7 razones por las que nos cuesta tanto cumplir nuestros sueños
¿Cuántos propósitos de año nuevo has cumplido? ¿Llegaste tan lejos en tu carrera como querías? ¿Lograste cambiar la vida de los que te rodean? Pocas veces se responde «sí» a todas estas preguntas. A veces cuesta tanto cumplir nuestros sueños que es inevitable cuestionarse si apuntamos demasiado alto.
Sin embargo, no somos islas en medio del océano. La actitud, quienes nos rodean, nuestro nivel socioeconómico y más, interactúan con nuestras intenciones. Es necesario identificarlas para tratar de superarlas. Por eso, en este espacio encontrarás las razones más habituales que, de un modo u otro, retrasan u obstaculizan la consecución de tus objetivos.
Razones internas por las que cuesta tanto cumplir nuestros sueños
Las personas tenemos cierto grado de control sobre nuestro destino y nuestros logros. En ocasiones, aunque el camino sea llano, ponemos piedras en él sin darnos cuenta. Algunos de esos escollos son los que planteamos a continuación.
1. Procrastinación
Es difícil salir de la zona de confort. Otras veces, realizar esfuerzos se pospone para días en los que se tienen más energías. Esto, que es entendible en momentos concretos, se convierte en un problema cuando se alarga en el tiempo.
Un ejemplo aparece referenciado en la Revista de Estudios de Educación y Formación, que estableció un vínculo negativo entre la gestión del tiempo y la procrastinación en estudiantes: cuanto más dejaban para después, peor se organizaban.
2. Intolerancia al fracaso y a la frustración
El camino para cumplir un sueño nunca es lineal: fluctúa con los pequeños éxitos y los escollos que surgen a lo largo del proceso. Pero no todo el mundo tiene esta idea interiorizada y se desmotiva cuando encuentra contratiempos.
En tolerar estos fallos y seguir adelante reside la capacidad de cumplir los sueños. Así lo muestran Valiente-Barroso et al., 2021, en un estudio efectuado en adolescentes: un alto nivel de planificación y la toma de decisiones activa tienen como predictor buenas puntuaciones de tolerancia a la frustración.
3. Baja autoestima
Del estudio mencionado antes se extrae otro resultado: la buena autoestima también es un predictor de una toma de decisiones activa. Creer que no se es capaz de cumplir un sueño suele ser, además de una mentira que nos cuenta la mente, uno de los obstáculos más habituales a la hora de materializarlo.
4. Falta de disciplina
De acuerdo con un artículo de la Revista Psicodebate, la autodisciplina hace referencia al control de la propia conducta y la constancia en el esfuerzo, lo cual posibilita el cumplimiento de objetivos a largo plazo.
Aunque no es fácil, se sabe que estos son factores contribuyen al éxito en muchos ámbitos, así que conviene desarrollar esta parte de la personalidad.
Elementos externos que interfieren con el éxito
Es muy seguro que te hayas topado con mensajes motivacionales en redes y otros medios: «eres el dueño de tu destino», «la felicidad es una actitud», «la clave del éxito está en ti»… Te suena, ¿verdad? ¿Seguro te han venido excusas a la mente tras leerlas?
Pues, en parte, tienes razón. No todo lo que garantiza nuestro éxito depende de nosotros. A veces, el locus de control es externo y eso no se puede discutir. Vamos a ver qué obstáculos enfrentan las personas en su camino hacia el éxito.
1. Estatus socioeconómico
La confianza en uno y, por tanto, el éxito conseguido en la vida, están muy relacionados con la clase social. En una investigación de la APA en 2020 se evidencia esto: los individuos de clase alta que participaban en el estudio tenían más exceso de confianza. Esta actitud, a su vez, creaba una impresión de competencia y les otorgaba más papeletas para alcanzar un rango social elevado.
Por otro lado, la cantidad de recursos que se poseen también influyen en el éxito. No solo el dinero es un recurso repartido de forma desigual en la sociedad: las influencias, las oportunidades, la calidad de los cuidados básicos, las opresiones, todo ello está ligado al nivel de privilegio.
2. La indefensión aprendida
Aunque esta percepción, a menudo ilusoria, es algo individual, también se trata como un fenómeno social, pues se desarrolla a partir de la influencia del entorno. Por ejemplo, tras un bombardeo de noticias de tramas de corrupción política, muchas personas tendrán una idea inconsciente de que no es posible cambiar ese panorama.
Ese pensamiento conformista que repite con constancia «esto es lo que hay, no podemos hacer nada», es otra de las razones por las que cuesta tanto cumplir nuestros sueños. Ante la falta de control percibida no existe motivación para ponerse en marcha.
3. Carencia de apoyo social
Cuando alguien persigue un objetivo a largo plazo, parte de su sustento emocional y psicológico es el apoyo de los demás. Si bien el éxito no tiene por qué depender de esto directamente, sí que reduce sus posibilidades cuando, aparte de luchar por nuestros sueños, debemos defendernos de zancadillas ajenas y de la falta de impulso social.
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Si cuesta tanto cumplir nuestros sueños, tendamos puentes
Nadie cambia el mundo en solitario. A pesar de lo que sale en los medios, no todos los multimillonarios amasaron su fortuna desde la miseria. En la vida real, en el mundo actual, es posible cumplir el sueño de una vida, pero nunca será solo fruto del esfuerzo individual. Y eso está bien.
No olvides que el trabajo individual, el esfuerzo y el sacrificio dan sus frutos. Tampoco quién te tendió la mano en su momento y tiéndesela a los que vengan detrás de ti o a los que tienes a tu lado. Redes vecinales, asociaciones, voluntariado, abrazar a tu hijo cuando se caiga, todo ello cuenta.
Si cuesta tanto cumplir nuestros sueños, es porque muchos soñamos con lo mismo, pero aún nos tenemos que conocer.
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