Las cosas son más sencillas de lo que parecen (pensamiento lateral)
Estamos tan acostumbrados a pensar de una manera determinada que enfocar lo que nos sucede de otro modo nos resulta complejo y casi imposible. La cuestión es que en muchas ocasiones nuestra forma de pensar es más un obstáculo que una vía para facilitarnos las cosas. Con la intención de que esto no se convierta en una costumbre, queremos presentaros un nuevo modo de solucionar problemas y retos: el pensamiento lateral o “lateral thinking”.
El término “pensamiento lateral” fue acuñado por el psicólogo Edward Bono para presentar una forma alternativa de pensar que consiste en salirse de la forma de razonar lógica y lineal que tenemos normalmente, para buscar soluciones creativas y originales a cualquier problema o situación.
En este artículo reflexionaremos sobre el pensamiento lateral, la lógica de los esquemas mentales y os propondremos una serie de acertijos que debéis acertar. ¿Aceptáis el reto?
“Ves cosas y dices,”¿Por qué?” Pero yo sueño cosas que nunca fueron y digo, “¿Por qué no?”
-George Bernard Shaw-
El pensamiento lineal como rutina
Estamos acostumbrados al razonamiento lógico, a pensar de una forma lineal y a resolver problemas de forma secuencial, dando pequeños pasos hasta dar con la clave. Desde pequeños nos enseñan que la vida se compone de complejos acertijos que tenemos que resolver utilizando todo nuestro potencial en un mundo lleno de laberintos.
Claro que la vida no es fácil y los caminos de nuestra mente son, en la mayoría de las ocasiones, un rompecabezas que hay que aprender a descifrar o a veces, dejar de intentarlo. Somos seres acostumbrados a buscar explicación a todo lo que nos rodea.
De hecho, cuando nos encontramos ante una situación de la que no contamos con suficiente información, nosotros mismos completamos los datos que nos faltan en base a la manera que tenemos de entender el mundo y en función del aprendizaje que a través de nuestras experiencias hemos construido.
Lo cierto es que esta forma lineal de pensar, en ocasiones, puede traernos problemas porque no somos capaces de ver más allá. Nadie nos ha dicho que existen más caminos que aquel que está en línea recta, que podemos movernos hacia todos lados y que si lo hacemos también estaremos estimulando a nuestra mente.
El despertar del pensamiento lateral
Como vemos, la lógica nos dice que de un paso vamos al siguiente, completando peldaños y avanzando a la solución. Sin embargo, en el pensamiento lateral tenemos que abandonar el proceso lógico de pensamiento para resolver acertijos que son más sencillos de lo que parecen.
Con esta nuevo tipo de pensamiento, en lugar de pensar de esa forma escalonada, debemos hacerlo como su propio nombre indica, en lateral. No todas las soluciones son tan difíciles como imaginamos. Es decir, pensamos demasiado sobre lo que existe y poco sobre lo que podría existir. ¡Atrevámonos a experimentar!
Las reglas del juego
A continuación, te propongo un juego para fomentar tu ingenio y creatividad en la resolución de problemas y poner en práctica el pensamiento lateral. Tan solo tienes que leer las instrucciones y manos a la obra:
- Lee detenidamente el acertijo.
- Elige aquel que más te guste.
- NO busques información sobre la solución del mismo.
- Si ya conocías la solución intenta resolver otro, pero NO la digas directamente. Ayuda a los demás a llegar hacia la ella.
- Disfruta, comenta y participa en nuestras redes sociales.
El hombre en el ascensor
«Un hombre vive en el décimo piso de un edificio. Cada día toma el ascensor hasta la planta baja para dirigirse al trabajo o ir de compras. Cuando regresa, siempre sube en el ascensor hasta el séptimo piso y luego por la escalera, los restantes tres pisos hasta su apartamento en el décimo. ¿Por qué lo hace?»
Misterio en el campo
“Un hombre yace muerto en un campo. A su lado hay un paquete sin abrir. No hay ninguna otra criatura en el campo. ¿Cómo murió?”.
Una pista: El hombre sabía que iba a morir conforme se acercaba al lugar.
El hombre del bar
“Un hombre entra en un bar y le pide al camarero un vaso de agua. El barman se arrodilla buscando algo, saca un arma y le apunta al hombre que le acaba de hablar. El hombre dice «gracias» y se va”.
Egipto
“Antonio y Cleopatra son hallados muertos en el suelo de una villa de Egipto. Muy cerca se encuentran cristales rotos. El único testigo es el perro guardián. No hay ninguna marca en cualquiera de sus cuerpos y ellos no fueron envenenados. ¿Cómo murieron?”.
La isla de los ojos azules
“En una isla hay 100 habitantes. Todos ellos tienen o bien ojos azules o bien ojos marrones. Todos ven el color de los otros, pero no el color propio. No pueden hablar del tema y no hay espejos. Eso sí: una ley establece que si alguien descubre que tiene los ojos azules, ha de abandonar la isla a las 8 de la mañana siguientes. Todos los isleños tienen la misma capacidad para razonar y todos son capaces de usar una lógica impecable.
Un día, una persona llega de visita a la isla y, mientras los mira a todos, dice, sin señalar a nadie en concreto: “¡Qué bueno es ver al menos una persona con ojos azules después de tanto tiempo de estar en alta mar!” ¿Qué consecuencias trajo este comentario a los habitantes de la isla?”.
El camino del monje
“Un monje parte al amanecer de su monasterio hasta la cima de una montaña, donde llega tras un camino de varias horas. Se queda a descansar y a dormir, y sale por la mañana de la montaña a la misma hora para regresar a su monasterio.
Es posible que no tardara lo mismo en ir que en volver y da igual que su velocidad no fuera constante o cuándo y cuántas veces se parara a descansar: el monje pasó por algún punto del camino exactamente a la misma hora, pero con un día de diferencia. ¿Por qué?”.
Soluciones
El hombre del ascensor
El hombre es un enano. Al no ser capaz de llegar al botón del décimo piso del ascensor, opta por dar al botón del séptimo y luego, subir las escaleras. Por otro lado, al bajar no tiene problema porque el botón de la planta baja está cerca.
Egipto
Antonio y Cleopatra son dos peces de colores que vivían en una pecera, la cual fue golpeada por un perro.
La isla de los ojos azules
Todas las personas con ojos azules abandonarán la isla.
Si solo hubiera una persona con los ojos azules, lo sabría ya que el 99% restantes, los tendrían marrones por lo que se iría.
Si hubiera dos personas con los ojos azules (A) y (B), el primero podría pensar que se refería al segundo y que solo hay uno y el segundo pensaría lo mismo del primero. Cuando uno ve que el otro no se va de la isla el primer día, deduciría que él también tiene los ojos azules, por lo que ambos se tendría que ir el segundo día.
Lo mismo sucedería si hay tres (A), (B) y (C), ya que el primero vería que los otros dos no dejan la isla y que por tanto, él también tiene los ojos azules, por lo que se tendrían que ir los tres al tercer día; al ver el primero que los otros no se fueron el segundo día.
Y así hasta que se vayan todos los habitantes con los ojos azules, sean el número que sean.
El camino del monje
Para dar respuesta a este acertijo imagínate que se trata de dos monjes que salen a la misma hora de zonas opuestas. Si siguen el mismo camino en algún momento se tendrán que encontrar… Ahora parece evidente, ¿verdad?
Todo es mucho más fácil de lo que pensamos, la cuestión es no dejarnos atrapar por las trampas de nuestros pensamientos y comenzar a crear nuevas perspectivas… Para ello, el pensamiento lateral puede ayudarnos. ¡Atrévete a pensar de forma diferente!