7 claves para enseñar a los niños a compartir
Es normal que los niños pequeños muestren miedo a compartir. También es normal que sientan que todo lo que quieren les pertenece, aunque nos sea suyo. Incluso algunas veces los niños pequeños pueden mostrar actitudes violentas para defender “lo suyo”. A pesar de ello, es necesario enseñar a los niños a compartir, mostrándoles que al hacerlo pueden ganar más.
A fin y al cabo, compartir no es una habilidad natural, sino una habilidad aprendida. Pero no es fácil. Para los niños pequeños, entender lo que significa dar y recibir es difícil, especialmente porque carecen de una comprensión clara del tiempo y del lenguaje. Por ejemplo, decirle a un niño que recuperará su juguete en unos minutos significa poco para un niño de dos años.
Los niños pequeños se encuentran en una fase egocéntrica de desarrollo, comenzando a reconocerse a sí mismos como individuos con sus propias cosas. Están empezando a explorar lo que significa poseer algo y no han captado la idea de que algunas cosas le pertenecen a otras personas.
La buena noticia es que, a pesar de que no es fácil conseguirlo, los niños son capaces de aprender a compartir. Pero ello requiere paciencia y buen entrenamiento por parte de padres y educadores.
¿Cómo enseñar a los niños a compartir?
Los niños generalmente entienden el concepto de compartir alrededor de los tres años. Pero pasará un tiempo más antes de que el niño esté preparado para hacerlo. Aunque el niño comienza a desarrollar empatía y sabe que debe respetar los turnos, no es lo suficientemente maduro como para resistir todos sus impulsos. La mayoría de los niños de tres y cuatro años antepone sus intereses más inmediatos.
Es posible que un niño pequeño no comprenda lo suficiente como para darse cuenta de que incluso si no tiene un juguete ahora, le llegará pronto su turno. A pesar de los arrebatos que pueden aparecer, debajo de la superficie sus habilidades para compartir están madurando.
A continuación, vemos algunas claves para enseñar a los niños a compartir que les ayudarán a madurar en esas habilidades.
Dar buen ejemplo
Si quieres que tu hijo pequeño aprenda a compartir es importante que cuente con buenos ejemplos, modelos en los que fijarse . Puede ser compartiendo algo de comer o dejando que coloree y decore alguna cosa que estés haciendo, por ejemplo, una nota recordatoria o algo que prepares de propio intento para compartir. También es muy interesante que te vea compartir con otras personas, pedir las cosas por favor y dar las gracias.
No olvides que sus cosas son su mundo
Las cosas de los niños son su mundo. Si les obligas, solo conseguirás reforzar negativamente su obsesión por mantener a salvo sus cosas. El niño debe aprender que compartir no significa perder sus cosas ni renunciar a ellas, y que compartiendo con otros niños se disfruta mucho más del juego.
Supervisa el uso que da a lo que otros comparten con él
Cuando otros niños comparten algo, es un momento estupendo para hacerle ver al niño lo que ocurre. El otro niño comparte con él y luego recupera lo suyo y se lo lleva. Si el juguete es común pueden jugar varios y luego dejarlo donde estaba. Así el niño puede ver que no pasa nada y que compartir es divertido.
Intenta entender por qué tu hijo no quiere compartir
Puede que tu hijo no quiera compartir algo porque tiene un significado especial para él o porque teme que otro niño estropee lo que ha hecho o conseguido. Incluso pueden tener razones para pensarlo, aunque no sepan expresarlo, como que el otro niño ya lo haya hecho en otra ocasión.
Utiliza refuerzos positivos
Cuando tu hijo muestre una actitud positiva y comparta, refuérzale positivamente reconociendo su acción y felicitándolo o premiándolo con alguna pequeña cosa que el guste.
Sé paciente
A algunos niños les cuesta entender que compartir es divertido, pero el tiempo es un gran igualador: todo llegará. A medida que el niño desarrolle habilidades sociales y haga verdaderos amigos es más probable que abrace la idea de que compartir es divertido.
Compartir es más que intercambiar objetos
Además de intercambiar y compartir objetos, también se puede compartir el tiempo con una historia o la atención de un adulto. Añadir la palabra compartir al vocabulario siempre que se pueda en estas circunstancias es muy útil para que el niño lo integre en su forma de actuar diaria.
Compartir es más que intercambiar cosas
Además de intercambiar y compartir cosas, también se puede compartir el tiempo con una historia o una actividad. Añadir la palabra compartir al vocabulario siempre que se pueda en estas circunstancias es muy útil para que el niño lo integre en su forma de actuar diaria.
Enseñar a los niños a compartir es importante
Aprender a compartir puede ser un desafío para los niños pequeños. Pero es un desafío que al que se deben enfrentar y superar. Es una habilidad importante que necesitan para jugar y beneficiarse de la interacción con otros niños.
Pero no todos los niños aprenden esta habilidad. Seguro que conoces compañeros de trabajo, amigos o parientes que, incluso de adultos, no han adquirido habilidades para compartir. Y estos adultos son difíciles de tratar. A veces ni siquiera te gusta estar cerca de ellos. Adquirir esta habilidad como adulto es casi imposible, por lo que es aún más importante que la habilidad se adquiere durante la infancia. Así que no subestimes la importancia de enseñar a los niños a compartir, especialmente si se trata de tus hijos.