Aileen Wuornos, la cazadora de hombres

Aileen Wuornos fue una asesina en serie estadounidense que robaba a sus víctimas, todos hombres, a quienes finalmente asesinaba con una pistola. Recordada por su carácter hostil, hosco e intimidatorio, sería ejecutada por inyección letal en el año 2002.

Revisado y aprobado por la psicóloga Gema Sánchez Cuevas.

Escrito por Vanessa Viqueira

Última actualización: 15 noviembre, 2022

Aileen Wournos se convirtió en la asesina en serie más famosa de Estados Unidos. La fama era, sin lugar a dudas, merecida.

Nunca mostró arrepentimiento por los asesinatos que había cometido, alegando defensa propia. La realidad es que la vida de Aileen nunca fue fácil desde su mismo nacimiento.

Infancia y adolescencia

Aileen Carol Wuornos nació el 29 de febrero de 1956 en Rochester (Michigan, Estados Unidos), como Aileen Carol Pittman, su verdadero nombre.

Su madre Diane la abandonó seis meses después de dar a luz y su padre Leo estaba encarcelado por pederastia. Aileen, su hermana Laurie y su hermano Keith fueron enviados a vivir con sus abuelos, Lauri y Britta Wuornos, quienes adoptan a los pequeños en 1960.

Una infancia horrible

Su amigo de toda la vida, Dawn Botkins, diría en un documental posterior que vio como Aileen era golpeada con dureza por su abuelo, aun sabiendo que había testigos. Además, se rumoreaba que era la hija biológica de su abuelo, de quien se dijo que abusaba de ella y también de su madre.

Las discusiones, las peleas y las palizas eran un continuo en aquella familia. Uno de los muchos episodios dejaría huellas en su piel para toda la vida: su abuela le quemó la piel con líquido inflamable.

Cuando tenía nueve años, Aileen Wuornos comenzó a ejercer la prostitución. Con catorce años, dio a luz a un bebé que sería dado en adopción y, tras ser expulsada de casa, se fue a vivir al bosque.

La esperanza de una vida mejor

Tiempo después, Aileen emprendería una etapa de viajes por todo el país en busca de trabajo. Finalmente, acabaría ejerciendo la prostitución. La pequeña Aileen se había convertido en toda una mujer, pero era salvaje, poco educada y con un carácter violento que intimidaba.

Se casó con el presidente del club náutico Lewis Gratz Fell, del cual se divorció poco después. Sus entradas y salidas de prisión serían continuas por robo de vehículos, resistencia a la autoridad, obstrucción a la justicia, amenazas con arma de fuego, y un largo etcétera.

Finalmente, comenzaría una relación con Tyria Moore, una mujer que conoció en un bar gay de la zona y de la cual se enamoraría. La pareja emprendería una serie de andanzas delictivas bajo nombres falsos.

La mujer araña

Aileen Wuornos fue bautizada por las autoridades como la mujer araña, por su aversión a los hombres y su gusto por vestir prendas de cuero negro.

Su mejor amiga era una pistola calibre 22, que llevaba por protección, según afirmaría, pero que utilizó para otro propósito cuando un día apretó el gatillo y ya no pudo volver atrás.

Sembrando cadáveres

Todo comenzó cuando su vida se encontró con la de Richard Mallory, un camionero de 51 años que pasaba horas conduciendo por el autopista y que había sido acusado de agresión sexual. Según la versión de Aileen, ese encuentro no fue como los anteriores con otros de sus clientes, y acusó a Richard Mallory de agredirla sexualmente por vía anal.

Aileen le disparó tres veces en el pecho con la pistola, posteriormente envolvió su cuerpo en una alfombra y lo abandonó. No dejó pistas, por lo que tampoco la investigación tuvo mucho recorrido.

Un año más tarde, se hallaron los restos de David Spears, de 43 años, asesinado de seis disparos. Mientras se llevaba a cabo la identificación, tan solo cinco días después, se encontró un tercer cadáver con nueve impactos; en concreto, el de Charles Carskaddon, de 40 años.

Respeto al cuarto cadáver, identificado como Peter Siems, de 65 años, fueron varios los testigos aseguraron que había subido a dos mujeres que estaban haciendo autostop a su coche. Las huellas de Aileen Wuornos se encontrarían en la manilla de su puerta.

Se procedió a difundir dos retratos robot de Aileen Wuornos y Tyria Moore. A su detención posterior también ayudaría que ambas estuviesen vendiendo varios objetos de valor de las víctimas en diferentes casas de empeños.

Una asesina en serie

Aparecerían más cadáveres. Todo cesaría cuando, tras ser detenida, Tyria señaló a Aileen Wuornos como la única autora de los asesinatos. De esta forma, dieron con el paradero de Aileen, quien se encontraba ebria dentro de un coche.

La realidad es que Aileen Wuornos se había convertido en una asesina en serie. No se arrepentía de ello, tal como detalló en el documental Aileen Wuornos: The selling of a Serial Killer (1992), respecto a uno de los asesinatos: “Se lo merecía, lo siento por sus familiares, pero lo que hice fue defenderme”.

Durante el interrogatorio reconoció haber asesinado a siete hombres, y se excusó en que lo había hecho en defensa propia.

En 1992 compareció ante el tribunal, y el 30 de junio de ese mismo año fue condenada a pena de muerte por el asesinato demostrado de tres hombres.

https://www.youtube.com/watch?v=JqXMa6YCiYQ

Condena

Durante su estancia en prisión, concedería varias entrevistas polémicas. Por momentos, su historia puede darnos la sensación de ser un relato ficticio; sin embargo, es terriblemente real. Lo que queda de Aileen Wuornos son todas sus declaraciones donde la verdad y la mentira probablemente se entremezclan.

Hay quien, lejos de defender sus actos, si señala que tal vez Aileen fue víctima de un pasado disfuncional y horrible, y la rabia acumulada la llevó a actuar de la peor forma. La realidad es que Aileen Wuornos encontró su final a las 9.45 horas el 9 de octubre de 2002, ejecutada por inyección letal con 46 años, tras 12 años en el corredor de la muerte de Florida.

Si hay una película relacionada con la vida de un asesino o una asesina serial, esa fue Monster (2003), marcada por la gran interpretación de Charlize Theron, ganadora de un Oscar a la mejor actriz por esta película. Basada en la historia real de Aileen Wournos, sin duda, un largometraje muy recomendable.