3 técnicas innovadoras para aprender a comunicarte mejor

3 técnicas innovadoras para aprender a comunicarte mejor
Sergio De Dios González

Revisado y aprobado por el psicólogo Sergio De Dios González.

Escrito por Edith Sánchez

Última actualización: 23 enero, 2018

Comunicarte mejor es también una manera de hacer más sencilla y gratificante tu vida. Buena parte de las dificultades con los demás, e incluso con uno mismo, derivan de fallos en la comunicación. Este es un ámbito determinante, porque es a través del lenguaje verbal y no verbal como le decimos al mundo quiénes somos.

La buena comunicación es aquella que facilita y promueve el entendimiento mutuo. Por lo tanto, implica la capacidad para darte a entender, pero también para comprender a los demás. Significa que expresas lo que quieres expresar, en el momento adecuado y de una forma que les permita a los otros interpretar correctamente el mensaje que quieres transmitir.

Desconfío de la incomunicabilidad; es la fuente de toda violencia”.

-Jean Paul Sartre-

También, por supuesto, exige que seas capaz de escuchar y decodificar o interpretar los mensajes que los demás te ofrecen. Parece sencillo, pero no lo es tanto. Para lograrlo tienes que despojarte de prejuicios, sesgos y filtros que te induzcan a tergiversar lo que te dicen o te manifiestan.

La mejor razón para invertir energías en esta tarea es que la buena comunicación incrementa la calidad de vida. Cuando logras expresarte de manera genuina, te sientes más libre . También la carga se reduce. Nada más pesado que tener atragantado algo que necesitas decir, sin poder hacerlo. Por eso, aquí te damos tres técnicas que pueden ayudarte a mejorar tus comunicaciones.

1. Hacer una sustitución, una estrategia para comunicarte mejor

Esta estrategia para comunicarte mejor consiste en reemplazar expresiones, gestos y conductas. Todos tenemos una especie de termómetro interno o intuición que enciende una señal de alarma cuando entiende que nos estamos comunicando o nos hemos comunicado mal.

tres personas enseñándote a comunicarte mejor

La idea es identificar qué elementos entraron en juego cuando la comunicación con los demás no fue suficientemente efectiva. No debes concentrarte en las posibles fallos de tu interlocutor, sino en los tuyos. ¿En qué momento se presentó el desencuentro? ¿Empleaste palabras o frases que molestaron a la otra persona? ¿Cuál fue el tipo de lenguaje y de gestos y posturas que esgrimiste?

Al hacerte esas preguntas, puedes sacar valiosas conclusiones que podrían ayudarte a comunicarte mejor. El sentido de todo esto es lograr sustituir esos comportamientos que te impiden ser claro, abierto y asertivo en la forma de comunicarte.

2. Aumento o reducción

Está relacionado con lo anterior, pero en este caso se orienta específicamente hacia el volumen o cantidad de las expresiones. Para comunicarte mejor, identifica qué falta o qué sobra en tus mensajes.

En principio, la idea es que te enfoques en la unidad básica: la palabra. ¿Eres de pocas o de muchas palabras? ¿Empleas las suficientes palabras para ser comprendido o tratas solamente de utilizar las necesarias? ¿Desarrollas hasta los detalles más pequeños para que entiendan mejor? ¿Te estarás excediendo en este punto?

Si lo que quieres es comunicarte mejor, también es necesario que examines tu lenguaje no verbal. En este terreno también puede haber excesos o defectos. Si hay muy poca expresividad, quizás es porque no te estás implicando lo suficiente con lo que dices o no te sientes muy confiado para manifestar tus sentimientos. Si la expresividad es excesiva, es posible que tu forma de comunicarte intimide o asfixie la comunicación de los demás.

3. Eliminación

Hay aspectos que forman parte de nuestra manera de ser. No se puede, ni se debe, erradicarlos porque constituyen una parte esencial de nuestra identidad. Sin embargo, también hay conductas que deben ser eliminadas si tu objetivo es comunicarte mejor. Entre tales comportamientos se encuentra el miedo a expresarte frente a los demás.

chico que calla para que aprendas a comunicarte mejor

El miedo de decir o de manifestar lo que se piensa o se siente tiene una raíz neurótica. Los seres humanos deberíamos poder expresarnos en cualquier circunstancia. Lo que se puede elegir o matizar es la forma de hacerlo. Es cierto que no todo el mundo tiene la misma fluidez, ni tiene por qué tenerla. Sin embargo, todos deberíamos poder mostrar lo que hay en nuestro mundo interior con precisión cuando así lo decidiéramos.

De este modo, es mejor eliminar (o tratar de hacerlo al menos) los comportamientos que nos lleven a guardar silencio, cuando no se desea hacerlo. Está en cada persona no permitirse a sí misma incurrir en ellos. Se trata de una decisión que exige fortaleza y carácter, pero bien vale el esfuerzo.

Estas tres técnicas te ayudarán a comunicarte mejor, siempre que te adhieras a ellas y las internalices. Vale la pena hacerlo porque tu relación con los demás se verá enriquecida. También conseguirás mejorar tu diálogo interior y poner en marcha conductas más consecuentes con tus valores e intereses.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.