
El método silábico lo desarrollaron dos pedagogos Federico Gedike y Samiel Heinicke. Ambos se centraron en la búsqueda de una técnica que permitiese a los niños aprender a leer de una manera mucho más rápida y efectiva. Por eso, desarrollaron…
El test del dibujo de la familia aplicado a niños pequeños de entre 2 y 5 años, requiere que les hagamos preguntas mientras realizamos la prueba. Es recomendable saber a quién dibuja, cómo se lleva con ese familiar, qué le gusta de él, qué no, etc.
El test del dibujo de la familia es una de las técnicas proyectivas más utilizadas en el campo de la psicología infantil. Es muy útil para valorar las relaciones del niño con su entorno cercano, así como su estado emocional, su afectividad y desarrollo psicológico. Cabe señalar que estamos ante un instrumento que cuenta ya con más de seis décadas pero aún así, sigue siendo interesante.
Miles Porot fue el especialista que diseñó esta prueba proyectiva. Está destinada a niños de entre 2 y 16 años, es fácil de aplicar y puede sin duda aportarnos información interesante sobre el mundo interior de los pacientes infantiles y juveniles. No obstante, cabe señalar que los test proyectivos, como puede ser el test del árbol, no dejan de ser pruebas complementarias sin valor diagnóstico concluyente por sí solas.
Para un diagnóstico válido y eficaz, deben hacerse uso de otros recursos como las entrevistas y pruebas psicológicas estandarizadas. Veamos no obstante más datos sobre el test del dibujo de la familia y cómo se interpreta.
«Una de las cosas más afortunadas que te pueden suceder en la vida es tener una infancia feliz».
-Agatha Christie-
El dibujo es ese recurso cercano e imprescindible en la vida del niño. A través de él, podemos profundizar en su universo simbólico, en ese escenario íntimo pero revelador donde desgranar sus sentimientos, miedos, necesidades, ansiedades, etc. La finalidad por tanto del test del dibujo de la familia es el siguiente:
El test de dibujo de la familia es uno de los preferidos en la práctica clínica por su sencillez a la hora de aplicarla. Solo necesitamos que el niño tenga ya cierta madurez cognitiva para entender lo que le pedimos, así como cierto dominio de la motricidad fina para dibujar. Lo único que demandaremos al paciente es que dibuje a su familia.
A la hora de analizar cómo se interpreta el dibujo de la familia en un niño de 2 años debemos tener en cuenta una serie de aspectos. Estamos ante un niño aún muy pequeño que presentará cierta inmadurez en sus trazos y dibujos. Por tanto, a la hora de valorar esta prueba el especialista tendrá en cuenta muchos más aspectos que los aquí señalados (estado de ánimo cuando dibuja, negativa a dibujar ciertas figuras, etc).
Al contrario de otro tipo de pruebas, en el test del dibujo de la familia la persona que va a evaluar debe estar presente durante todo el tiempo.
A partir de ahí, y mientras el niño realiza la producción hay que observar aspectos como:
En relación al plano gráfico, atenderemos los siguientes valores:
Un aspecto clave que debe valorarse es el orden en que se han dibujado cada una de las figuras. Por término medio, es común que el pequeño tienda a dibujar primero la figura familiar más cercana para él. En estos casos suele ser la madre o el padre. Valoraremos por tanto qué persona dibuja antes, cómo se dibuja a sí mismo y qué distancia establece entre él y los familiares.
Para concluir, el dibujo de la familia es una prueba sencilla que suele usarse como técnica complementaria para valorar emocionalmente a los niños, así como la relación con su entorno cercano. Gracias a este recurso, podemos obtener información interesante que se añade al resto de instrumentos y entrevistas realizados por los especialistas en psicología infantil.