Comportamiento humano: raíces evolutivas y patrones heredados
¿Qué es la psicología, sino el estudio del comportamiento humano? Conocer las mismas entrañas del porqué de lo que hacemos, pensamos y sentimos es el objetivo de muchos científicos.
Para ahondar en una cuestión tan compleja como el comportamiento no se pueden olvidar las raíces que la configuran, es decir, la herencia genética, el resultado de la evolución de nuestra especie. Eso es lo que encontrarás aquí, una exploración sobre patrones de comportamiento heredados.
¿Cómo influye la genética en el comportamiento humano?
Si bien el ambiente tiene un papel moldeador innegable en la conducta de un individuo, tampoco se puede ignorar que la genética aporta un peso en la configuración de la personalidad, la emocionalidad y ciertos comportamientos.
Han sido los estudios genéticos y con gemelos los que acarrean el mayor peso de la investigación, relacionando genes concretos con rasgos como la inteligencia o la impulsividad. Asimismo, existen predisposiciones genéticas a determinados trastornos, como la depresión, las adicciones y el espectro autista.
Un campo emergente a este respecto es la epigenética, que analiza cómo el ambiente modifica las expresiones genéticas. Estos cambios, además, serían heredables, por lo que se trata de una manera novedosa de explorar la interacción entre herencia genética e influencia del ambiente. Sería una muestra de esto cómo el estrés o la exposición a sustancias tóxicas modifican el comportamiento.
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¿Qué es un comportamiento heredado?
Se entiende por comportamiento heredado aquel que tiene una base genética y que, además, se transmite a través de las generaciones. Entre ellos se hallan modelos de interacción social, por ejemplo; también rasgos de personalidad y tendencias hacia determinados patrones, como la adicción.
¿Qué comportamientos son heredables?
Aunque parezca inverosímil en un primer momento, son muchos los comportamientos, rasgos y tendencias con una base genética. Echa un vistazo a los que, enseguida, pasamos a listar:
- Comportamiento adictivo: existen personas más susceptibles a caer en adicciones, ya sea a sustancias o de otro tipo, como la ludopatía.
- Inteligencia: son varios los genes identificados en la determinación de la capacidad cognitiva de un individuo. En este estudio publicado en Molecular Psychiatry tienes un buen resumen para satisfacer tu curiosidad.
- Agresividad: el comportamiento humano agresivo, de igual manera, cuenta con bases genéticas heredables, de acuerdo con un trabajo divulgado en Frontiers in Behavioral Neuroscience. Como ya advertimos, la epigenética juega un papel fundamental al modular la expresión de estos genes.
- Rasgos de personalidad: los estudios con base en el modelo de los cinco grandes rasgos de personalidad estiman que la herencia genética explica entre el 40 y el 60 % del comportamiento, señala un artículo de Translational Psychiatry. No obstante, aún no se conocen qué genes determinan esta variación.
- Trastornos del estado de ánimo: la predisposición genética es relevante en la aparición de trastornos como la depresión o la bipolaridad. Citando a Eric Dunn et al. (2015), «las personas con trastorno depresivo mayor tienen tres veces más probabilidades que aquellos sin el trastorno de tener un pariente de primer grado que también tenga depresión».
No todo se reduce a un gen: patrones de herencia
Es erróneo afirmar que un gen es el responsable de comportamientos o tendencias. Si bien algunas conductas siguen un patrón de herencia mendeliana (es decir, basados en la herencia autosómica dominante o recesiva), la mayoría de ellas resultan de la interacción de múltiples genes. A esto, por supuesto, habría que añadirle los factores ambientales.
Para averiguar estos conjuntos de genes, existen los estudios de genoma completo. De esta manera se indagan las variantes genéticas en una persona y se asocian con determinados comportamientos.
Un ejemplo de tales estudios es el llevado a cabo por Okbay et al. (2016), con el propósito de averiguar el conjunto de genes relacionados con el éxito educativo. Con una gran muestra multiétnica, fueron capaces de identificar 74 loci diferentes que explicaban, al menos, el 20 % de la variación entre individuos en esta variable.
Conclusiones sobre la heredabilidad del comportamiento humano
Como has visto, la herencia genética tiene un peso remarcable en la explicación de la conducta de nuestra especie. En muchos casos, casi la mitad de la variabilidad está argumentada por el genoma del individuo: una parte del éxito académico, referenciando el ejemplo anterior, sería cuestión de suerte.
No obstante, aún queda mucho por descubrir, pues la genética es un campo aún inexplorado en comparación con otras áreas de la naturaleza humana. Además, si a esto se le agrega la influencia del ambiente, son muchos los factores que aún faltan por entrelazar para precisar el porqué del comportamiento humano.
De momento, estos análisis resultan bastante útiles en miras a comprender áreas antes sujetas a la especulación, como son la inteligencia y algunos trastornos. De dicha comprensión alcanzaremos una mayor calidad de tratamiento, de educación y, en definitiva, de convivencia entre congéneres. El camino es largo, pero se recorre con esperanza.
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