Caminar vale la pena, aunque te caigas

Caminar vale la pena, aunque te caigas
Gema Sánchez Cuevas

Revisado y aprobado por la psicóloga Gema Sánchez Cuevas.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 21 septiembre, 2019

Camina, camina, camina. No te canses nunca de caminar, pues ahí reside el porqué de lo que somos, la voluntad de nuestras luchas, la valentía de todos aquellos que no conocen lo que significa rendirse. Aunque te caigas, levántate y sigue: te mereces exprimir la oportunidad de vivir lo que un día dos personas decidieron empezar por ti.

Es al poco tiempo de nacer cuando nos enseñan a caminar y, con ello, a comprender que para hacerlo necesitamos aprender a mantener el equilibrio. De hecho, te caíste una y otra vez pero había alguien para levantarte del suelo, también una y otra vez: caerse significaba volver a empezar.

“Lo que ahoga a alguien no es caerse al río,  sino mantenerse sumergido en él”

-Paulo Coelho-

Así hasta que andar se convierte en la acción individual de mover los pies dando pasos hacia adelante. De repente ocurre que nos acostumbramos a no caer torpemente como cuando éramos pequeños y las caídas físicas dejan paso a las emocionales, ante las que nos cuesta encontrar la manera de levantarnos.

Me equivoqué, ¿cuál es el problema?

Quizá ocurra eso porque las caídas duelan más que antes y las cargas sean cada vez mayores: cargamos con heridas de otros desastres, con la humedad de otras tormentas, con los huecos llenos de nostalgias y con algunas metas frustradas a causa de equivocaciones.

mujer que carga su corazón

Te hicieron daño, lloraste, echas de menos lo que ya no puede ser, te equivocaste y caíste, pero no pasa nada. No se te puede olvidar que, como dijo Eduardo Galeano, caminar vale la pena aunque te caigas.

Los daños no son suficientes para derrotar a quien cree en la posibilidad de la cicatrización, habrá más tormentas y más incendios si decides esperar y no buscar, llegará gente que te levante y ocupe tu mente para que dejes de echar de menos lo que ya no está.

No existe ningún problema en equivocarse. Somos humanos y como tales llegamos a nuestras metas acompañados de fracasos superados y de dudas y flaquezas que consiguieron hacerse fuertes. Es beneficioso seguir mirando al horizonte, sin dejar de creer en la enseñanza de recibir un “no” y en la virtud de conocer bien de qué está hecho el suelo sobre el que pisamos.

“Cuando emprendas tu viaje a Itaca  pide que el camino sea largo,

lleno de aventuras, lleno de experiencias”

-Kavafis-

Solo pierde quien no sabe perder

En mis pocos años de vida he aprendido que nadie pierde si está dispuesto a reconocer lo que gana de los momentos más duros. Porque lo cierto es que siempre ganamos algo aunque toquemos fondo: lo hacemos si somos capaces de utilizar la tierra para escalar el hoyo y salir de él.

Mujer con pájaros de papel volando

Nadie se salva de una caída emocional y me atrevería a decir que es absolutamente necesaria porque su objetivo verdadero es enseñar a limpiarte las rodillas, a curarte los rasguños y a seguir adelante con la experiencia. Es cierto, hay experiencias muy duras cuyos duelos son terribles, pero si buscamos entender las señales del cuerpo y las afrontamos, esto nos ayudará a sentirnos mucho mejor.

Si me caí es porque estaba caminando

Las victorias de esas pruebas continuas serán tu mejor estandarte, los lugares de los que cada vez saldrás más viva. Merece la pena el riesgo de caerse por todas aquellas otras emociones que recibimos durante el resto del camino y por esa gente que está ahí apostando por verte sonreír.

Mujer con cabello azul

Caminar es lo importante: es encontrar el sentido por el que estamos en el mundo y darnos la oportunidad de crecer, es destapar los posibles techos y creer en los sueños, es hacer nuevos planes si los antiguos fallaron, es saborear lo bueno y digerir lo malo. Tenemos que caminar sin rendirnos: siempre puedes, siempre debes, siempre necesitas pensar en ti, continuar.

“Y no vale la pena irse de este mundo

sin haberle dado tantito gusto a la vida”

-Frida Kalho-


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.