¿Hay personas más propensas a padecer una depresión?
La ciencia nos dice que hay personas más propensas a padecer una depresión. Ahora bien, es cierto que todos nosotros y sin excepción, podemos sufrir un trastorno psicológico en cualquier momento de nuestra vida. Sin embargo, y aquí está sin duda el dato más llamativo, existen determinadas circunstancias que nos hacen más vulnerables a la hora de padecer problemas del estado de ánimo.
¿Existe quizá cerebros ‘más resistentes’ que otros? ¿Hay algún componente químico o neurológico capaz de protegernos frente a este tipo de situaciones tan desgastantes? Este, en realidad, es un tema que la ciencia lleva décadas estudiando. De algún modo, a los expertos siempre les ha llamado la atención el hecho de que haya personas capaces de afrontar la adversidad con gran solvencia, personas de ánimo inoxidable que rara vez se vienen abajo.
Rupturas afectivas, pérdida de empleo, la pérdida de un ser querido, enfermedades… Hay situaciones muy concretas que a todos nos ponen a prueba y donde puede verse, por ejemplo, grandes diferencias interindividuales. Hay quien lejos de derrumbarse, aplica al instante una actitud altamente resiliente. Así, expertos en el tema, como Rebecca Elliott, psicóloga y profesora de la Universidad de Manchester, nos señala algo interesante sobre este mismo tema.
Cada uno de nosotros nos situamos en un amplio espectro dentro de la vulnerabilidad psicológica. Habrá quienes tengan una disposición casi natural para la fortaleza y el optimismo. Son personas que jamás llegan a desarrollar una depresión. En el otro extremo se hallan quienes evidencian una gran vulnerabilidad, y ello, se debe a diversos factores que vale la pena conocer. Veámoslos a continuación.
“Cada persona tiene sus penas secretas, esas que solo él conoce. Y sin embargo, nos empeñamos en llamar ‘frío’ a alguien que en realidad, puede estar lidiando en soledad con sus tristezas”.
-Henry Wadsworth Longfellow-
¿Por qué hay personas más propensas a padecer una depresión?
Pocas condiciones son tan complejas y difíciles de tratar como la depresión. Cada persona la vive de una manera única y excepcional. A menudo, aparece junto a otros trastornos y se alza además como esa realidad que viene y va en el tiempo, causando más de una recaída.
Por tanto, sabemos que hay personas más propensas a padecer una depresión, pero los factores que median en ese hecho, pueden ser muy diferentes entre unos casos y otros. Un ejemplo, no podemos decir que la genética sea un elemento determinante al 100% para que en un momento dado, suframos un trastorno del estado del ánimo. Hay un riesgo, sí, pero no es ni mucho menos una causa-efecto. Analicemos seguidamente cuáles son esas razones que, por término medio, nos hacen más vulnerables a la hora de sufrir una depresión.
La indefensión aprendida
La indefensión aprendida es un término que acuñó Martin Seligman para referirse a un tipo de comportamiento. Es ese en el cual, la persona asume una actitud pasiva ante los acontecimientos, pensando que no tiene control alguno sobre todo lo que sucede. Cualquier esfuerzo caerá en saco roto porque piensa que no tiene la capacidad de cambiar nada. Este enfoque mental alimenta de manera progresiva un estado de ánimo depresivo.
Tendencia a la negatividad, el poder de los pensamientos negativos
Hay personas con mayor tendencia a los pensamientos negativos y rumiantes que otras. ¿La razón? Los desencadenantes pueden ser múltiples, desde el estilo de personalidad, la educación, experiencias previas, inseguridad y baja autoestima, etc. Sea como sea, el pensamiento negativo asienta en muchos casos los cimientos de una depresión.
Estrés y escasa habilidad para afrontar los problemas
Expertos en el tema, como la doctora Connie Hammen, autora del libro Manual de la depresión, nos señalan que el hecho de no gestionar de manera adecuada el estrés cotidiano tiene un efecto acumulativo y dañino. De este modo, las personas más propensas a padecer una depresión son también aquellas con escasas habilidades para afrontar los problemas, aquellas que no contribuyen de manera activa a solucionar sus dificultades manejando las preocupaciones diarias.
Neurotransmisores
Hemos hablado hasta este punto de esos detonantes cognitivos que en cierto modo nos sumen en patrones mentales donde es fácil derivar en situaciones de vulnerabilidad. Por otro lado, también es interesante conocer esos factores neurológicos que elevan el riesgo de padecer un trastorno del estado del ánimo.
En este mismo sentido, hay quien habla de posibles detonantes neuronales. Las posibles alteraciones en neurotransmisores, como es el caso de la serotonina, podría hacer que una persona tuviera un riesgo mayor de sufrir depresión. No obstante, cabe señalar que este dato es meramente especulativo; no hay estudios concluyentes y a día de hoy suele ponerse en duda.
La genética y el factor personalidad
Por otro lado, y en lo que respecta a los factores genéticos, cabe señalar que en este caso sí hay mayor evidencia. De hecho, este mismo año se ha llevado a cabo un estudio internacional donde han participado cerca de dos millones de personas. El trabajo, dirigido por el profesor Andrew McIntosh, del Centro de Ciencias Clínicas del Cerebro de la Universidad de Edimburgo, nos señala lo siguiente:
- Se han encontrado 269 genes relacionados con la depresión. Heredar alguno de ellos supone tener mayor probabilidad de sufrirla.
- Asimismo, también se ha descubierto que el factor personalidad es un elemento altamente significativo. Así, las personas con un estilo de personalidad neurótica (tendencia a la preocupación, al miedo y la inseguridad) tienen mayores probabilidades de padecer trastornos del estado del ánimo.
Así, es cierto que existen personas más propensas a sufrir una depresión. No obstante, esa mayor probabilidad no es obstáculo para que todos, absolutamente todos, tengamos los recursos y la oportunidad de superar esta situación. Con la ayuda de profesionales especializados, nuevos enfoques y hábitos de vida podremos lograrlo.
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- McIntosh. Andrew (2019) Origins of depression brought into focus in large-scale genetic study. Nature Neuroscience, 2019; DOI https://www.sciencedaily.com/releases/2019/02/190205102550.htm
- David M. Howard, Mark J. Adams, Toni-Kim Clarke, Jonathan D. Hafferty, Jude Gibson, Masoud Shirali, Jonathan R. I. Coleman, Saskia P. Hagenaar. Genome-wide meta-analysis of depression identifies 102 independent variants and highlights the importance of the prefrontal brain regions. Nature Neuroscience, 2019; DOI: 10.1038/s41593-018-0326-7