¿Cuál es el papel de los abuelos en la familia?
Si pensamos en nuestra infancia, seguramente haya una figura que tenga un papel relevante en ella: la de nuestros abuelos. Son personas que recordamos siempre ahí para nosotros, dispuestos a jugar (casi) a lo que fuera o a comprarnos una chuche o un juguete cuando nuestros padres no querían.
Les adorábamos, ¿verdad? Pero la cosa cambia cuando tenemos nuestros propios hijos y son nuestros padres los que se convierten en los abuelos. Ahí la situación varía y el papel de los abuelos en la familia puede tornarse en el de generadores de conflictos… ¿Perjudican más que benefician o es a la inversa?
“Seguramente dos de las experiencias más satisfactorias de la vida son ser nieto o ser abuelo”
-Donald A. Norberg-
El papel de los abuelos en la familia como generadores de conflicto
Todos hemos oído alguna vez aquello de que los padres crían y los abuelos malcrían, ¿verdad? La realidad es que, generalmente, los abuelos suelen ser menos exigentes que los padres y se toman las conductas inapropiadas de los pequeños desde una perspectiva más calmada.
Es común que piensen que ellos educarían a sus nietos de forma distinta a como lo están haciendo sus propios hijos, lo cual puede hacer que se generen conflictos si los progenitores sienten que su autoridad como padres se está siendo cuestionada.
“Es natural que a menudo nos sentimos más cerca de las generaciones lejanas que de las que nos preceden inmediatamente”
-Igor Stravinsky-
La realidad es que esa mayor sobreprotección de los abuelos no tiene por qué derivar en que los niños desobedezcan a sus padres, pero es importante que papás y abuelos tengan claro mediante una comunicación fluida cuáles son los valores y las normas vertebrales en la educación.
El papel de los abuelos en la familia como mediadores
De hecho, si conseguimos que padres y abuelos se vean como aliados en vez de como contrincantes, la educación de los pequeños se va a ver muy beneficiada. En primer lugar, porque los mayores van a poder ejercer como mediadores en los conflictos que surjan (como es habitual) entre padres e hijos.
Si los abuelos son capaces de tomar una postura que equilibre a las dos partes, pueden ser una fuente de solución de problemas muy conveniente para todos. Por un lado, el papel de los abuelos en la familia en conflicto puede ser el de facilitadores de la comunicación.
Pero no solo eso, también pueden aportar calma y perspectiva al problema. Además de poder ofrecer distintas alternativas de solución y asegurarse de que tanto padres como hijos ponen en marcha efectivamente el acuerdo al que finalmente lleguen. De alguna manera pueden actuar como garantía de este tipo de pactos.
“Lo que los niños necesitan más son los elementos que los abuelos proveen en abundancia. Dan amor incondicional, amabilidad, paciencia, humor, comodidad, lecciones de vida. Y lo más importante, galletas”
-Rudy Giuliani-
El papel de los abuelos en la familia como apoyo emocional para hijos y nietos
Pero el papel de los abuelos en la familia va más allá. Es innegable que pueden llegar a ser un gran apoyo emocional para sus propios hijos y para los nietos. En primer lugar, cuando nos embarcamos en la aventura de la paternidad esta puede suscitar emociones negativas: la educación de los pequeños no es tarea fácil, o al menos no siempre lo es.
Contar con la experiencia y los consejos de los más mayores nos puede dar una seguridad extra en el día a día con nuestros hijos. Para que nos proporcionen el apoyo que necesitamos, es importante que esta relación se base en la escucha, el entendimiento y la empatía mutuos, de forma que se respeten las pautas de educación, así como lo que podamos dar y recibir ambas partes.
Por otro lado, lo que los abuelos aportan a los nietos es innegable. En primer lugar son una fuente de tolerancia y cariño insustituible. Además, nos ayudan a descubrir quiénes somos cuando nos cuentan historias sobre nuestra familia. Pero no solo eso, también fomentan nuestro sentido de la responsabilidad, ya que son de las primeras personas que aprendemos a cuidar para intentar asegurar su bienestar.
Imágenes cortesía de O.C. González, Lindy Baker y Gemma Evans.