71 frases de Khalil Gibran para reflexionar
Las frases de Khalil Gibran hablan del amor, la libertad, la espiritualidad, la conciencia y la unión mundial. Son un regalo lleno de sabiduría para todo aquel que quiera reflexionar y profundizar no solo en uno mismo, sino también en las relaciones con los demás.
Yibrán Jalil Yibrán, comúnmente conocido como Khalil Gibran, fue un pintor, poeta, novelista y ensayista libanés. Dedicó gran parte de su vida y obra a la resolución de conflictos sociales y culturales y desarrolló una conciencia universal capaz de trascender las barreras de Oriente y Occidente.
Una de sus mayores preocupaciones siempre fue cómo conseguir la unidad en un mundo fragmentado, cómo lograr la convivencia en armonía de las diferentes tradiciones; seguramente inspirado por sus complicadas experiencias como inmigrante en un país de adopción.
Gibran reunía influencias muy diversas, desde Nietzsche hasta el cristianismo, el islam o poetas románticos como William Blake. No obstante, su obra también marcó a un gran número de personas y lo sigue haciendo a día de hoy. Cantantes como John Lennon o David Bowie lo mencionan en algunas de sus canciones y, según cuentan, Elvis Presley regalaba El Profeta, una de sus obras más famosas, a amigos y conocidos.
Sin duda, el poeta del exilio (como también era conocido) dejó un legado impregnado por diversas corrientes, tanto a nivel filosófico como artístico y religioso. Las siguientes frases de Khalil Gibran son prueba de ello.
1. La trampa del egoísmo
“El egoísmo, amigo mío, origina ciegas disputas, y las disputas engendran guerras, y las guerras traen consigo la autoridad y la fuerza, que son la causa de los enfrentamientos y la opresión”.
Ser egoístas implica mirar únicamente por uno mismo sin tener en cuenta a los demás, a pesar del daño o las consecuencias negativas que se puedan originar. Es desear la satisfacción resultante de sentirse poderoso y con autoridad, desterrar la empatía y la preocupación por lo demás.
Casi todas las desgracias ocurridas a lo largo de la historia nacieron a partir de una semilla de egoísmo que aspiraba a más y más hasta convertirse en soberbia, orgullo y autoridad. Por esta razón, hay que tener cuidado con nuestras aspiraciones y deseos de poder, porque aunque está bien poner límites y mirar por uno mismo, también lo es ser conscientes de que no causaremos grandes sufrimientos en los demás.
2. Regalar tiempo de calidad
“No busques al amigo para matar las horas, sino búscale con horas para vivir”.
Esta es una de las frases de Khalil Gibran que tenemos que tener presente en la construcción de nuestras relaciones. Si vamos a dedicar tiempo a otra persona, más vale que este sea de calidad, de ese que nos permite escuchar al otro y conocerlo, compartir momentos y saborear el bienestar.
De poco sirve quedar con alguien porque estamos aburridos y no sabemos qué hacer. El tiempo de cada uno de nosotros es mucho más que un conjunto de horas y minutos, es vida. Por lo tanto, no lo malgastemos ni hagamos que lo pierdan los demás.
3. El valor de arriesgarse
“Solo la semilla que rompe su cáscara es capaz de atreverse a la aventura de la vida”.
Arriesgarse, trascender los miedos e ir más allá, ese es el mensaje que desprende esta frase. Hay que deshacerse de la seguridad para avanzar, desprenderse de lo cómodo y salir a descubrir otros caminos y otras perspectivas.
4. La luz que habita en la oscuridad
“No se puede llegar al alba sino por el sendero de la noche”.
Una frase de Khalil Gibran que nos hablan del baile de los opuestos, de la polaridad entre la luz y la oscuridad y de cómo ambas se necesitan, a pesar de todo.
En la oscuridad, en esas zonas más oscuras y sombrías de nosotros mismos, en esos momentos de desolación también habitan destellos, zonas luminosas que tenemos que aprender a ver. En cada uno de nosotros hay luz y oscuridad, un aprendizaje que nace de la aceptación de nuestros monstruos que tenemos que aprender a desvelar.
5. Dar desde el corazón
“Y hay quienes tienen poco pero lo dan todo. Estos últimos creen en la vida y en la generosidad de la vida, es por lo que sus cofres jamás están vacíos”.
Dar es un gesto repleto de amor cuando no se espera nada, cuando crece desde la bondad hacia los demás. Por eso a veces la cantidad no es importante, sino la intención que conlleva.
Dar es brindar apoyo, es regalar una parte de nosotros para ayudar a los demás. Por eso, cuando se hace de verdad, desde lo más profundo del corazón, no se experimenta la necesidad.
6. Amar al enemigo
“Mi enemigo me dijo: “Ama a tu enemigo”. Y yo le obedecí y me amé a mí mismo”.
El enemigo más importante al que tenemos que hacer frente es a nosotros mismos. ¿Cuántas veces nos hemos boicoteado? ¿De qué forma nos hablamos? ¿Cómo nos impedimos ser felices?
A veces, estamos tan acostumbrados a tratarnos mal que ni siquiera somos conscientes. Tan solo hace falta revisar nuestro diálogo interno para conocer las exigencias y obligaciones que nos imponemos para ser perfectos, los castigos que nos ponemos y los desprecios que nos hacemos.
Nunca seremos perfectos, tenemos que concienciarnos de ello. Está bien tener aspiraciones y querer avanzar, pero no maltratarnos si las cosas no salen como queríamos. La clave es querernos, aceptarnos y descubrir la belleza oculta en nuestras imperfecciones.
7. El silencio que hay en la envidia
“El silencio del envidioso está lleno de ruidos”.
La envidia está cargada de ruido, aunque su mejor disfraz sea el silencio. Un ruido que procede de las comparaciones continuas, de esos pensamientos que bombardean a la persona que la experimenta y que le dicen constantemente que el otro es mejor y tiene que superarlo.
Se trata de una emoción que focaliza la atención en el exterior y que provoca un gran sentimiento de inferioridad. La envidia refleja lo que falta, además de un profundo rechazo hacia uno mismo. De ahí, que la mejor opción sea tener presente que solo nosotros somos nuestra única medida.
8. La fuerza que nace del sufrimiento
“Del sufrimiento han emergido las almas más fuertes. Los caracteres más fuertes se forjan a base de cicatrices”.
La comprensión del sufrimiento es un tema principal en las frases de Khalil Gibran y que además refleja su gran sabiduría. La capacidad de reponernos, de aceptar nuestras heridas para poder sanarlas, es lo que nos permite avanzar y lo que, poco a poco, forja nuestro carácter resiliente.
9. La relación entre la alegría y la tristeza
“Vuestra alegría es vuestra tristeza sin máscara. El mismo pozo que da nacimiento a vuestra risa se ha llenado infinitas veces con vuestras lágrimas. ¿Y cómo podría ser sino así? Cuanto más profundamente clave la tristeza su garra en vuestro ser, tanto más alegría podréis contener”.
Con esta frase, Khalil Gibran nos recuerda que la tristeza y la alegría se encuentran en la misma balanza, ambas se dan sentido, aunque parezca una contradicción.
Si bloqueamos nuestra capacidad de estar tristes, estaremos impidiendo el paso para la expansión de nuestra alegría. Por lo que ambas emociones se complementan. De hecho, si examinamos nuestras experiencias, comprobaremos que existe una doble cara en cada una de ellas.
10. El poder del amor
“La vida sin amor es como un árbol sin flores ni frutos”.
El amor es el eje central de la perspectiva de Khalil Gibran. Un amor universal, que trasciende todo y que hace posible la unidad. Un amor expansivo y bondadoso, que no entiende de necesidad ni de exigencias, pero sí de libertad y aceptación y que está unido a la belleza, el espíritu y la vida.
11. Amor y libertad
“Amad con devoción, pero no hagáis del amor una atadura. Haced del amor un mar móvil entre las orillas de vuestras almas.”
-Khalil Gibran-
Reafirmando el punto anterior, esta frase de un famoso poema del autor nos invita a pensar en el amor desde la libertad y la plenitud, no desde los lazos y los vínculos forzados. Esta forma de entender el amor nos hace cuestionar muchos imaginarios acerca del amor como posesión y nos muestra cómo amar a alguien implica construir una conexión con otra alma.
12. Ética y moral
“El que usa su moralidad como su más bella vestidura mejor andará desnudo.”
Esta contundente frase del poeta nos muestra cómo nuestros valores y principios deben ser estructurales en nosotros y nuestro accionar. Usar los preceptos morales cuando resultan convenientes o solo por aparentar ante los demás solo deja en evidencia una fuerte pobreza espiritual.
13. Amor al trabajo
“Porque cuando trabajáis con amor estáis en armonía con vosotros mismos, y con los otros, y con Dios. ¿Y qué es trabajar con amor? Es tejer la tela con hilos sacados de vuestro corazón, es como si vuestro ser más amado tuviera que vestirse con esa tela. Construir una casa con cariño, como si vuestro ser más amado hubiese de morar en ella. Es sembrar con ternura y cosechar con gozo, como si vuestro ser más amado hubiera de comer su fruto.”
Por último, una frase que nos habla del amor al trabajo, pero no desde un discurso de la autoexplotación o de la acumulación de riqueza. Este amor al trabajo emerge del deseo de cuidar del bienestar de otros y de dar cada uno nuestro mayor esfuerzo para la felicidad colectiva.
Otras frases de Khalil Gibran
En la misma línea de reflexión sobre la verdad, el amor y la libertad, Khalil Gibran es un catálogo de frases inspiradoras sin parangón. Es por ello que aquí te queremos dejar algunas de ellas que se entienden sin necesidad de explicaciones:
- Atención al sol que se alza en la oscuridad.
- Cuando estéis alegres, mirad en el fondo de vuestros corazones y hallaréis que lo mismo que os da hoy alegría fue aquello que os llenó ayer de tristeza. Y cuando estéis tristes, mirad de nuevo y descubriréis que estáis llorando por aquello que fue ayer vuestro deleite.
- Si amas a alguien, déjalo libre porque si regresa siempre fue tuyo. Y si no lo hace, nunca lo fue.
- Si revelas tus secretos al viento, no debes culpar al viento por haberlos revelado a los árboles.
- Del sufrimiento han emergido las almas más fuertes. Los caracteres más fuertes se forjan a base de cicatrices.
- Un día me preguntarás que es más importante, si mi vida o la tuya. Yo diré que la mía y tú te irás sin saber que tú eres mi vida.
- No digas, ‘He encontrado la verdad’, sino más bien, ‘He encontrado una verdad’.
- Todos somos prisioneros, pero algunos de nosotros estamos en celdas con ventanas y otros no.
- Y no olvides que la tierra se deleita al sentir tus pies descalzos y los vientos anhelan jugar con tu cabello.
- Porque el pensamiento es un ave del espacio, que en una jaula de palabras podría desplegar sus alas, pero no volar.
- Y en mi locura he hallado libertad y seguridad; la libertad de la soledad y la seguridad de no ser comprendido, pues quienes nos comprenden esclavizan una parte de nuestro ser.
- Aprendí el silencio con los habladores, la tolerancia con los intolerantes y la gentileza con los groseros. Aún por extraño que pueda parecer, soy ingrato para con esos profesores.
- La apariencia de las cosas cambia según nuestras emociones; y así vemos la magia y la belleza en ellas, mientras que la magia y la belleza están realmente en nosotros mismos.
- Nosotros, los que erramos buscando siempre el camino más solitario, no empezamos un día donde el otro concluyó, y ningún amanecer nos sorprende donde el ocaso nos dejó. Viajamos aun cuando la tierra duerme. Somos las semillas de una planta tenaz y es en nuestra madurez y plenitud de corazón cuando nos entregamos al viento para ser diseminadas.
- Siempre se ha sabido que el amor no conoce su propia profundidad hasta la hora de la separación.
- ¿Qué es el mal sino el bien torturado por su propia hambre y sed?
- Si de verdad debes ser sincero, sé sincero y hermoso.
- Las flores de los campos son las hijas del cariño del sol y del amor de la naturaleza. Y los hijos de los hombres son flores del amor y de la compasión.
- “El amor no da nada más que a sí mismo, no toma nada más que de sí mismo. No posee ni es poseído. Porque el amor es suficiente para el amor.
- La perplejidad es el comienzo del conocimiento.
- Cuanto más profundo es el dolor que esculpe su ser, más es la alegría que podrá contener.
- Me consideran loco porque no quiero vender mis días por oro. Y yo los considero locos porque creen que mis días tienen precio.
- La verdadera fuerza que impide que el corazón sea herido es la que le evita crecerse con su grandeza interna. El canto de la voz es melodioso, pero el canto del corazón es la voz pura del cielo.
- En una gota de agua se encuentran todos los secretos de todos los océanos, en un aspecto de ti se encuentran todos los aspectos de toda la existencia.
- Muchos de nosotros pasamos toda nuestra vida huyendo de los sentimientos con la creencia errónea de que no puedes soportar el dolor. Pero ya has soportado el dolor. Lo que no has hecho es sentir todo lo que eres más allá de ese dolor.
- El progreso no consiste en mejorar lo que es, sino en avanzar hacia lo que será.
- La luz de las estrellas que se han extinguido hace años todavía nos alcanza. Igual que los hombres ilustres que han muerto hace siglos, que nos alcanzan con las radiaciones de su personalidad.
- La generosidad está en dar más de lo que puede, y el orgullo está en tomar menos de lo que necesitas.
- En la dulzura de la amistad debe flotar la risa y los placeres compartidos. Porque en el rocío de las cosas pequeñas, el corazón encuentra su alborada, su mañana y se refresca.
- Un hombre que no puede tolerar los pequeños defectos de una mujer, jamás podrá disfrutar de sus grandes virtudes.
- La tristeza no es más que una pared entre dos jardines.
- Trabajar con amor es construir una casa con cariño, como si vuestro ser amado fuera a habitar en esa casa.
- El ruiseñor se niega anidar en la jaula para que la esclavitud no sea el destino de su cría.
- Amigo mío… yo no soy lo que parezco. Mi aspecto exterior no es sino un traje que llevo puesto; un traje hecho cuidadosamente, que me protege de tus preguntas, y a ti, de mi negligencia. El ‘yo’ que hay en mí, amigo mío, mora en la casa del silencio, y allí permanecerá para siempre, inadvertido, secreto.
- Es nuestro yo interno el que sufre cuando desobedecemos y el que nos mata cuando lo traicionamos.
- El Infierno no está en el remordimiento, está en el corazón vacío.
- Si tu corazón es un volcán, ¿cómo esperas que broten las flores?
- La amistad es siempre una dulce responsabilidad, nunca una oportunidad.
- Las cosas materiales matan al hombre sin sufrimiento, el amor lo reanima con vivificantes dolores.
- Las lágrimas son fuego que purifica el amor, haciéndolos nítidos y hermosos por una eternidad.
- Tu vida está determinada no por lo que la vida te trae, sino por la actitud que tú traes a la vida. No es lo que te sucede, sino la forma en que tu mente mira lo que sucede.
- De los dos premios principales de la vida, la belleza y la verdad, encontré el primero dentro de un corazón cariñoso y el segundo en la mano de un trabajador.
- Das poco cuando das tus posesiones. Es cuando das de ti mismo cuando realmente das.
- No progresas mejorando lo que ya está hecho, sino esforzándote por lograr lo que aún queda por hacer.
- Los dones que provienen de la justicia son superiores a los que se originan en la caridad.
- Que no haya ningún propósito en la amistad sino en la profundización del espíritu.
- La sabiduría deja de ser sabiduría cuando se vuelve demasiado orgullosa para llorar, demasiado grave para reír, y demasiado egoísta para buscar otra que no sea ella misma.
- Porque la vida y la muerte son una, así como el río y el mar son uno también.
- Solo la semilla que rompe su cáscara es capaz de atreverse a la aventura de la vida.
- El egoísmo, amigo mío, origina ciegas disputas, y las disputas engendran guerras.
- Aléjame de la sabiduría que no llora, la filosofía que no ríe y la grandeza que no se inclina ante los niños.
- El cariño y la bondad no son signos de debilidad y desesperación, sino manifestaciones de fuerza y resolución.
- Del hablador he aprendido a callar; del intolerante, a ser indulgente, y del malévolo a tratar a los demás con amabilidad. Y por curioso que parezca, no siento ninguna gratitud hacia esos maestros.
- Bueno es dar cuando nos piden; pero mejor es dar sin que nos pidan, como buenos entendedores.
- El pesar y la pobreza purifican el corazón del hombre, aunque nuestras mentes débiles no ven nada de valor en el universo, salvo la comodidad y la felicidad.
- El tirano reclama vino dulce de las uvas ácidas.
- Cuando el amor te llame, síguele, aunque sus caminos sean difíciles y escarpados. Y cuando sus alas te envuelvan, cede a él, aunque la espada oculta entre sus plumas pueda herirte.
- Algunos oyen con las orejas, algunos con el estómago, algunos con el bolsillo y algunos no oyen en absoluto.
Como vemos, las frases de Khalil Gibran son una invitación a la reflexión sobre cómo estamos y hacia dónde vamos. Un valioso legado por todo lo que inspiran y enseñan, una colección de pensamientos que dejan huella y que impulsan a conocer otra perspectiva desde la que seguir creciendo.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Martínez Lillo, R (1994). Cuatro autores de la “liga literaria”. Madrid: CantArabia.
- Bushrui, S., & Jenkins, J. (2014). Kahlil Gibran: Man and Poet. Simon and Schuster.