feliz abrazando la vida

4. Rodéate de tus familiares y amigos

No trates de disimular tu dolor. Habla, exprésate, escupe todo el dolor que llevas dentro. Las personas que te quieren desean poder ayudarte en lo que puedan y hacerte saber que están a tu lado.

5. No te apresures

Tómate tu tiempo, el que tú solo necesitas. Cada persona tiene un ritmo para las cosas. Poco a poco te irás recuperando.

6. Ayúdate de profesionales

Ellos valorarán si en tu caso necesitas de medicación para ayudarte. Sin embargo, te brindarán herramientas y recursos para poder sobreponerte a esa situación que te atormenta lo antes posible.

“El amor ha sido siempre la clave de todo, de hecho en aquel atentado cuando mi madre me dijo no tienes piernas, pero tienes amor, dije: aquí empieza mi vida”

-Irene Villa-

Infórmate todo lo que puedas sobre lo que te está ocurriendo: las relaciones entre pensamiento, emoción y acción, etc. Desde aquí sea cual sea tu situación esperamos haberte ayudado al menos un poquito y esperamos haberte sacado una sonrisa mientras leías este artículo.

Imagen principal sacada de La Vanguardia.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.