Comunicación íntima, la clave de las relaciones profundas
Los seres humanos nos estamos enviando mensajes constantemente, aunque algunas veces no seamos conscientes de ello. Ahora bien, si queremos establecer relaciones profundas, resulta esencial contar con comunicación íntima.
A través de este artículo te contamos de qué se trata este tipo de comunicación, y por qué podemos conseguir conexiones poderosas a través de ella. Además, veremos en qué relaciones puede haber comunicación íntima. ¡Profundicemos!
¿Comunicación íntima qué es?
Cuando hablamos de comunicación íntima, hacemos referencia a aquella información que transmitimos de manera asertiva y que nos permite compartir con el otro información muy personal, con la que podemos ser muy vulnerables.
En muchos casos, además, la comunicación íntima lleva consigo la comunicación efectiva, que afecta de forma positiva a las áreas en las que nos desenvolvemos. Algunas habilidades con las que cuentan las personas que se comunican de forma íntima son:
- Escucha. Se trata de ir más allá de oír, es decir, hacerlo, pero con consciencia.
- Expresar. Lo que sentimos, teniendo en cuenta el momento, el lugar y la persona.
- Autoconocimiento. Conocernos nos ayudará a saber qué queremos y a dónde vamos, lo que va a influir en cómo seamos con los demás.
- Empatía. Si no nos ponemos en la piel del otro, no crearemos un vínculo de confianza que permita que la relación sea profunda.
- Reconocer nuestras debilidades y fortalezas. Para saber con qué recursos contamos y qué podemos potenciar. Hacerlo hará más sencillo el reto de gestionar nuestra comunicación para que sea cada vez más asertiva.
Comunicación íntima, la base para construir relaciones sanas
La comunicación íntima es uno de los ingredientes que nos puede ayudar a establecer relaciones sanas. Se debe a que, al ser asertivos, podremos además de transmitir el mensaje que realmente pretendemos de manera efectiva, proteger nuestros límites para evitar que alguien nos dañe.
Por otro lado, cuando conectamos más allá de lo superficial, estrechamos lazos. Si lo hacemos siguiendo lo mejor para nuestro bienestar, a través de la comunicación efectiva, la calidad de nuestras relaciones mejorará. Por otro lado, con ella será más sencillo estar alerta y no permitir relaciones tóxicas.
Entonces, la comunicación íntima no solo se trata de conectar con otra persona, sino también de hacerlo en confianza. Así, sumamos peldaños para nuestro bienestar.
¿En qué relaciones podemos aplicar la comunicación íntima?
Podríamos potenciar la comunicación íntima con nuestra familia. A veces podríamos pensar que nacemos con ello, pero cercanía no es sinónimo de este tipo de comunicación. Más bien, debemos ir construyendo esta base de intercambios paso a paso, lo que podría resultar en que nuestro vínculo ganase en calidad. El otro podría aportarnos mucho más, nosotros podríamos aportar mucho más al otro.
También, se puede aplicar la comunicación íntima a las relaciones de pareja. Abrirnos en el plano emocional y hacerlo con confianza. Con la fe de que seremos escuchados y, en buena parte, comprendidos.
Además, los patrones y estilos de comunicación en pareja ya se están estudiando; por ejemplo, Rozzana Sánchez Aragón y Rolando Días Loving evalúan en su artículo publicado en la revista Anales de psicología, el papel de la comunicación en cuanto al bienestar de la pareja.
Otra relación que podemos fortalecer con este tipo de comunicación es la amistad. A veces se piensa que solo hay vínculos tóxicos a nivel de pareja, pero también existen en este contexto. Encaminarnos a la comunicación profunda en nuestras amistades nos ayudará a fortalecer el lazo.
Ahora bien, no solo existe la comunicación íntima en este tipo de relaciones. También, hay otros ámbitos en las que se desarrollan; por ejemplo, el laboral. De hecho, Enrique Sueiro resalta en su artículo publicado en El País, que el 60 % de los problemas empresariales son producto de una mala comunicación y que esto cambiaría si vamos en búsqueda de una transmisión del mensaje más auténtica, es decir, con la comunicación íntima.
En suma, la comunicación íntima nos brinda la oportunidad de encaminar nuestras relaciones hacia el bienestar; no importa de qué entorno se trate, pero sí la asertividad, la honestidad y el cuidado con los que interactuemos. Maravilloso, ¿verdad?
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Aragón, R.S: & Díaz-Loving, R. (2003). Patrones y estilos de comunicación en pareja: Diseño de un inventario.
- Anañes de Psicología, 19
- (2), pp. 257-277. Sueiro, E. (2010). Comunicación íntima y preventiva en la empresa. El País, Economía, p. 25.