¿Sabes qué es la ilusión del optimista?
Infinidad de estudios científicos y sus resultados confirman el dominio de la intuición en la mente humana, por encima de la razón. ¿Esto qué quiere decir? Significa que nuestro cerebro nos intenta hacer creer en una realidad en la que somos “supuestamente” los controladores de nuestras acciones. Sin embargo, esto no es ni mucho menos cierto.
La científica inglesa Tali Sharot afirma que existen tres ilusiones que nos “hacen” percibir y ver el mundo muy positivo, fácil y de color de rosa.
¿Qué es la ilusión de superioridad?
Sharot realizó una encuesta en la que pedía la percepción personal de varios sujetos en cuanto a sus habilidades de conducción. Resulta que el 93% de los encuestados creía estar por encima de la media creyéndose “muy buenos conductores”. Este porcentaje obtenido es imposible ya que no todos podemos ser superiores al promedio dentro de un mismo campo.
A este hecho Sharot lo denomina ilusión de superioridad. Pero también podríamos tomar como ejemplo de lo anterior las elecciones que realizamos cada día. Si nos preguntan cuales son las causas o los “porqué” a como elegimos vestir, vivir o cualquier acto que dependa directamente de nosotros, seguramente responderemos con muchas razones lógicas para nosotros mismos o, lo que es lo mismo, excusas para sentir que lo que elegimos fue la mejor opción y justificarnos positivamente.
¿Y la ilusión introspectiva?
Solemos pensar que nuestros motivos son apoyados por nosotros mismos y están justificados. A este hecho Sharot lo llama la ilusión introspectiva.
Con respecto a los malos momentos y altibajos de la vida, solemos sobreestimar las experiencias positivas que nos ocurrirán en un futuro y no tomamos consciencia o importancia de lo negativo que pueda ocurrir, infravalorándolo.
Descubriendo el sesgo optimista
Tenemos tendencia a pensar que no nos ocurrirá ningún problema o que somos invulnerables en cualquier parcela de nuestra vida. El futuro será mucho mejor que el presente. Con esto no estamos afirmando que todo lo que tenga que pasar sea malo, para nada. Pero sí que debido a este sesgo optimista podemos salir adelante, continuar sin pararnos e incluso no reflexionar en las posibles consecuencias no tan positivas que puedan ocurrir y que, precisamente son de las que mas podemos aprender.
La parte positiva de estos resultados, que la hay, es que podemos ser conscientes de esta visión optimista de la vida ya que es parecido como con las ilusiones ópticas, que aunque las entendamos no desaparecen.
Es cierto que vida, lo que eres tu ahora, tenemos una. El optimismo es vital para gozar infinidad de preciosos momentos, experiencias y lo mas importante, nos permite compartir el amor y la ilusión por la vida, la de ahora.
Pero, ¿Qué es el optimismo?
El optimismo nos permite confiar en nuestras capacidades y posibilidades, enfrentando con perseverancia y estado anímico muy positivo ante cualquier dificultad que se nos presente en el camino. Nos ayuda a descubrir lo bueno de las personas que nos rodean y a aceptar todo tipo de favores que nos ofrezcan de corazón.
Ser optimistas nos permite encontrar soluciones, ventajas y posibilidades ante los inconvenientes surgidos. La diferencia de su valor opuesto, el pesimismo, es que la primera nos insiste en apreciar todas las cosas, lograr que nuestras actitudes cambien.
El optimista refuerza y alimenta su perseverancia, deteniéndose a pensar en todas las posibilidades y tomando la que considera pertinente para esa ocasión. Esto evita que se engañe ante una falsa realidad que le asegura una vida más fácil y placentera.
Por ello, y para que os quedéis con buen sabor de boca os dejo estas frases sobre optimismo e ilusión por cada día:
-La vida tiene su lado sombrío y su lado brillante; de nosotros depende elegir el que más nos plazca.-El optimista cree en los demás y el pesimista sólo cree en sí mismo.-No anticipéis las tribulaciones ni temáis lo que seguramente no os puede suceder. Vivid siempre en un ambiente de optimismo.-Mantén tu rostro hacia la luz del sol y no verás la sombra.-Haz que tu cabeza trabaje a favor tuyo y poco a poco adquirirás la costumbre de no molestarte cuando las cosas vayan mal.-Memoria selectiva para recordar lo bueno, prudencia lógica para no arruinar el presente, y optimismo desafiante para encarar el futuro.-El optimismo es la fe que conduce al éxito. Nada puede hacerse sin esperanza y confianza.