¿Por qué los hombres son tan diferentes a nosotras?
¿Cuántas veces los diferentes comportamientos entre hombres y mujeres no son fuente de charla entre amigos, de discusiones entre parejas y en fin…ese ni contigo ni sin ti? Una de las más reconocidas psiquiatras en este campo, la doctora Louann Brizendine, profesora de neuropsiquiatria en la Universidad de California, ha puesto sobre la mesa lo que tanto nos diferencia a hombres y mujeres en su libro “El cerebro femenino” publicado en el 2006. Un interesante libro que no nos deja indiferentes a ninguno y que nos ayuda a comprendernos mejor ambos sexos.
¿Por qué habla tanto mi mujer? ¿Por qué este hombre sólo piensa en el sexo? o ¿Por qué los hombres son más proclives a la ira y las peleas? Son cuestiones que Louann nos aclara en una frase rotunda “los cerebros masculinos y femeninos son diferentes por naturaleza”.
Así es que queridos lectores esto es lo que hay, si las mujeres tienen más capacidad para hablar y escuchar es porque tienen un 11% más de neuronas dedicadas a ello, si el hombre piensa más en el sexo que la mujer es porque la parte de su cerebro dedicada al sexo es hasta dos veces mayor que en la mujer aunque esto no quiera decir que a la mujer no le interese el sexo; de hecho el aumento de estrógenos en las chicas durante la adolescencia, hace que se miren continuamente en el espejo, que estén tremendamente preocupadas por su aspecto físico o que quieran comprar y comprar ropa y maquillaje para ser sexualmente atractivas. Todo esto responde a las necesidades de la madre naturaleza, necesita que las mujeres sean fecundadas para mantener la especie y que el mundo continue!. Sobre por qué los hombres son más proclives a las peleas, está en que tienen más procesadores en la amigdala que regulan el miedo.
Otro tema más que interesante es la eterna pelea de “los hombres son más inteligentes que las mujeres” o “las mujeres son más inteligentes que los hombres”; también a esta cuestión nos la responde la doctora: el cerebro masculino es un 9% más grande que el femenino, pero tienen el mismo número de células cerebrales, sólo que en la mujer están más “empaquetadas”, con lo cual no hay diferencias a este respecto.
Desde luego no hay lugar a dudas que este libro nos ayuda a todos a comprender nuestras diferencias y en cierto modo a ser más felices porque si hombres y mujeres nos comportamos de tal o cual manera no es por gusto nuestro, es el cerebro el que manda.
Imagen cortesía de quo.es
Nota de edición: este artículo expone las conclusiones a las que llega una neuropsiquiatra con años de experiencia a sus espaldas. El lector es libre de estar de acuerdo o no con los planteamientos que hace y de expresar su opinión haciendo el comentario que quiera. Siempre con argumentos y desde el respeto, por favor, de esta manera nos enriqueceremos todos!