Pogonofilia: la fuerte atracción hacia los hombres con barba
¿Los hombres con barba son más atractivos que el resto? Quizá no para todo el mundo, pero sí lo son para quienes manifiestan pogonofilia. Este término hace referencia a la fuerte atracción que sienten algunas personas hacia los hombres que llevan barba. De hecho, puede ser una especie de fetiche en ciertos casos.
¿Existe una explicación científica para este fenómeno o solo se trata de una tendencia? De acuerdo con la evidencia disponible, varios factores contribuyen a que exista esta atracción. Las barbas podrían relacionarse con características deseables que aumentarían el atractivo sexual.
La moda “lumber” y la pogonofilia
La moda está cambiando de forma constante y cada cierto tiempo aparecen nuevas tendencias en relación con la apariencia. Una de las más recientes es el estilo “lumber” o de leñador entre los hombres. Así, vemos celebridades que lucen camisas a cuadros con botas montañeras, chaquetas y gorros de invierno. Sin embargo, el rasgo que más resalta entre ellos se halla en su rostro: una barba espesa que puede estar larga o recortada.
Ahora, esta tendencia se ha vuelto muy común y cada vez más hombres deciden dejarse crecer la barba. Incluso vemos una gran cantidad de productos en el mercado hechos de forma específica para el cuidado de las barbas. Debido a esta tendencia, la pogonofilia se ha hecho más evidente en la población general, también para la comunidad científica.
Sin duda existen personas que sienten una atracción particular por las barbas en los hombres. Entonces, la cuestión sería si dicho fenómeno tiene que ver con la moda o si hay otras razones más profundas. Según algunos estudios, se pueden encontrar motivos biológicos y psicológicos que expliquen la atracción por las barbas.
Causas de la pogonofilia
Siguiendo el hilo anterior, Dixson y Brooks (2013) realizaron un estudio para evaluar el rol que tenía el vello facial en el atractivo masculino. Con este objetivo, los investigadores mostraron a mujeres fotos de hombres afeitados, con barbas ligeras, espesas y largas. Luego analizaron los juicios que hacían las participantes sobre los atributos de dichos hombres.
La conclusión fue que las mujeres consideran más atractivos a los hombres que llevan una barba espesa de dos semanas. Mientras tanto, las barbas largas se relacionaron con una mayor capacidad para la crianza de los hijos. Partiendo de esto, los autores concluyen que las barbas juegan un papel importante en la percepción de la masculinidad y atractivo físico.
No obstante, otra investigación señala que las barbas no aumentan el atractivo físico de manera directa, sino que lo hacen a través del la percepción del estatus social. Tanto hombres como mujeres de diferentes culturas consideran la barba un signo de mayor estatus (Dixson y Vasey, 2012).
La barba y su relación con la salud
Es posible que la pogonofilia no solo se relacione con la presencia de vello facial, sino también con otros factores. Tomando como base lo que sabemos de fisiología masculina, diferentes variables participan en el crecimiento de la barba. Una es la testosterona, cuyos niveles aumentan de manera significativa iniciada la pubertad.
Por otro lado, tener una piel saludable favorece la barba abundante. También llevar una dieta baja en grasa y hacer ejercicio de forma regular mejoran el crecimiento del vello facial. Además, la herencia genética puede contribuir.
Teniendo en cuenta esto, se podría hipotetizar que la barba es una característica que aumenta el atractivo si tenemos en cuenta los rasgos que entendemos, de manera consciente o inconsciente, que son característicos de un hombre saludable. En otras palabras, las personas podrían tener la percepción de que un hombre con barba es más saludable, y por ende, más atractivo.
Asimismo, la idea de que la barba se asocia con mayor estatus parece tener sus orígenes en nuestra historia evolutiva. Se dice que es probable que la barba fuese un atributo relacionado con la agresividad, por lo que favorecía la competencia y reproducción.
¿Cómo saber si tengo pogonofilia?
Es necesario aclarar que considerar que un hombre con barba es atractivo, no es sinónimo de pogonofilia. Esta palabra se usa para hablar de una atracción que tiene una intensidad bastante marcada. Tanto que puede producir algunas de las siguientes manifestaciones:
- El pulso se acelera al ver un hombre con barba.
- Aumento importante del deseo sexual.
- Sudoración.
- Rechazo notorio por hombres que no tienen barba.
De la misma manera, es importante acotar que esta no es una condición mental reconocida por alguna institución científica. Más bien se trata de un fenómeno relativamente reciente y que se asocia con ciertas tendencias en la moda masculina.
Pogonofobia, la otra cara de la pogonofilia
Así como se sabe de gente que siente una atracción especial por las barbas, hay quienes manifiestan un rechazo intenso. A esta conducta se le conoce como pogonofobia, una forma de temor o de repulsión intensa hacia las barbas.
Como las demás fobias, la pogonofobia sería una manifestación aguda de ansiedad que se relaciona con las barbas. En esta misma línea, se trata de un miedo o rechazo irracional en la que encontramos una variabilidad individual significativa.
Para cerrar, si bien la pogonofilia no es una condición patológica, es una conducta curiosa que destaca aspectos interesantes de los humanos. Hasta la fecha, no se han reportado casos donde la atracción por las barbas produzca un malestar especial. Sin embargo, la mente humana es compleja y sorprendente, por lo que aún no podemos descartar esta idea.
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- Dixson, B. J., & Vasey, P. L. (2012). Beards augment perceptions of men's age, social status, and aggressiveness, but not attractiveness. Behavioral Ecology, 23(3), 481-490.
- Dixson, B. J., & Brooks, R. C. (2013). The role of facial hair in women's perceptions of men's attractiveness, health, masculinity and parenting abilities. Evolution and Human Behavior, 34(3), 236-241.
