Las autorrevelaciones: ventajas y problemas en la comunicación

Las autorrevelaciones: ventajas y problemas en la comunicación
Sergio De Dios González

Revisado y aprobado por el psicólogo Sergio De Dios González.

Última actualización: 28 septiembre, 2020

¿Qué hacemos cuando conocemos a una persona? Para romper el hielo e iniciar una conversación fluida hacemos uso de las autorrevelaciones, es decir, aportamos información gratuita sobre nosotros mismos. Nadie nos está preguntando por nada personal. Sin embargo, en nuestro intento por establecer un vínculo con la otra persona hacemos uso de esta estrategia.

Las autorrevelaciones son consideradas estrategias porque son una parte importante de nuestras habilidades sociales. Es cierto que hay personas que las utilizan menos que otras. Y aunque su uso sea beneficioso, también pueden derivar en problemas cuando se utilizan en exceso.

Las autorrevelaciones cuando conocemos a alguien

¿Cómo identificamos las autorrevelaciones? Es muy sencillo. Cada vez que expresamos una opinión, manifestamos nuestros deseos o hablamos sobre nosotros mismos estamos utilizando las autorrevelaciones. Como hemos dicho, son una forma de darnos a conocer, una estrategia para crear un ambiente cálido y agradable y a veces, intentar coincidir. Por ejemplo, si damos una opinión y la otra persona está de acuerdo con nosotros, estamos en el buen camino para construir un vínculo.

Cada vez que decimos a alguien dónde vivimos, a qué nos dedicamos o qué nos gusta, estamos usando las autorrevelaciones para intentar establecer un vínculo con la otra persona.

amigas sonriendo y haciendo uso de las las autorrevelaciones

Dar información sobre nosotros mismos resulta muy agradable, ya que crea un clima de confianza e invita a la otra persona a que también hable sobre sí misma. En estas circunstancias, es normal que exista interés y empiecen a hacerse preguntas.

Las autorrevelaciones son muy útiles porque no hay nadie a quien conozcamos más que a nosotros mismos. Si no tenemos muchas habilidades sociales, son un buen comienzo para iniciar alguna conversación. Dar información personal siempre atrae, genera curiosidad e invita a que los demás deseen conocernos mejor.

Sin embargo, aunque hagamos uso de esta herramienta, a veces caemos en ciertos errores. Muchas veces, no sabemos por qué hemos caído mal a una persona o por qué la relación no ha cuajado. Este tipo de situaciones pueden revelar algún problema relacionado con las autorrevelaciones.

Los problemas de las autorrevelaciones

Aunque las autorrevelaciones nos hayan parecido una excelente manera de iniciar conversaciones y conocer nuevas personas, lo cierto es que en ocasiones no nos benefician. A continuación, exponemos algunos de los errores que pueden generar situaciones tensas.

Proyectar una imagen falsa

Toda la información que damos sobre nosotros es “información buena”. No hablamos de nuestros defectos, carencias o debilidades. Si nos excedemos en dar esta información, podemos proyectar una imagen de falsa perfección que puede hacer que perdamos credibilidad.

Puede que nos venga a la mente alguna situación en la que hayamos pensado que otra persona se creía mejor que los demás o que se mostraba como alguien sin ningún defecto. Probablemente, estaba exagerando en lo que decía sobre sí mismo o centrándose demasiado en lo positivo.

chica representando las autorrevelaciones

Excederse dando información

Hay personas a las que les agrada que alguien se sincere con ellas, abriéndose aunque no las conozcan mucho. Sin embargo, hay otras a las que les incomoda cierto tipo de información. Por esto, es necesario que seamos cautos hasta que no conozcamos del todo a la persona con la que estamos interactuando.

Ser demasiado explícitos puede generar sentimientos de rechazo en la otra persona si no la conocemos. No sabemos si tiene alguna creencia o tabú sobre aquello que estamos explicando con tanto detalle.

Por ejemplo, ser demasiado detallista contando algo o expresar los sentimientos con precisión, puede generar cierto rechazo si no hay confianza. De ahí que tengamos que estar muy alerta a la comunicación no verbal de quien está enfrente de nosotros para saber si tenemos que reservarnos algunas cosas.

Es importante tener en cuenta que no brindar ninguna información sobre nosotros y ser herméticos no favorece a la construcción de nuevas relaciones. Lo mismo pasa si nos excedemos con la información y la lanzamos como si estuviésemos hablando con alguien a quien conocemos mucho (sin que este sea el caso). Estos dos extremos son muy negativos. Por eso, el éxito de las autorrevelaciones se encuentra en el equilibrio.

Amigos hablando sobre las autorrevelaciones

Es muy probable que la mayoría de nosotros hayamos cometido errores con las autorrevelaciones. Es normal. No es fácil distinguir qué tipo de información dar en un primer momento o adivinar si a la otra persona le va a sentar mal aquello que le estamos contando. No obstante, de la experiencia se aprende.

Lo más importante es ser conscientes del uso automático que hacemos de esta habilidad social y sobre todo, quedarnos con que las autorrevelaciones refuerzan los vínculos con personas conocidas y nos ayudan a construir relaciones con personas desconocidas. La magia está en el equilibrio.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.