14 cosas más comunes que hacen las personas bipolares

El trastorno bipolar persiste como una condición desconocida, pero no infrecuente para mucha gente. En este artículo repasamos sus principales manifestaciones.

Escrito y verificado por la psicóloga deportiva Gloria Redondo.

Última actualización: 17 noviembre, 2023

Algunas personas que sufren de cambios emocionales bruscos, se preguntan qué cosas hacen las personas bipolares. Esta afección es frecuente en la población, sin embargo, hay muchos mitos e ideas equivocadas en torno a ella.

Por esa razón, a continuación, indagaremos sobre el trastorno bipolar y cuáles son los comportamientos más habituales. Todo esto, con el propósito de que puedas detectar los síntomas clave y actuar lo más rápido posible.

¿Qué es el trastorno bipolar?

La Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11) describe el tema como: «Trastornos del estado de ánimo definidos por la presencia de episodios o síntomas maníacos, mixtos o hipomaníacos. Se alternan a lo largo del curso con episodios depresivos o períodos de síntomas depresivos».

En función de si aparecen episodios maníacos o hipomaniacos, se distinguen dos clases de trastornos bipolares. A saber, los siguientes:

• Bipolar tipo I: aparecen de manera necesaria episodios maníacos, además, es posible alternarse con los cuadros depresivos. De forma resumida, en la manía, el estado de ánimo es expansivo, elevado o irritable. Más adelante profundizaremos en sus síntomas.
• Bipolar tipo II: se dan episodios hipomaníacos alternados con depresivos. En la hipomanía, el estado de ánimo también es expansivo y positivo, pero no tan intenso como en la manía.

Comportamientos o cosas comunes de las personas bipolares

Una vez clarificado qué es el trastorno bipolar, enumeraremos qué cosas o conductas son comunes en las personas bipolares. Sigue leyendo con atención a ver si identificas alguno de los signos de alarma.

1. Poca necesidad de dormir

Uno de los primeros cambios que experimentan las personas bipolares es la desregulación del ciclo circadiano. Los cambios en la cantidad de horas de sueño pueden ser tanto por exceso, sobre todo en las fases depresivas, como por defecto, de manera principal en la manía.

De hecho, la melatonina, hormona encargada de regular los ritmos sueño-vigilia, está alterada en el trastorno bipolar. Una revisión publicada en la Revista Analogías del Comportamiento señala que el hallazgo más consistente en este ámbito es que los niveles de melatonina se encuentran elevados durante la fase de manía, para luego descender durante la etapa depresiva.

2. El discurso es acelerado y difícil de seguir

Entre los síntomas más distintivos de la bipolaridad se encuentran las alteraciones en el discurso. Esto, en realidad, refleja un desorden en el pensamiento y se conoce como «trastorno formal del pensamiento».

Cabe destacar las resonancias propias del discurso maníaco. Las palabras del habla espontánea se eligen en función de su sonido y no del significado. Por tanto, parece que el paciente habla en forma de rimas o aliteraciones. Por ejemplo: «Muchas malas mozas mienten mientras miran».

3. Conductas de riesgo

Un trastorno bipolar es una condición que supone un riesgo para la vida de la persona. En los estados de manía es habitual que el sujeto no perciba el peligro como tal y que sobreestime sus capacidades personales.

Es por eso que suelen verse involucrados en situaciones tales como la conducción temeraria, peleas con desconocidos, conductas sexuales de riesgo o comportamientos suicidas. Por todo esto, hay que estar bien atento y actuar de manera rápida y contundente.

4. Gastan el dinero en cosas innecesarias sin control

El gasto sin control es uno de los comportamientos más comunes entre los pacientes bipolares. Por otro lado, es fácil de identificar esta conducta por parte del círculo cercano. Los allegados pueden notar que la persona bipolar adquiere demasiadas cosas innecesarias en un lapso corto. También son usuales las deudas, préstamos y problemas en la gestión del dinero.

5. Están irritables e incluso llegan a la agresividad

Relacionarse con alguien en un estado de manía es un asunto muy complicado. Los sentimientos de irritabilidad desembocan con frecuencia en comportamientos agresivos. Tienden a malinterpretar las intenciones de los demás, al saltar rápido a las conclusiones, pues construyen interpretaciones paranoides.

Ante esta elaboración mental, suelen responder con agresividad como una manera de defenderse.

6. Cambios bruscos de humor

Como su propio nombre indica, en el trastorno bipolar el paciente experimenta cambios bruscos de un polo a otro en su estado anímico. Pero no solo eso, sino que dentro de una misma polaridad, el espectro de sensaciones es muy amplio.

En el polo de la manía transitan, desde la euforia hasta la irritabilidad. Mientras que en el polo depresivo, los sentimientos más comunes son: tristeza, desesperanza y apatía. La clave, aparte de las emociones, es que se va pasando de un estado a otro de forma saltígrada.

7. Consumen drogas excitatorias o depresoras

El consumo de drogas es un problema muy extendido entre las personas con problemas de salud mental. No se sabe si es causa o consecuencia de la patología, pero en cualquier caso es un problema de comorbilidad al que hay que prestar atención.

Dentro de las conductas de riesgo, es bastante frecuente el consumo de sustancias. Estas pueden ser tanto de corte excitatorio, las cuales aumentan las sensaciones positivas, como depresoras, que contrarrestan la expansividad anímica.

8. Llegan a tener problemas con la ley

Los encontronazos con las fuerzas del orden es una situación que la mayoría ha experimentado. Como resultado del comportamiento de riesgo, es posible que a las personas bipolares la realidad les imponga un límite, en este caso, en forma de sanción o de detención.

9. Aspecto extravagante e inapropiado

La forma de vestir en estos cuadros es muy llamativa, en ocasiones, roza lo inapropiado en función del contexto. Las personas en una fase de manía se visten con el propósito de llamar la atención. Esto puede ser con colores, prendas de ropa o con combinaciones provocativas.

Por su parte, en la depresión es habitual que se descuide la higiene personal y el aseo. El aspecto es apagado y desaliñado.

10. Sobreestiman sus capacidades

El sentimiento de omnipotencia o de poder afrontar todo, es algo que se observa con regularidad. En una persona bipolar esta no es una característica que se valore de forma positiva, ya que en combinación con la desinhibición y la impulsividad supone un peligro para la integridad física.

El trastorno bipolar es una de las condiciones mentales que más problemas y limitaciones genera en quienes la padecen.

11. Inician muchas acciones, pero no terminan ninguna

La desorganización es un síntoma clave que afecta a esta condición. Como ya dijimos, el discurso es difícil de entender, porque no está organizado. Pues bien, en los esfuerzos dirigidos a lograr una meta, pasa algo parecido.

Les cuesta mucho planificar una secuencia de acciones para alcanzar un objetivo, aunque esta sea algo tan cotidiano como recoger la casa. En su lugar, se salta de una acción a otra antes de que la primera se haya terminado.

12. Abandonan el tratamiento farmacológico

El tratamiento farmacológico es fundamental para el control de la patología mental. No obstante, el principal problema que afrontan, tanto los pacientes como los profesionales que les atienden, es la adherencia al tratamiento.

Los estabilizadores del estado del ánimo, como las sales de litio, son los fármacos de elección para controlar los síntomas. A pesar de ser muy eficaces, también tienen una alta tasa de abandono. Por esa razón, uno de los objetivos principales a trabajar en terapia es el compromiso con el tratamiento.

13. Fallos en la concentración y en las funciones ejecutivas

Los déficits en las funciones cognitivas es una de las quejas más habituales de las personas con trastorno bipolar. En función del estado anímico, un artículo de la Universidad de Antioquia señala lo siguiente:

• En la depresión: la velocidad de procesamiento mental es menor. También aparecen déficits en las funciones ejecutivas y la capacidad de concentración.
• En la manía aguda: aparecen dificultades en las funciones ejecutivas (razonar, planificar, inhibir conductas…); mientras que en fase estable, los déficits se concentran en la memoria de trabajo, la capacidad de retener información y manejarla durante periodos breves.

14. La conciencia de enfermedad es nula

No queremos terminar esta lista de cosas comunes que hacen las personas bipolares, sin mencionar al insight o la conciencia de enfermedad. Esto es, la capacidad que tiene el paciente de darse cuenta de que su comportamiento o estado de ánimo está alterado y que necesita ponerse en manos de un profesional.

Durante un episodio maníaco, y en menor medida hipomaníaco, la conciencia de enfermedad es nula. No creen que su forma de actuar constituya un problema e incluso un peligro para su integridad.

Presta atención a cualquier cambio, aunque sea sutil

Un cuadro bipolar se ve desde afuera como una alteración grave y que afecta a todos los campos vitales. No obstante, hay que tener en cuenta que lo descrito en este artículo se refiere a cuando ya se instauraron los síntomas.

De manera normal, estos trastornos tienen una aparición insidiosa, es decir, se presentan poco a poco. Por tanto, antes de que toda la psicopatología se visibilice, conviene afinar los sentidos y prestar atención a cualquier cambio que veamos, por muy sutil que sea.