Tropezar mil veces con la misma piedra
Todos cometemos errores, todos en nuestra vida diaria nos equivocamos. Habitualmente nos resulta más cómodo culpar a los demás de nuestros fallos, o incluso aun más sencillo resulta ignorarlos.
Podemos clasificar tres tipos de actitud cuando se presenta un error.
La persona que no es capaz de asumir la responsabilidad de su error; la que adopta una actitud indiferente ante el mismo, y la que con seguridad reacciona ante su equivocación.
En la vida, equivocarse es “otro tipo de lección“, que nos aporta un gran beneficio, la que enseña a no volver a cometer la misma equivocación reiteradamente, y nos ofrece la experiencia de escoger en la próxima ocasión la opción más correcta.
Algunas personas atribuyen sus errores sistemáticamente a los demás. No aceptan jamás una equivocación. Otras son incapaces de tomar decisiones ante un error, y prefieren que personas más seguras de sí mismas, tomen decisiones por ellos. Y por último, hay un porcentaje de personas, que ante cualquier desacierto cometido, aprenden y sacan partido para el futuro.
Lo más importante es analizar los fallos de manera objetiva y clara, estudiar las razones o motivos que nos han llevado a equivocarnos y recapacitar sobre los mismos con sinceridad.
Debemos de evitar el sentimiento de culpa y recordar que cometer errores no equivale a fracasar, aprender de la experiencia, yrectificar cuando sea factible.. La clave determinante para superar una decisión poco afortunada es la ilusión.
Las personas que reiteradamente tropiezan con los mismos errores, sin duda prefieren ignorar sus fallos como mecanismo de defensa, antes que admitir sus equivocaciones.