Cómo manejar el tema del dinero en la pareja: claves que te ayudarán

¿Una cuenta bancaria conjunta o mejor una separada? Los temas económicos en la pareja suelen traer más de un quebradero de cabeza. Veamos qué consejos pueden ser de utilidad en estos casos.

Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater.

Última actualización: 01 febrero, 2022

¿Cómo manejar el tema del dinero en la pareja? No nos equivocamos si decimos que este suele ser un tema de discusiones y desavenencias en el seno de muchas relaciones afectivas. Llama la atención incluso cómo en ocasiones cada miembro de ese vínculo tiene una percepción diferente sobre el dinero. Hay quien tiene una mentalidad más ahorradora y otros en cambio viven más al día.

Desde la psicología económica nos señalan que esa visión que tenemos hacia el aspecto económico viene heredada por aquello que hemos visto en nuestra casa en muchos casos. Los patrones en la conducta del gasto y el ahorro suelen repetirse a menudo entre padres e hijos. Esto hace que en ocasiones cuando empezamos a hacer nuestra vida con alguien, nos veamos en situaciones inesperadas.

¿Hacemos una cuenta bancaria conjunta uniendo tu sueldo y el mío? ¿O mejor nos quedamos tal y como estamos, es decir, cada uno con su cuenta corriente? Esta suele ser sin duda la pregunta más común. Aunque lo cierto, es que existen una serie de cuestiones en materia monetaria que deberíamos considerar antes de dar el paso a vivir con alguien. Las analizamos.

Claves sobre cómo manejar el tema del dinero en la pareja

Son muchas las parejas que lidian ahora mismo con serios problemas económicos. La vida da muchos cambios y, en ocasiones, nos enfrentamos a épocas de dificultades en las que es necesario saber actuar en conjunto. No es de extrañar por tanto, que la psicología se haya interesado durante décadas en intentar comprender estas situaciones tan cotidianas en muchas familias.

Trabajos, como los realizados en la Universidad de Wisconsin-Madison, nos indican que uno de los conflictos más comunes en una relación afectiva parte de las discrepancias en temas económicos. Es más, desde la propia Asociación Americana de Psiquiatría (APA) destacan algo curioso en lo que reflexionar. Cuando iniciamos una relación siempre nos fijamos en esos aspectos en los que coincidimos: aficiones, valores, proyectos de futuro, mismas vivencias experimentadas, etc.

Ahora bien, llama la atención que no todas las personas ponen la atención en si la otra persona tiene la misma concepción del dinero que uno mismo. Y tengámoslo claro, hablar de aspectos económicos no es ser superficial ni indiscreto. Es, a fin de cuentas, comprender cómo va a poder sustentarse ese proyecto de dos personas de cara a un futuro en común.

Por tanto, saber cómo manejar el tema del dinero en pareja es algo básico y esencial. Descubramos qué aspectos deberíamos tener en cuenta.

Honestidad sobre nuestra situación económica: este es mi sueldo actual

Cuando estamos en una relación y surge la propuesta de hacer vida en común, hay una conversación muy necesaria que debemos mantener con la pareja. Es necesario ser honestos con nuestra situación económica y tener claro qué sueldo tenemos cada uno. Saberlo no es indiscreción, es saber con claridad si podremos pagar una casa en común y qué aspectos nos podremos permitir.

Es esencial comprender un aspecto: ser pareja es algo más que comer, dormir y vivir juntos. Tener una relación bajo un mismo techo implica también hacer gastos en conjunto y ante ello es prioritario saber en qué situación económica nos encontramos.

¿Qué concepción tienes tú sobre el dinero?

Esta no es una pregunta con truco ni aún menos una cuestión menor. De hecho es decisiva. Para saber cómo manejar el tema del dinero en la pareja es necesario saber qué concepción tenemos ambos sobre el tema económico. De este modo, las cuestiones en las que deberíamos hablar con la otra persona son las siguientes:

• ¿Eres más de ahorrar o de gastar?
• ¿Qué te enseñaron tus padres sobre el dinero?
• ¿Tienes alguna meta en el aspecto financiero? ¿Te gustaría ahorrar para algo en concreto?
• ¿Eres de los que gasta a veces por mero impulso o meditas mucho tus compras?

Evidentemente, muchos de estos aspectos los podemos ver en el día a día. Porque bien es cierto que, en ocasiones, la realidad puede distar un poco de aquello que nos digan.

Qué estilo de vida vamos a mantener y de dónde va a salir el dinero

Un aspecto clave para saber cómo manejar el tema del dinero en la pareja es clarificar qué estilo de vida vamos a llevar. Si el objetivo es ahorrar para alcanzar un objetivo puntual (la entrada de una casa, hacer un viaje, etc.), el día a día de esa relación supondrá reducir parte de los gastos para lograr esa meta.

Ambos miembros de la pareja deben estar de acuerdo en esos objetivos y cumplirlos por igual. No vale que, de pronto, uno de los dos haga un consumo excesivo y el ahorro acabe perdiéndose.

Autonomía individual pero cumpliendo los objetivos en común

No podemos olvidar que algo que suele darse en ocasiones en una relación es el abuso económico. Es decir, a veces un miembro de la pareja se alza como el controlador único de todas las cuentas del hogar. Es más, se dan casos en que uno de los dos deja sin acceso económico a la otra persona.

Para que una relación sea feliz y satisfactoria cada miembro debe tener plena autonomía de sus propias cuentas. No puede haber un único controlador que decida por los dos. El objetivo es tener plena confianza mutua sabiendo que tenemos un objetivo común, que somos dos personas responsables comprometidas en la economía del hogar.

Cómo manejar el tema del dinero en la pareja: ¿cuentas bancarias juntas o separadas?

Esta es una de las cuestiones más habituales a la hora de saber cómo manejar el tema del dinero en la pareja. ¿Cuenta bancaria conjunta o por separado? Bien, tanto si lo queremos como si no, en el aspecto económico muchos necesitan diferenciar entre lo tuyo, lo mío y lo nuestro. Por ello, es habitual seguir la siguiente estrategia (siempre y cuando eso sí, el sueldo lo permita).

• Cuentas personales individuales más una cuenta conjunta para gastos en común como la hipoteca, alquiler del piso, gastos de luz, agua, internet, alimentación, etc.

Asimismo, es importante llegar a acuerdos sobre lo que consideramos como “gastos conjuntos”. Aunque claro está, hay más opciones. Cada pareja debe consensuar aquello que más les defina.

No obstante, como bien sabemos, el día a día cambia con frecuencia y en ocasiones se depende de un único sueldo. Lo decisivo es saber llegar a acuerdos y basar las finanzas en la confianza y la prudencia.