Canciones sobre rupturas: ¿por qué tienen tanto éxito?

Pueden gustarnos más o menos, pero las canciones que hablan del desamor, como las de Shakira, Miley Cyrus o Taylor Swift, acaparan toda la atención y millones de descargas. ¿A qué se debe su enorme impacto?

Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater.

Última actualización: 24 enero, 2024

Si hay una canción icónica en materia de rupturas y finales de una relación es I Will Always Love You. La cantó Whitney Houston y la popularizó en la película El guardaespaldas. Fue todo un éxito, de hecho, logró permanecer 14 semanas en el número uno del Billboard Hot 100. Corrían los años 90. Ahora bien, lo curioso es que esta canción fue escrita en 1973 por Dolly Parton.

La reina del country estadounidense, brillante como nadie en la escritura de canciones sobre esta temática, también llevó este tema al número uno de las listas musicales. Ahora, es su ahijada, la cantautora Miley Cyrus, quien está rompiendo récords de reproducciones con su último sencillo, Flowers. Y es que es casi inevitable escucharla en bucle una y otra vez durante horas.

Parece que hemos llegado a una era en que las rupturas, reflejadas al menos en el área musical, ya no se viven con desconsuelo y pegajosa melancolía. Ahora, el final del amor da paso al empoderamiento e incluso a la deconstrucción del amor romántico para enfatizar una idea: no se necesita una pareja para ser feliz.

Los tiempos cambian, pero nuestra fascinación por las canciones que hablan sobre el fin del amor, persiste. Ahora bien, ¿a qué se debe este fenómeno tan arraigado en nuestro inconsciente colectivo?

¿Por qué nos atraen las canciones sobre rupturas?

Las canciones sobre rupturas se meten bajo nuestra piel para erizarla y despertar en nosotros sentimientos de lo más intensos. No importa que la letra nos haga derramar alguna lágrima o bien que nos invite a bailar tras darle un portazo a alguien que nos quiso mal. Más allá de las circunstancias que originaron el desamor, están las emociones, esas con las que tanto nos identificamos.

Hace unas semanas, medio mundo comentaba la última canción de Shakira y Bizarrap, cuyas letras, totalmente explícitas, derribaban a quien había sido su pareja. Sin embargo, el fenómeno no es nuevo. Hablar de las relaciones tóxicas vividas y convertir las letras en afilados mecanismos de catarsis es un clásico. Solo que ahora genera likes e infinitos debates en redes sociales a los que todos desean apuntarse.

Ahora bien, más allá del amarillismo, ¿por qué nos atraen de esta manera las canciones sobre rupturas?

1. Empatía, todos hemos vivido situaciones similares

A veces el amor se desvanece, sin explicación. Otras, somos engañados y traicionados de manera cruel. Hay miles de canciones para todo tipo de ruptura, y escuchar letras que nos recuerdan a nuestras historias enciende la empatía. Y no solo eso. Uno se siente menos solo, porque saber que otras personas han transitado por desfiladeros emocionales semejantes reconforta.

De pronto, hay alguien que pone en palabras y de manera exacta lo que nosotros sentimos. Esto nos resulta tan asombroso como placentero a la vez.

2. Escuchar canciones sobre desamor, sana

Someone Like You, de Adele. Lose You To Love Me, de Selena Gomez. Back to black, de Amy Winehouse. Alone Again (Naturally), de Gilbert O’Sullivan. Las canciones sobre rupturas son la esencia misma de la tristeza, pero para la mente humana resultan reconfortantes. Es más, al cerebro le agradan, hasta el punto de resultar de lo más sanadoras.

Una investigación realizada en el King’s College London destaca que las canciones pueden mediar en determinados procesos fisiológicos que mejoran el bienestar físico y psicológico. Nos permiten revisar nuestras historias, desahogar emociones y recomponernos, mientras escuchamos durante horas esas letras tristes.

3. Nos permiten lidiar con nuestra confusión emocional

Dejar a quien lo fue todo durante un tiempo no solo duele y hace que nos sintamos perdidos. Las rupturas emocionales generan confusión emocional. Por no hablar de cuánto cuesta llevar a cabo el duelo, cuando los recuerdos pesan, cuando debemos volver a nuestra vida y esa ausencia aún sangra el corazón.

Escuchar canciones sobre rupturas nos permite reenfocar nuestros sentimientos para entenderlos mejor. Uno puede comprender el porqué de su ira y manejarla mejor. Aliviarla. Podemos también tolerar la tristeza, al saber que también otros pasaron por lo mismo. Las emociones se condensan en palabras que podemos tararear, en imágenes que ir soltando para poder avanzar.

4. Nos enseñan que, a pesar de todo, sobreviviremos

En la actualidad, las canciones sobre el fin de una relación buscan empoderarnos. Nos enseñan que, a pesar del dolor que ahora sentimos, nadie muere de desamor; todos terminamos sobreviviendo. Es más, podemos hacerlo con valiosos aprendizajes, viéndonos de manera más luminosa, fuerte e independiente.

El fin de una relación, lejos de destruirnos, puede servir incluso de valiosa inspiración.

5. El morbo de las historias reales que hay detrás de las canciones

Al ser humano le mueve el morbo, la curiosidad, el saber qué hay detrás de lo que no vemos. Si la canción de Shakira y Bizarrap generó tanto impacto fue porque, de pronto, se nos desveló lo que la colombiana sentía por su ruptura con Gerard Piqué. Si muchos analizan en detalle el videoclip All Too Well de Taylor Swift, es para descifrar cómo fue su relación con Jake Gyllenhaal.

Leer entre líneas para comprender y atisbar hechos personales sobre cómo fue esa historia de amor de los cantantes es una de nuestras aficiones favoritas.

Letras y emociones, una combinación que hace vibrar

Puede que algunos recuerden el álbum Biophilia de la cantante islandesa Björk. Hablaba de ciencia, de células, de virus y de cuerpos celestiales. Aquel trabajo recibió un gran reconocimiento, pero casi nadie recuerda ni una sola de aquellas canciones. Tal vez, porque, aunque la ciencia sea hermosa y fascinante, no nos emociona tanto como el complejo universo del amor.

Las letras que nos hablan de historias tristes del amor o de la necesidad de reconstruirnos tras una ruptura siempre conmoverán al mundo. Al fin y al cabo, somos seres emocionales que ansían, por encima de todo, ser amados.

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