¿Cómo puedo organizar mejor mi tiempo?
¿Por qué a veces los demás parecen disponer de más tiempo que yo? ¿Por qué tengo la sensación de que el tiempo se me escurre entre los dedos? ¿Cómo puedo aprender a organizar mejor mi tiempo? ¿Es posible compaginar vida social, familiar, trabajo y salud física y mental? Todas estas preguntas las trabajaremos más adelante, sigue leyendo.
Todos tenemos el mismo tiempo, todos contamos con los mismos minutos durante el día, lo que depende de cada uno de nosotros es la disposición que hacemos del mismo. De esta manera, en una sociedad en la que la competencia es muy grande y la velocidad es muy alta, esta habilidad tiene cada vez más peso. Por ella nos pueden contratar o no, por ella nos podemos sentir útiles o no.
“El tiempo es una de las pocas cosas importantes que nos quedan”.
-Dalí-
El primer pilar para organizar mejor mi tiempo reside en la idea de la planificación. Dedicar unos minutos al diseño del día, la semana, el mes o el año ayuda dar una prioridad efectiva a las tareas que realmente la requieren. Además, esta visión de futuro también nos puede ayudar a distinguir entre lo urgente y lo importante.
¿Cuánto tiempo me llevará cada tarea? Contar con unos minutos de margen entre las tareas me permite ser honesto conmigo mismo, contemplando toda una suerte de imprevistos que pueden acontecer.
Por ejemplo, si mi plan para hoy es hacer la compra, llamar a un amigo, mandar un correo a mis compañeros de trabajo, preparar una cena especial y acabar una presentación, organizaré mi tiempo con margen para no hacer que la prisa me acompañe y cumplir así los objetivos de mi organización. Por ejemplo, tendré que tener en cuenta los desplazamientos, los fallos en el material, las distracciones no previstas, las colas o tiempos de espera en el supermercado, el tráfico etc.
Para organizar mejor mi tiempo: usar una agenda de mano o la del teléfono
¿Qué tipo de agenda o planificador uso para organizar mejor mi tiempo?. Por ejemplo, un estudio realizado en la Universidad de California en los Estados Unidos comprobó que sus estudiantes realizaban mejor los procesos de memorización y organización cuando utilizaban la escritura manual -la otra opción era hacerlo con un teclado-.
Así, se activa la zona de psicomotricidad fina cuando tomamos las notas a mano, permitiendo crear huellas más profundas de memoria a largo plazo; mientras le dedicamos tiempo a esta tarea, nuestro cerebro es capaz de ir ordenando ideas y asimilando conceptos.
Una agenda manual para organizarnos nos ayuda a crear un mapa mental de nuestro tiempo y de nuestras tareas. También es una herramienta valiosa para poner coto a los pensamientos intrusivos, dedicando todos nuestros recursos a aquello que tengamos entre manos. Los colores en la agenda pueden ayudarnos asimismo a organizar nuestras prioridades y activar la memoria visual para favorecer la retención.
Organizar mejor mi tiempo y la fuerza de voluntad
Al levantarnos, nuestros recursos mentales, como la voluntad, suelen haberse recuperado del desgaste del día anterior. Por lo tanto, y en base a esta idea, son muchos los especialistas que nos recomiendan dedicar las primeras horas del día a aquellas tareas que menos nos gustan o que más nos preocupan. Al hacerlo de otra manera, multiplicamos la tentación de postergar y no cumplir nuestros objetivos, lo que se traduce en más tareas para el siguiente día, con las consecuentes emociones negativas que esto genera.
Nuestro cerebro a su vez necesita espacios para la relajación. Lugares abiertos dentro del día donde quepa la improvisación y la creatividad, incluso el gusto o el deseo circunstancial. Se trata de dejar un espacio dentro de la planificación para lo no planeado. Hacerlo no solo hará que nos sintamos mejor, sino que también distanciará la sensación de pasarnos el día siendo esclavos de ese yo planificador. En este sentido, un estudio reciente concluye que cada vez que perdemos la concentración tardamos en recuperarla una media de 23 minutos.
Por otro lado, cuantas más distracciones tengamos a nuestro alrededor, más tiempo necesitaremos para cumplir nuestros objetivos. Un buen espacio de trabajo, una buena planificación, una buena rutina de trabajo, con horas de sueño, dieta consecuente con nuestro nivel de actividad y tiempo para el ocio son las claves para disfrutar y cumplir cada día con lo que nos proponemos.
Todos contamos con el mismo tiempo a lo largo del día, la clave está en el cómo organizamos y priorizamos nuestras tareas. ¿A qué esperas para disfrutar de cada segundo de tu tiempo?
