La teoría del desarrollo moral de Kohlberg

La teoría del desarrollo moral de Kohlberg
Gema Sánchez Cuevas

Revisado y aprobado por la psicóloga Gema Sánchez Cuevas.

Última actualización: 06 agosto, 2023

Todos hemos desarrollado una moral propia e intransferible: unos valores que no solo separan al “mal” del “bien” en el mundo abstracto, sino que también tienen influencia sobre nuestras conductas, percepciones y pensamientos . Incluso podríamos decir que puede estar tan interiorizada como para influir sobre nuestras emociones. Uno de los modelos más importantes e influyentes que intentan explicar el desarrollo de nuestra moral es la teoría del desarrollo moral de Kohlberg.

Por otro lado, al contar todos con moral, establecer una universal siempre ha sido una de las grandes cuestiones que ha preocupado a multitud de filósofos y pensadores. Y podemos observar desde perspectivas kantianas de la moral, basadas en el beneficio grupal, hasta perspectivas utilitaristas, inspiradas en el bien individual.

El psicólogo Lawrence Kohlberg quería alejarse del contenido de la moral y estudiar cómo se desarrolla en las personas. A él no le importaba qué estaba bien o mal, le importaba cómo alcanzamos esa idea de bien o mal. A través de multitud de entrevistas y estudios observó que la construcción de la moral aumenta a medida que los niños crecen. Igual que sucede con otras habilidades, como el lenguaje o la capacidad de razonamiento.

En la teoría del desarrollo moral de Kohlberg se alcanza la conclusión de que el desarrollo moral pasaba por tres niveles: preconvencional, convencional y postconvencional. Cada uno de los cuales está dividido en dos estadios. Es importante entender que no todos pasan por todos los estadios ni todos llegan al último nivel de desarrollo. A continuación explicamos detalladamente cada uno de los estadios.

 

Esquema de la teoría del desarrollo moral de Kohlberg

Teoría del desarrollo moral de Kohlberg

Orientación hacia el castigo y la obediencia

Este estadio de la teoría del desarrollo moral de Kohlberg forma parte del nivel preconvencional. Aquí nos encontramos con que la persona delega toda la responsabilidad moral a una autoridad. Los criterios de lo que está bien o está mal vienen dados por las recompensas o castigos que otorga la autoridad. Un niño puede pensar que no hacer los deberes está mal porque sus padres le castigan si no los hace.

Este pensamiento dificulta la capacidad de asumir que pueden existir dilemas morales: enunciados que no tengan una respuesta moralmente clara. Esto es debido a que todo se plantea desde el único punto de vista de la autoridad, que la persona legitima. Aquí nos encontramos con el nivel más simple de desarrollo moral, donde no se contemplan las diferencias de intereses ni las intenciones de la conducta. En este estadio lo único que es relevante son las consecuencias: premio o castigo.

Orientación hacia el individualismo o hedonismo

En este estadio de teoría del desarrollo moral de Kohlberg ya aparece la idea de que los intereses varían de un individuo al otro. Y aunque los criterios para decidir lo que está mal o bien siguen siendo las consecuencias de los actos, ya no los marcan otros. Ahora el individuo pensará que todo aquello que le reporte algún beneficio estará bien , y mal lo que le suponga una pérdida o malestar.

Ocasionalmente a pesar de la visión egoísta de este estadio de la teoría del desarrollo moral de Kohlberg, el individuo puede pensar que está bien satisfacer las necesidades de otros. Pero solo cuando exista una reciprocidad pragmática o garantía de ella. Es decir, el pensamiento de que si hago algo por otro, el otro tendrá que hacer algo por mí. Este estadio es algo más complejo que el anterior, debido a que el individuo ya no delega en otro para la construcción de su moral, aunque las razones siguen siendo simples y egoístas.

Orientación hacia las relaciones interpersonales

En este estadio se inicia la etapa convencional del desarrollo moral. Debido a que el individuo empieza a tener relaciones cada vez más complejas, tiene que abandonar ese egoísmo de la anterior etapa. Lo importante ahora es ser aceptado por el grupo, por lo tanto la moral va a girar en torno a ello.
Para la persona que se encuentre en este estadio, lo correcto será aquello que agrada o ayuda a los otros. Aquí lo que empieza a importar son las buenas intenciones de las conductas y en qué medida están aprobadas por los demás. La definición de moral en esta etapa se basa en ser una “buena persona”, leal, respetable, colaboradora y agradable.

Niños jugando en corro

Hay una prueba muy curiosa que detecta cuándo los niños alcanzan este estadio. Consisten en que vean dos vídeos:

  • En uno aparece un niño que hace una travesura (causa un mal pequeño, pero de manera intencionada).
  • En otro aparece un niño distinto que también causa un mal mayor, pero esta vez sin intención (E. Se mancha o tira un vaso sin querer).

Los niños que ya han incluido a la intención como variable moduladora de sus juicios morales dirán que el que peor ha actuado ha sido el niño que quería causar el daño, aunque haya sido sin querer. Por otro lado, los niños en estadios anteriores de la teoría del desarrollo moral de Kohlberg dirán que el peor niño es que ha causado un daño más grande, sin tener en cuenta que lo ha hecho sin querer.

Orientación hacia el orden social

El individuo deja de tener una visión basada en grupos, para irse a una visión basada en la sociedad. Ya no importa lo que le agrade a los grupos o a las personas de mi entorno. El criterio de lo que es bueno o malo se basa en si la conducta mantiene el orden social o lo entorpece. Lo importante es que la sociedad sea estable y no exista el caos en ella.
Aquí nos encontramos con un fuerte respeto a las leyes y a la autoridad. Ya que estas coartan la libertad del individuo a favor del orden social por nuestro bien. La moralidad sobrepasa los lazos personales y se relaciona con la legalidad vigente, que no debe desobedecerse, para mantener un orden social.

Orientación hacia el contrato social

Aquí entramos en el último nivel del desarrollo moral, etapa que muy pocos individuos alcanzan a lo largo de su vida. Aquí la moral se empieza a entender como algo flexible y variable. Para estos individuos el bien o el mal existen debido a que una sociedad ha creado un contrato que establece los criterios morales.

Las personas en este estadio entienden el porqué de las leyes y base a eso las critican o las defienden. Además, estas leyes para ellos no son eternas y son susceptibles de mejora. Para las personas o niños que se encuentran en este estadio la moral supone la participación voluntaria en un sistema social aceptado, ya que la creación de un contrato social es mejor para uno mismo y los demás, que su carencia.

Manos que construyen la sociedad

Orientación al principio ético universal

Este estadio de la teoría del desarrollo moral de Kohlberg es el más complejo del desarrollo moral, donde el individuo es el que crea sus propios principios éticos que son comprensivos, racionales y universalmente aplicables. Estos principios van más allá de las leyes, y se trata de conceptos morales abstractos difíciles de explicitar. La persona construye su moral acorde a cómo cree que la sociedad debería existir y no a como la sociedad le impone.

Un aspecto importante de este estadio es la universalidad de la aplicación. El individuo aplica el mismo criterio a los demás que él mismo. Y trata a los demás, o lo intenta, como le gustaría que le tratasen. Ya que si esto no se cumple estaríamos en un nivel mucho más simple, parecido al estadio de orientación al individualismo.

Según pone de manifiesto Enrique Barra en este artículo publicado en la Revista Latinoamericana de Psicología, la teoría de Kohlberg es una “herramienta profesional de gran relevancia” para los profesionales de la psicología. No solamente por el conocimiento que les aporta sobre el desarrollo moral en sí, sino además por la responsabilidad que tienen los clínicos de cara a favorecer y promover un “desarrollo armónico e integral del individuo”.

Máxime en el momento en que nos encontramos en un mundo que está en constante cambio y evolución. Asimismo, Barra asegura que la fundamentación de esta teoría supone un enriquecimiento significativo de cara a la comprensión de la complejidad psicológica de las personas.

Ahora bien, ya que conocemos cómo se desarrolla la moral en las personas según la teoría del desarrollo moral de Kohlberg, tenemos la oportunidad de realizar una reflexión personal, ¿en qué estadio del desarrollo moral nos encontramos?


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.