Mi pareja habla con su ex a escondidas: ¿qué puedo hacer?
“Mi pareja habla con su ex a escondidas. Cuando se lo pregunto lo niega, pero sé que mantienen contacto por el móvil de manera frecuente. ¿Qué puedo hacer?”. Puede que este nos parezca un problema sin excesiva relevancia, pero lo cierto es que es objeto de preocupación y elevada ansiedad por parte de muchas personas.
Lo es, sobre todo, en esos casos en los que parece que determinadas relaciones se idealizan cuando ya han finalizado. De pronto, hay quien viven en piel propia el conocido como síndrome de Rebeca. Es decir, sentir celos de la expareja del ser amado, la cual, a pesar de no estar presente, se convierte en esa figura alargada que todo lo invade.
La verdad es que hay un hecho evidente. Mantener el contacto con quienes tuvimos una relación afectiva no es algo excepcional. Sucede cuando ese final se decidió de manera amistosa. Y se da también cuando a pesar de que la ruptura fuera inevitable y necesaria, siguen existiendo ciertos sentimientos.
Son situaciones complejas y muy diversas en las que vale la pena profundizar.
Razones de por qué mi pareja habla con su ex a escondidas
No es extraño ni inusual conservar el número de nuestras exparejas. Como tampoco lo es seguir teniéndolos en nuestras redes sociales y estar al tanto de sus vidas y actualizaciones. Aunque en ciertas ocasiones esto último puede no ser saludable ni recomendable.
Quizás te preguntes si es habitual seguir hablando con las exparejas, ya uqe parece ser que es más frecuente de lo que pensamos. Trabajos de investigación, como los realizados en la Universidad de New Hampshire, indican algo ilustrativo. Entre la población universitaria, cerca del 40 % mantiene contacto con sus relaciones afectivas anteriores. El número es elevado.
La mayoría recuperó el contacto entre uno y dos meses después de la ruptura. ¿La razón? Son varias. Así, en caso de que nos estemos viendo en esta misma situación y nos preguntemos aquello de por qué mi pareja habla con su ex a escondidas, hay explicaciones que vale la pena comprender.
Las relaciones más breves correlacionan con un mayor contacto posterior
Algo que pudo verse en este estudio es que aquellas parejas que habían mantenido una relación más sólida y comprometida tenían menos probabilidades de mantener un contacto posterior. En estos casos, hay mayor necesidad de pasar página.
Sin embargo, aquellas parejas que habían estado juntas unos meses, por ejemplo, tenían mayor probabilidad de continuar con intercambios de mensajes y llamadas. En muchos casos, uno o los dos tenían la sensación de que aún existía cierta chispa, cierta complicidad o que su historia había cambiado, pero no había finalizado.
Todavía hay sentimientos latentes
Cuando te preguntas “¿por qué mi pareja habla con su ex a escondidas?”, quizás pienses que la razón sea que aún pueden existir sentimientos.
Así es. Son muchas las veces que se inician nuevas relaciones sin haber cerrado bien etapas anteriores. Se arrastran emociones demasiado vivas e intensas, falsas esperanzas o esperanzas reales… Hasta el impulso de hablar o contactar varias veces al día con la antigua pareja.
La relación actual no va bien y se busca a la expareja
Cuando las cosas no van bien en una relación, muchas personas buscan en su entorno una persona con la que tengan confianza para compartir lo que pasa y cómo se sienten. En algunos casos, esa persona es la expareja.
Comparten dificultades, los problemas vividos en un extraño intento por encontrar esa compañía en una complicidad que no se ha roto. Además, las dificultades actuales pueden sugerir la idea de que tiempos pasados fueron mejores. Recuerdos tamizados por la inteligencia de nuestra memoria, que tiende a conservar lo bueno y olvidar lo malo.
La amistad que no acabamos de entender
Es posible que el amor termine y que lo que quede entre dos personas sea una amistad. De este modo, hay quien no termina de creerlo y desconfía de la persona que mantiene un vínculo afectivo con quien sigue en contacto con su ex. En especial porque este contacto suele seguir pautas muy especiales y en él suele primer un lenguaje de confianza.
En este sentido, puede no ser ni fácil ni cómodo ver a la pareja compartiendo conversaciones y tiempo con la persona que no hace mucho ocupaba su rol.
Sin embargo, en muchos casos la pareja que ha roto su relación no tiene ninguna intención de volver, solo de conservar la relación con una persona en la que saben que pueden confiar. Una certeza muy difícil de alcanzar si tenemos en cuenta que habitamos en un mundo gobernado por la apariencia.
¿Qué podemos hacer en estas situaciones?
Trabajos de investigación como los realizados en la Universidad de Nebraska (Estados Unidos) señalan algo importante. La disolución de una relación de pareja no es algo sencillo. Abundan quienes se mantienen en contacto aferrándose a menudo a una posible reconciliación.
Sin embargo, la evidencia nos dice que el hecho de dar un cierre adecuado y pasar página nos permite avanzar con mayor integridad. También nos ayuda a construir después nuevas relaciones sin ese eco afectivo del ayer. Ahora bien, ¿qué pasa si mi pareja habla con su ex a escondidas?
Pues que es hora de empezar una conversación. Antes de empezar con los reproches, ponernos a la defensiva o alejarnos, podemos animar a nuestra pareja a que nos explique cuál es exactamente la situación. Una vez que están las cartas sobre la mesa, podemos plantearnos si esta definición nos duele o nos hace daño y tomar medidas al respecto.
La comunicación asertiva, sincera y madura es la clave en estos contextos. Cumplidos estos requisitos, si para nosotros esa relación es un obstáculo insalvable, estamos en todo nuestro derecho de plantearlo. Hablamos de realidades afectivas complejas que deben ser atendidas lo antes posible.
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