Novatadas, ¿cuáles son sus efectos psicológicos?

Las novatadas representan una serie de rituales de iniciación para muchos colectivos. Lo que nos dicen los estudios actuales es que esta práctica puede tener efectos muy perversos, aunque no siempre sea así.

Escrito y verificado por la psicóloga María Alejandra Castro Arbeláez.

Última actualización: 01 febrero, 2022

Las prácticas sociales potencian tanto la cohesión como el rechazo. Todo depende del enfoque que adoptemos, la perspectiva de análisis, junto con el tipo y la ejecución. Las novatadas son una parte de estas prácticas sociales, en muchos casos polémicas, que están muy asociadas al mundo universitario.

Comencemos por definir qué son las novatadas. Se trata de prácticas rituales que se llevan a cabo para que un grupo de personas entre a hacer parte de otro. La Real Academia de la Lengua española las define: ‘en algunas colectividades, vejamen y molestias que los antiguos hacen a los recién llegados’.

Novatadas, bullying estructurado

Las novatadas se suelen hacer en diferentes países, sobre todo en contextos escolares. Se suele ver como una broma que se le hace a las personas que comienzan a estudiar en una nueva institución. Por otro lado, lo que sabemos es que esta práctica, en apariencia inocente, puede causar un malestar enorme.

¿En qué consiste? Las bromas son un asunto subjetivo, y que a veces se nos pueden escapar de las manos. Por ejemplo, para alguien incitar a que los estudiantes de nuevo ingreso vayan vestidos de cierta manera puede parecer gracioso, pero para aquellos que lo tienen que hacer, puede no serlo tanto, llegando a sufrir de verdad.

No sabemos, sin conocer a una persona a profundidad, con qué retos se sentirá incómoda. Perseguirle, porque es nuevo en un lugar, u obligarle a hacer algo que no quiere utilizando la presión social puede ser considerada una forma de hacer bullyng.

El acoso escolar según la Real Academia de la Lengua Española es, la acción que ejercen uno o varios alumnos sobre otros con la intención de denigrarlos y vejarlos ante los demás. Según el diccionario del español jurídico es un ‘comportamiento contrario a la identidad del alumno en relación a su raza, color, nacionalidad, minusvalía, religión, orientación sexual o cualquier otra circunstancia.

Con las novatadas, como se trata de hacer “rituales de iniciación” por personas que ya pertenecen a un grupo, sin cuestionar la opinión de quienes los imponen/proponen y sin medir el daño que pueden causar, podríamos hablar de acoso. Sobre todo, cuando la presión es muy grande o las prácticas, como mínimo, muy cuestionables.

Novatadas, ¿prácticas perjudiciales?

No todas las novatadas resultan en perjudiciales. Imagina que el ritual es dar una bienvenida a las personas que entran a un grupo teniendo en cuenta lo que les puede gustar y apadrinándolos para que se sientan cómodos en ese nuevo ambiente.

Entonces, pueden resultar perjudiciales dependiendo de cómo se hagan. Pero ¿por qué causan daño? Veamos:

• Conllevan humillación.
• Se ejerce presión.
• Hay un choque de creencias, pensamientos, emociones y acciones.
• Puede ocasionar frustración.
• En algunas ocasiones trae consecuencias físicas.
• Puede ocasionar agresividad.
• Puede resultar en daños físicos, psicológicos y sociales.

Incluso hay quienes llegan a dejar los estudios por el gran sufrimiento con el que cuentan tras las novatadas. El punto es que, cuando se sobrepasan los límites, se causa gran daño a la víctima.

Pero, ¿cuáles son sus efectos psicológicos?

Eso va a depender de cada situación, pues cada persona asume lo que le sucede de una manera distinta. Entonces, para algunos, el sufrimiento va a ser mayor y para otros menor.

Sucede que, las bromas repercuten en el bienestar de la víctima, porque aunque no esté de acuerdo con las humillaciones a nivel verbal, es obligada o criticada si no lo hace. Además, cualquier humillación puede causar dolor psicológico, por inofensiva que parezca.

Al referirnos a dolor psicológico, estamos queriendo decir, que las novatadas causan malestar a nivel de pensamiento, emociones, acciones y relaciones. Entonces, al verse afectadas estas áreas en las que se desenvuelve, el individuo, puede llegar a sentir profunda angustia.

Cuando se exceden las novatadas con asuntos que resultan en abusos y agresión, las víctimas pueden llegar a contar con:

• Trastorno depresivo mayor.
• Trastornos de ansiedad.
• Problemas en el rendimiento académico.
• Traumas.
• Miedo.
• Dificultad para socializar.
• Estrés.
• Problemas de autoestima.
• Dificultad para tomar decisiones.

Entonces, las novatadas afectan los pensamientos, las emociones y las conductas de las víctimas. Además, el ámbito psicológico puede incidir en el físico y en el social. Por ejemplo, la persona podría llegar a desarrollar una fobia social o un trastorno de estrés postraumático después de esta experiencia.

¿Cómo afrontar las novatadas?

Ante todo, hay que saber poner límites. No todas las personas que hacen una novatada tienen la intención de dañar (de hecho, la mayoría no lo tienen). Entonces, si somos nosotros las “víctimas potenciales”, es saludable comunicarles de manera asertiva dónde están nuestros límites de tolerancia.

Sin embargo, algunas sí actúan haciendo daño. Cuando nos encontremos en una situación así, es importante pedir ayuda; no es malo hacerlo, de hecho, es una forma de protegernos. Por otro lado, cuando seamos testigos no nos quedemos callados, hagámosle saber a la víctima que cuenta con nosotros y tomemos medidas para parar lo que se ha convertido en una agresión.

Las novatadas deberían generar un ambiente distendido para que novatos y nuevos se conozcan. Desgraciadamente, no siempre cumplen esta máxima; en parte por las drogas, como el alcohol, que pueden llegar a limitar el autocontrol de las personas responsables. Así, se llegan a traspasar límites que en otro estado no se traspasarían.

En el artículo “Novatadas no oficiales en las escuelas secundarias, prevalencia, actividades y actitudes”, publicado en la revista Psichology in the Schools, los autores nos muestran un dato alarmante, el hecho de que el 43% de novatos están involucrados en las novatadas cuando no lo desean.

En suma, las novatadas son potencialmente peligrosas cuando las prácticas que se realizan en ellas y la presión con las que se imponen superan la asertividad de aquellos que las sufren. Por otro lado, además de ese sufrimiento presente, sus consecuencias negativas pueden ir más allá, pudiendo generar ansiedad social o marginación para aquellos que se niegan a obedecer.