Los mayores misterios de nuestra mente

Los mayores misterios de nuestra mente
Sergio De Dios González

Revisado y aprobado por el psicólogo Sergio De Dios González.

Escrito por Yamila Papa

Última actualización: 23 agosto, 2023

Desde tiempos remotos que la gente se pregunta mucho sobre lo que ocurre en la mente, sobre todo en relación a los sentimientos, el sueño, la conciencia, la muerte o la inteligencia. Puedes conocer aquí los misterios más asombrosos en relación a la mente.

 

Ránking con los mayores misterios de nuestra mente

1-Los sueños: nadie sabe a ciencia cierta para qué sirven los sueños. Algunos pueden decirte que son premoniciones, otros que se trata de lo que la persona haya pensado minutos antes de dormir y están los que consideran que son relatos de nuestras vidas pasadas o futuras. Ni siquiera los científicos se ponen de acuerdo con este tema tan controversial. Una de las posibilidades que más adeptos tiene es la que expresa que gracias a los sueños la mente puede ejercitarse, porque estimulan el intercambio en las sinapsis de las neuronas. Otra teoría dice que las personas sueñan para poder canalizar sus emociones y sus miedos que reprimen cuando están despiertos, afianzando la memoria emocional. Lo que si se sabe es que los sueños aparecen en la fase REM del descanso.

2-Las ensoñaciones: no es lo mismo que el punto anterior, vale aclarar. Se trata de ese sopor que a veces nos inunda, o cuando nuestros ojos se cierran sin que podamos evitarlo. Al parecer estos acontecimientos ocurren en una cuarta parte de nuestra vida. En esos momentos estamos alertas del entorno aunque no lo creamos. Esto es porque las ensoñaciones son diferentes a los sueños, como se dijo anteriormente. Ya que dormir es crucial porque de lo contrario podemos hasta morir, los científicos creen que con estos descansos pequeños entramos en una “hibernación” que permite al sistema recuperar un poco de energía, lo mismo que hace el PC cuando está en función descanso. Lo que si, mantiene activas las funciones del cerebro (esta es la diferencia principal con respecto al sueño).

3-Los miembros “fantasmas”: el 80% de las personas que sufrieron alguna amputación en sus miembros experimentan sensaciones en esa región, como ser dolor, calor, presión o picor. Sienten que la parte amputada aún forma parte de su cuerpo, aunque no haya nada. Una respuesta a esto es que los nervios de la zona hayan creado conexiones nuevas con la médula espinal y que sigan mandando señales. Otra opción es que el cuerpo precisa “pensar” que está completo para poder funcionar correctamente, ignorando la parte amputada y creyendo que todavía está en el lugar.

4-El reloj biológico: Está ubicado en el hipotálamo (núcleo supraquiasmático) y está programado para seguir un ritmo que no para las 24 horas del día, es decir, el circadiano. La acción más evidente del reloj biológico ocurre en la alternancia entre el sueño y la vigilia. Pero además, interviene en los procesos digestivos, en la presión sanguínea, la temperatura corporal o la síntesis de las hormonas. Los investigadores descubrieron que para ajustar el reloj se precisa la intensidad lumínica, la cuál regula algunas funciones. Puede ser por ello que hay gente que se despierta a una misma hora todos los días, segundos antes de que suene la alarma, o que el hambre aparece en el mismo momento sin importar lo que estemos haciendo.

5-La memoria: existen hechos que nunca te olvidarás en la vida y otros que parece que quedaron guardados bajo siete llaves. Cuestiones como el primer beso, un robo o el nacimiento de los hijos son hitos para nuestra memoria. ¿Cómo podemos acceder a nuestros recuerdos? Esta es una pregunta frecuente en los científicos. ¿Dónde está esa “película” sobre nuestra vida? También desean saber la respuesta. Los estudios revelan que el hipocampo es un elemento vital para responder a estas consultas, porque actúa como si fuera una caja donde se van almacenando los recuerdos, pero es un sistema no discriminativo. Esto quiere decir que quedan allí los recuerdos verdaderos pero también los inventados o los falsos. El siguiente interrogante para la ciencia es saber por qué podemos determinar si algo pasó o no.

6-El sentido del humor: es una de las cosas menos entendidas luego de muchas investigaciones. Al reír, una gran parte de nuestro cerebro se activa. La zona que nos permite comprender la broma, la parte emocional y el área que le “dice” a los músculos faciales que deben moverse. Lo que todavía no se sabe es por qué hay personas que se ríen cuando otros se caen, cuando están nerviosos, cuando les cuentan un chiste, etc. Al parecer, el cerebro se ríe de las incongruencias, es decir, hechos o historias que desobedecen a la experiencia.

7-La muerte: a medida que vamos envejeciendo, nuestro cuerpo ya no es tan inmune a las heridas y enfermedades y comenzamos a deteriorar. Esto también ocurre en el cerebro. Hay diferentes teorías al respecto, por supuesto. Una por ejemplo dice que el envejecimiento de la mente es parte de la condición humana y es beneficioso que así ocurra, como una cuestión de darle paso a las generaciones futuras. Otra dice que no tiene en sí ningún propósito, que simplemente es un daño celular que va ocurriendo a lo largo de la vida. Algunos creen que es posible retrasar este proceso para duplicar la duración de la vida.

8-La conciencia: sin dudas es sobre lo que más se habla en cuanto a misterios de la mente humana. Está en todo momento de nuestra existencia, cuando nos levantamos, escuchamos el canto de las aves, nos duchamos, vamos a trabajar, comemos, pasamos tiempo con nuestra familia, hacemos deporte, estudiamos, etc. Este tema es muy complejo y es causa de muchos estudios y controversias. Todavía es el mayor rompecabezas con varias piezas faltantes. Lo que muchos se empeñan en descubrir son los procesos que ocurren en el cerebro para dar origen a los recuerdos o las experiencias subjetivas.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.