La sexualización de l@s niñ@s
Calzas ajustadas, zapatos de tacón, esmaltes de uñas, labial o planchita en el pelo. No, no se trata de una joven caminando, sino de una niña de 8 años. ¿Cómo puede ser esto posible? Lamentablemente, esto ocurre cada vez más en las sociedad occidental y los expertos indican que es negativo para las pequeñas.
Muchas son las reacciones ante este “espectáculo”: susto, sorpresa, bronca, diversión o indiferencia. ¿Las madres son las primeras en la cadena de responsables? Aunque también es verdad que la talevisión, la moda y las tendencias tienen bastante que ver en la adultización de la niñez. A cierta edad las niñas no tienen la posibilidad todavía de elegir qué ropa usar o qué comprar en el centro comercial. Mucho menos de preferir maquillarse o ponerse pestañas postizas. Entonces, ¿cuándo es el momento adecuado para que una niña comience a escoger su look? Mientras sea congruente con los años que tenga o cuando los padres lo decidan.
Cada vez es más frecuente “adultizar” a los pequeños, sobre todo a las niñas. Se puede ver esto en las tiendas y en la televisión. A los tres, cuatro, cinco o seis años, se visten como si tuvieran 18, 19, 20. Uno de los problemas reside en el hecho de que a esa edad, los niños “absorben” todo tipo de información y ello será lo que luego forje su personalidad o sus actitudes.
En países como Estados Unidos, hay una “hiper sexualización” de la niñez, con concursos de belleza, certamenes de Mini Reinas, etc, donde se pueden ver a las pequeñas con uñas esculpidas, extensiones, bronceado artificial y hasta botox en los labios. Este es un problema muy grave en la sociedad actual, porque se trata a los niños como adultos y se “queman” etapas que no vuelven, dice el psicólogo Sergio Fajn.
Si estamos en el ámbito de los juegos, muchas niñas se maquillan o usan tacones como sus madres. Esto también puede ser visto como algo negativo, aunque menos perjudicial para su psiquis. El problema comienza cuando salen a la calle maquilladas y vestidas como señoritas o señoras, cuando quieren ir al jardín de infantes con las uñas pintadas o cuando eligen ropa “sexy” o de grandes en el shopping. Si los padres dejan que las pequeñas traspasen el mundo lúdico y pretendan vestirse de determinada manera como los demás, se está acelerando un proceso, creciendo más rápido, antes de tiempo.
Al tomar la ropa de la madre o de las hermanas más grandes para jugar, están experimentando y aprendiendo, lo mismo que ocurre cuando juegan a la mamá o a cocinar. Muy diferente es cuando desean usar ese atuendo para sus tareas cotidianas como ir a la escuela, visitar familiares o ir a pasear los fines de semana.
¿Cuáles son los riesgos de adultizar a los niños?
-La moda iguala la estética entre los adultos y los pequeños (sobre todo del sexo femenino). El inconveniente es que las diferencias de edades se van “borrando” y esto hace que las niñas crezcan más rápido, eliminando etapas esenciales para su desarrollo.
-Justamente, “pasar de largo” los años de la niñez, la preadolescencia, la juventud, etc. Sienten que ingresaron a un sitio donde no están preparados, ya que deben cumplir con el rol o papel de adultos.
-Los niños pueden perder de vista su recorrido natural en lo físico, lo emocional, lo madurativo, lo social y los sexual.
–Cuando las niñas parecen mujeres, la sociedad puede pretender o exigir con ellas algo que todavía su mente no es capaz de asimilar. También están más expuestas a ciertos peligros de los cuáles no saben cómo salir.
-En el caso de que se adultice a los adolescentes, esto puede traer problemas de conducta o para marcar límites.
¿Cómo evitar la adultización de los niños?
-Esperar hasta los 13 o 14 años para que comiencen a elegir la ropa que usan
-Establecer límites claros
-No “traspasar” deseos o traumas de los padres a los hijos
-Dar el ejemplo
-No dejar que vean cualquier programa de televisión o película