Al menos, no te rindas antes de intentarlo
“El hombre razonable se adapta al mundo. El irrazonable persiste en intentar adaptar el mundo a sí mismo.
Por lo tanto, todo el progreso depende del hombre irrazonable.” ~ George Bernhard Shaw
Si quieres, puedes. Es fácil de decir, pero no siempre es fácil de hacer. Mucho dirán: no puedo, por mucho que lo quiero. Tal vez no lo quieran suficientemente. Y es que a veces las circunstancias son muy complicadas, y hay que hacer frente a situaciones que escapan a nuestro control. O tal vez, simplemente, no tenemos muy claro lo que queremos o estamos confundiendo los términos.
En cualquier caso, es muy importante tener en cuenta que querer algo exige motivación, determinación y perseverancia, tres cualidades que tienen que brotar de nosotros mismos, que somos nosotros quienes tenemos que manejar. Cuando las situaciones se tuercen en cuando podemos demostrar mejor estas cualidades, cuando las podemos poner en práctica. Echarle la culpa a los otros o a las circunstancias no sirve de nada, porque eso no nos va a devolver lo que teníamos ni nos va a colocar donde queremos estar. En vez lamentarse, utilizar esas energías para luchar es más efectivo.
Cómo aumentar la determinación y maximizar la motivación
Hay situaciones que pueden necesitar una gran determinación para salir adelante y sacar adelante a los nuestros. Enfrentarse a una enfermedad, superar un divorcio, tener éxito en un negocio o emprendimiento, progresar en los estudios, ponerse en forma o cambiar de vida, entre otras muchas cosas, son situaciones que pueden necesitar una dosis extra de motivación para salir adelante.
Veamos algunas ideas para ser más perseverantes y ponernos en marcha cuando las cosas se ponen difíciles.
#1 – Busca inspiración en otros
Hay cientos de historias reales de personas extraordinarias en las que inspirarse. Y si miras hacia atrás en la historia puedes descubrir que nuestros antepasados superaron situaciones durísimas y lograron cosas increibles.
En cualquier caso, las historias de superación están llenas de dramas que muchas veces harán que veas que tu problema de otra forma. Pero no se trata de pensar que otros en situaciones peores han salido adelante para que veas que lo tuyo, en comparación, es una tontería. Pues no, porque a cada uno le duele lo suyo. Lo importante es la superación de los obstáculos. En estas historias de superación puedes ver claramente que no existen más límites que los que tú te pones. La esencia es superar las propias limitaciones y no confundirlas con los límites.
#2.- No pienses, actúa
Podemos pensar en nosotros mismos fuera de problemas, en torno a diferentes situaciones, en las soluciones, pero también en lo peor que nos puede pasar, en lo más negativo. “Yo no puedo seguir” es un pensamiento que puede ser un autoengaño. Si tienes que seguir,debes hacer caso omiso de este tipo de pensamientos, no pensarlo tanto y tirar para adelante. Deja de pensar en límites y simplemente sigue. Hazlo sin pensar en lo que hubiera sido o en lo que podría ser.
#3. – Fortalece tu voluntad trabajando sobre ella
La fuerza de voluntad, como un músculo, se hace más fuerte cuanto más lo usas. Cuanto más ejercites tu voluntad y determinación, ésta será más fácil de usar, y será algo mucho más natural. Así, la pereza no te vencerá tan fácilmente, y el esfuerzo físico y mental que necesitas no te asustará, porque sabes que lo puedes hacer.
#4.- Piensa en lo que realmente quieres
¿Cómo quieres que sea tu vida? ¿Eres feliz viviendo de la manera que estás viviendo ahora? ¿Tu felicidad depende de que las cosas que pasan a tu alrededor bailen al ritmo que tú marcas o haces lo posible por adaptarte a lo que te toca vivir? La determinación exige acción sobre tu vida, no deseo que las cosas que dependen de otros sean de otra manera. No pongas tus esfuerzos en conseguir que los otros hagan o consigan lo que tú quieres. Lo que quieras de la vida debes conseguirlo tú. Por lo tanto, ten claro lo que quieres antes de desesperante por lo que no tienes.
#5. – Imagina un centro de poder dentro de ti
A veces la vida requiere que seas incontenible, inexpugnable, decidido y que estés muy centrado. Imagina que dentro de ti hay un centro de poder, una gran bola de fuego o cualquier otra cosa que puedas visualizar. Imagina que ese centro de poder se activa y te empuja, te mueve, te lanza. Cierra los ojos y siéntelo.
#6.- No te rindas nunca
La vida es como una carrera. Corres con tus compañeros, o al menos rodeado de gente, pero tienes que llegar a la meta tú solo. Tardes lo que tardes, si no llegas estás perdido. Encontrarás obstáculos en el terreno, en tus compañeros de carrera, en el tiempo… pero tienes que llegar, aunque sea a rastras. Si escuchas con atención, mucha a gente a tu alrededor te animará. ¿No hay nadie? Busca en tu interior, y anímate a ti mismo, escucha esa voz que te anima a dar un paso más, y otro, y otro. No pienses en las dificultades, simplemente avanza. No te rindas. Porque si lo haces, te quedas fuera.