Los 4 tipos de budismo
El budismo no se encuentra clasificado como otras religiones, según jerarquías de poder, cuya cúspide se sitúa en la figura de una persona que alberga la sabiduría de los textos sagrados. Sin embargo, sí podemos encontrar diferentes escuelas, ramas o tipos de budismo.
El budismo es tanto una religión -aunque no encaja completamente en la definición formal del término- como una doctrina filosófica. El conjunto de tradiciones, creencias y prácticas conforman un comportamiento que comparten 365 millones de personas denominadas budistas. Como otra clase de prácticas orientales, la práctica de algunas de sus doctrinas se ha popularizado en occidente.
¿Qué caracteriza al budismo?
El budismo, originario de la India de entre los siglos VI y IV a. C., es la cuarta religión del mundo en cuanto a número de seguidores. Algunos le atribuyen dos ramas principales: Therevada (o Escuela de los Ancianos) y Mahāyāna (Gran Camino), aunque estas se diversifican enormemente y no existe un consenso.
Para el budismo, las escrituras budistas, sus textos sagrados, son el objeto de estudio. El objetivo consiste cultivar la sabiduría, practicar la meditación, renunciar a lo material, favorecer la bondad y la compasión, entre otros. Existen variantes monásticas de las prácticas budistas, pero la mayor parte de los pertenecientes a esta religión la practican de forma menos intensa. Pese a todo, los principios filosóficos del budismo son compartidos por toda la comunidad.
El entendimiento del budismo es holístico: las enseñanzas de esta práctica se interrelacionan y se componen las unas de las otras. A su vez, se hace hincapié en que estas enseñanzas no son sino una guía hacia el Dharma (“las cosas como son”, en sánscrito).
Ramas o tipos de budismo
Según el criterio de clasificación, podemos encontrar diversas formas de practicar el budismo. De acuerdo con el número de practicantes, las tres ramas principales del budismo son mahāyāna, therevāda y vajrayāna. Sin embargo, a la hora de buscar otra suerte de clasificaciones, el budismo se nos presenta enormemente descentralizado.
Es algo inexacto hablar de “tipos de budismo”, ya que las variantes del mismo coinciden en algún momento en diversos aspectos, tales como el punto histórico de partida de la doctrina. Las diferentes enseñanzas se acercan y se alejan de forma que nos hace difícil su clasificación. Atendiendo a este hecho, sí es posible organizar las distintas creencias de forma artificial, según afinidades y disimilitudes.
1. Budismo tradicional y budismo moderno
La primera clasificación que podemos hacer tiene que ver con el origen de la práctica. Mientras que el budismo tradicional u original es un conjunto de creencias, tradiciones y prácticas milenarias, existen a su vez interpretaciones modernas de ese sistema.
2. Budismo original de escuelas nikāya
Según esta clasificación, existen 19 clases de budismo, 19 escuelas nikāya. Este es el nombre con el que se designa a las escuelas tempranas del budismo. De estas 19, solo el budismo therevāda ha sobrevivido. Esta rama del budismo identifica como verdaderos sutras los contenidos del Canon Pāli, un conjunto de textos sagrados.
En el budismo therevāda, la introspección tiene todo el protagonismo. La experiencia individual y el razonamiento crítico se oponen en esta introspección a la fe ciega, con el objetivo de liberarse y alcanzar el nirvana.
En la actualidad el budismo therevāda se practica en Tailandia, Laos, Camboya y Myanmar. Uno de sus aspectos centrales es la shanga, o comunidad monástica. Los monjes poseen muy pocos bienes y viven en alojamientos austeros.
Su principal actividad es la meditación, que practican para vaciar la mente del yo y acercarse al nirvana. Aunque el ideal es una vida plenamente monástica, los laicos también tienen su espacio en el budismo therevāda. Estos desempeñan una función importante, ya que contribuyen al sustento de los monjes en su búsqueda de un modo de vida ascético; por ejemplo, le proporcionan alimentos a cambio de bendiciones y enseñanzas.
3. Rama mahāyāna
Si atendemos a la rama mahāyāna del budismo, la clasificación de sus tipos es diferente. Como ya hemos visto, esta es una de las tres ramas mayoritarias de este conjunto de creencias. A diferencia del budismo therevāda, las enseñanzas son más una guía que una doctrina, con el objetivo de desentrañar la verdad, a través de la crítica y el razonamiento, poniendo en duda las teorías del pasado. Podríamos asimilarlo al método científico. También se aleja del budismo therevāda en cuanto a la aceptación de otra clase de sutras.
Entre los tipos de budismo mahāyāna se encuentra, por ejemplo, el budismo zen, conocido como la versión china del budismo.
El budismo zen apela por la meditación, el logro de la iluminación, el valor de la experiencia por encima de las escrituras y la creencia de que los seres humanos son uno con el cosmos y comparten identidad con todo lo que hay en él. El intuicionismo y el irracionalismo propio del budismo zen han llamado la atención de los filósofos de Estados Unidos y la Europa occidental.
Para los practicantes de esta corriente, el zen afecta a todos los aspectos de la vida: físico, intelectual y espiritual. Asimismo, escribir poesía y crear jardines de rocas minimalistas se consideran actividades especialmente expresivas. Las escuelas zen más conocidas son el rinzai y el soto.
4. Budismo vajrayāna
También denominado “budismo tibetano”, se desarrolló en la cordillera del Himalaya y es la principal religión de Bután y Mongolia. Si atendemos a esta clase de budismo, encontramos 4 escuelas:
- Nyingma: esta escuela está relacionada con la purificación del cuerpo, palabra y mente, relativa a deidades y promotora de la verdad absoluta.
- Kagyu: esta escuela promovía la trascendencia de la elaboración conceptual, la simplificación de los fenómenos y la posesión del camino por encima de la meditación.
- Sakya: se basa en la enseñanza Lamdré o “camino del fruto”. El principal sistema Dharma de esta escuela es el “camino con su resultado”.
- Gelug: es una de las escuelas principales del budismo en el Tíbet, y a ella pertenece el Dalái lama. A veces se la incluye en el budismo mahāyāna por compartir ciertos sutras con él.
Dividido en más o menos tipos, el budismo ha inspirado una de las principales corrientes de pensamiento que sobreviven en un mundo que va cada vez más rápido, que mira más hacia fuera y menos hacia dentro.