Nada produce mayor placer que hacer algo de lo que no te creyeron capaz
Se nos presentarán muchos momentos en la vida en los que querremos hacer algo arriesgado. Es entonces cuando nos encontraremos con varias personas que nos dirán que no seremos capaces de realizarlo. Esto puede ser porque a veces las personas traspasamos nuestras frustraciones e incapacidades a los objetivos de los demás.
Es importante escuchar a los otros, pero el éxito de nuestros proyectos dependerá en gran parte de nosotros. Nunca sabremos de ante mano si algo nos ira bien o mal, pero que la decisión sea nuestra es el primer paso para lograr lo que anhelamos.
En el momento en el que vivimos, los cambios no son solo inevitables, sino que se producen cada vez con más rapidez. El vértigo es una sensación lógica en unos tiempos en los que cualquier idea puede ser vanguardista hoy y caduca mañana. Admitir y propiciar el cambio frente a esos factores y al miedo son los que no harán innovar.
Aquel que quiere «llegar más alto» y se pone en camino tiene que contar con que algún día sentirá vértigo.
¿Por qué los demás no nos ven capaces de realizar nuestros sueños?
Por lo general, la mayoría de las personas que no están dispuestas a alcanzar sus sueños prefieren caminos seguros. Dedican los mejores años de sus vidas a trabajos que no les gustan haciendo lo que otros quieren, con el fin de mantener su zona de confort y escapar de los sobresaltos.
Estas personas retrasan sus planes pensando que aún no tienen la suficiente experiencia, seguridad o apoyo para realizar lo que realmente quieren. De ahí nace su frustración al ver que otros sí tienen esa seguridad o definición que a ellos les falta. Este tipo de personas, a veces nos cortan las alas de manera inconsciente, disfrazando su envidia por nuestra determinación con palabras de cordura.
Ser capaz de llevar nuestros sueños a la realidad es un camino incierto y sacrificado, pero la recompensa de vivir la vida a nuestra manera suple todas las decepciones e inconvenientes del camino. Es hora de dejar de inventar excusas y de dejar de posponer todo lo que puedas hacer hoy. Ahora es el momento ideal para empezar a vivir tus sueños y creer que eres capaz.
Cuando conectas con algo, esta conexión te da inmediatamente un sentido para vivir.
¿Por qué debemos confiar en nosotros mismos?
La confianza en uno mismo es un elemento crucial en el desempeño de la persona. No podemos confiar en que mejoren nuestras circunstancias, si no confiamos en nosotros mismos y en nuestras posibilidades. Nosotros tenemos la capacidad de hacer que el mundo cambie a nuestro favor, si realmente empezamos a caminar en esa dirección.
La confianza en uno mismo es una manera sana de comunicarse con el mundo. Es la capacidad de defenderse de forma honesta y respetuosa. Todos los días, nos enfrentamos a situaciones en las que tener confianza y seguridad en nosotros puede ser de gran ayuda. Por ejemplo, en un problema laboral, en las relaciones con los demás, etc.
Este estilo de comunicación seguro puede ayudarnos a hacer los que deseamos, pero es mucho más que eso. Cuando nos sentimos seguros de nosotros mismos, nos respetamos y respetamos a otros. Las personas seguras suelen ser buenas para resolver conflictos y desacuerdos y, en definitiva, las personas que respetan suelen ser respetadas.
Confiar en uno mismo, más una dosis de esfuerzo y sacrificio te llevará a unos de los mayores placeres que se pueden experimentar. Hacer algo de lo que no te creyeron capaz te hará disfrutar de ese irresistible placer de saber que no solo has ganado a unas circunstancias nada alentadoras, sino que también has podido con la sensación de vértigo que los demás han potenciado al no brindarte su confianza.
“No hay que subestimar la importancia vital de encontrar el trabajo al que quieres dedicarte”