Anorexia sexual: características, causas y tratamiento
La anorexia sexual también es conocida como anafrodisia o deseo sexual inhibido. Cuando hablamos de anorexia sexual nos referimos a un trastorno relacionado con el bajo interés por el sexo, el bajo apetito sexual. Las personas que la padecen refieren poco deseo por mantener relaciones sexuales.
Esta falta de deseo sexual puede ocurrir en hombres y mujeres por igual. En la mayoría de los casos, la causa la podemos encontrar en la vivencia de traumas psicológicos, físicos o incluso en la baja autoestima.
Características de la anorexia sexual
La anorexia sexual se caracteriza por la ausencia o reducción significativa del interés o excitación sexual. Se manifiesta por los menos por uno de los tres siguientes criterios diagnósticos.
- Interés ausente o reducido en la actividad sexual.
- Fantasías o pensamientos sexuales o eróticos ausentes o reducidos.
- Inicio reducido o ausente de la actividad sexual y habitualmente no receptiva a los intentos de la pareja por iniciarla.
- Excitación o placer sexual ausente o reducido durante la actividad sexual en casi todas o todas las ocasiones (aprox. 75-100 %) de la actividad sexual en pareja.
- Excitación o placer sexual ausente o reducido en respuesta a cualquier invitación sexual o erótica, interna o externa (p. ej., escrita, verbal, visual).
- Sensaciones genitales o no genitales ausentes o reducidas durante la actividad sexual en casi todas o todas las ocasiones (aprox. 75-100 %) de la actividad sexual en pareja.
Estos síntomas deben haber persistido durante unos seis meses como mínimo. Además, deben provocar un malestar clínicamente significativo en la persona que los padece. Por último, la disfunción sexual no debe ser explicada mejor por un trastorno mental no sexual o como consecuencia de una alteración grave de la relación o efectos de una sustancia o afección médica.
Causas de la anorexia sexual
Hay autores que señalan que el factor de riesgo más común para sufrir anorexia sexual es la experimentación de abuso físico o psicológico en el pasado. Sin embargo, esta no es la única causa. La falta de deseo sexual también puede estar determinada por otros factores.
El estrés, una vida en pareja monótona, discusiones con la pareja y problemas de convivencia, etc., también pueden hacer que se desarrolle la anorexia sexual. Asimismo, la disfunción eréctil, la impotencia o la anorgasmia pueden conducir a sufrir esta afectación.
La anorexia sexual también puede tener su origen en algunos ámbitos religiosos, políticos y culturales. Estos “escenarios sociales” pueden atacar la libre expresión sexual hasta llegar a reprimirla. Asimismo, la educación sexual recibida en la infancia o adolescencia puede causar una anorexia sexual en el futuro.
Podemos encontrar otra causa en los medios de comunicación. Y es que hay medios de comunicación que nos bombardean cada día con imágenes explícitas, mensajes y estímulos que sexualizan cada aspecto de nuestra vida. Esto puede hacer que tengamos una educación sexual inadecuada y unas creencias erróneas con respecto al sexo.
La psicóloga Emma Ribas propone una causa muy interesante. Según Ribas, “antes no se hablaba de sexualidad y ahora se habla mucho, pero siguen existiendo muchos mitos“. El peligro, según la autora, radica en que aprendemos desde la pornografía: “lo poco que hemos recibido en nuestra sociedad es el porno, donde mayoritariamente la mujer es tratada como un objeto, y es el modelo de referencia que tenemos“. Imitar las conductas sexuales pornográficas puede conllevar experiencias sexuales desagradables. De esta forma, se puede desarrollar también apatía sexual al no conectar con ese tipo de relaciones sexuales.
Cuando la falta de deseo sexual se convierte en un problema
La falta de deseo sexual se asocia con frecuencia a dificultades para experimentar el orgasmo y a dolor durante la actividad sexual. Esto lleva a que la actividad sexual sea infrecuente y a discrepancias de deseo en la pareja.
Las dificultades en la relación y los trastornos del estado de ánimo también son características que se asocian con frecuencia a la anorexia sexual. Las expectativas y los estándares poco realistas respecto al nivel “apropiado” de interés o excitación sexual pueden ser evidentes en las personas afectadas de este problema.
También influyen en el problema unas técnicas sexuales pobres y la falta de información acerca de la sexualidad. Estos factores, junto con las creencias habituales acerca de los roles de género, son circunstancias importantes a tener en cuenta.
Factores que pueden ser relevantes de cara al tratamiento de la anorexia sexual
Existen 5 factores que no deben pasarse por alto. Estos factores son relevantes para la etiología o tratamiento del bajo deseo sexual. Son los siguientes:
- Factores de pareja (p. ej., problemas sexuales de pareja, estado de salud de la pareja).
- Factores de la relación (p. ej., comunicación escasa, discrepancias en el deseo de mantener actividad sexual).
- Factores de vulnerabilidad individual (p. ej., imagen corporal mala, antecedentes de abuso sexual o emocional, depresión, ansiedad, estrés, pérdida del empleo, duelo).
- Factores culturales o religiosos (p. ej., inhibición en relación a prohibiciones de la actividad sexual, actitudes hacia la sexualidad).
- Factores médicos relevantes para el pronóstico, el curso o el tratamiento.
Tratamiento de la anorexia sexual
Lo primero que debe hacer la persona afectada es tomar conciencia del trastorno que está sufriendo. En segundo lugar, lo más importante es cambiar las actividades habituales que la pareja realiza en su día a día.
La clave reside en avivar nuevamente el deseo sexual. Para ello, es preciso que la pareja cree un ambiente relajado e íntimo, libre de prejuicios y presiones. Un aspecto importante a tener en cuenta es que el sexo no implica forzosamente la existencia de penetración. Se puede disfrutar del sexo de muchas maneras.
Para el tratamiento de la anorexia sexual es importante distinguirlo de la asexualidad. La sexóloga Judith Viudes asegura que “las personas asexuales lo perciben (el sexo) como una no-orientación sexual que se caracteriza precisamente por no sentir atracción sexual hacia otras personas”. En caso de la anorexia seuxual, el problema radica en la ansiedad que puede suponer la relación sexual en sí.
De todas formas, lo ideal es que se consulte a un psicólogo especializado. Él podrá ayudarte con el mejor tratamiento disponible hasta la fecha.