“Despedida”, un corto sobre el último adiós a nuestras mascotas
Decirle adiós a un compañero de vida es doloroso. La despedida y la pérdida pueden llegar a resultar insoportables pues, cuando esto ocurre, nos invaden sentimientos de desesperanza, de angustia y de tremenda soledad.
Pero ellos, nuestros compañeros no humanos, nos brindan una vida llena de esperanza, de alegrías y de enseñanzas. Por eso se dice que nuestros amigos nunca mueren, ya que sencillamente ellos duermen junto a nuestro corazón.
Además, ellos saben tanto cómo darnos lecciones y como cuáles nos hacen especial falta. Aunque sus huesos duelan, aunque se cansen, aunque se hagan viejos.., nunca renuncian a su alegría, a disfrutar de lo bueno de la vida, a dar paseos, a mostrar su cariño.
Porque nada, ni siquiera su dolor, es tan fuerte como las ganas que tienen de vivir, de ser felices y de caminar a nuestro lado.
El tierno y emotivo corto que refleja la despedida
El creador del corto “Despedida” que os acercamos en este artículo lo sabía bien. Por eso decidió homenajear a su amor no humano, una amistad que duró 21 años y que, sin duda, dejó profundas huellas en su alma.
Porque es inevitable que eso suceda en el corazón de quienes conviven con “sus mascotas”, ya que el amor que ellos brindan se dice que es el más puro y desinteresado que nuestra realidad puede crear. Pero realmente no hay palabras que puedan definir esto, ya que en verdad se trasciende la barrera de lo explicable. Así que, sin más dilación, os acercamos este corto con el que es imposible no emocionarse.
Cristóbal Soto tuvo que despedir a Rayita, su compañera durante 21 años. Él la homenajeó con este corto en el que se ve cómo su amiga, ya en el cielo de los canes, vuelve a la tierra a despedirse con un lindo beso, consolando así a su amigo humano.
Lo que nuestros amigos no humanos nos hacen sentir
Hace unos meses nos encontrábamos con una emotiva reflexión de un usuario de Reddit en la que explicaba a la perfección por qué los perros no mueren. Os dejamos algunos fragmentos de ella para cerrar este homenaje a la maravillosa vida que comparten con nosotros nuestros grandes compañeros:
“Los perros tienen tanto que dar y a la gente le da por hablar y hablar. Cuando piensas que tu perro ha muerto, sólo se ha quedado dormido en tu corazón. Y, por cierto, está moviendo su cola como un loco, ¿ves?, por eso te duele tanto el pecho y lloras todo el tiempo. ¿Quién no lloraría con un perro feliz moviendo la cola en su pecho? ¡Ay! ‘Tac tac tac tac, eso duele. Pero sólo menean su cola cuando están despiertos. Entonces es cuando dicen: “¡Gracias Jefe! Gracias por dejarme un lugar calentito para dormir y además siempre al lado de tu corazón, el mejor sitio”.
La primera vez que se duermen se despiertan todo el tiempo y por eso lloras todo el rato. Tac, tac, tac. Luego empiezan a dormir más tiempo. (Recuerda, el tiempo versión perro no es lo mismo que el tiempo en versión humano).
Cuando sacas a tu can a pasear, es un día entero de aventuras en una sola hora. Volvéis a casa y tienen que esperar una semana, bueno un día para tí pero en realidad una semana, hasta que vuelven a salir a dar un paseo. NORMAL que les encante salir a pasear).
Bueno, como iba diciendo, se duermen en tu corazón y cuando se despiertan mueven el rabillo. Después de unos cuantos años perrunos duermen siestas más largas, igual que harías tú. Ellos han sido PERROS BUENOS toda su vida, y ambos lo sabéis.
Es cansado lo de ser un buen perro todo el rato, sobre todo cuando te haces mayor y te duelen los huesos y te caes y no quieres salir fuera a hacer pis cuando llueve pero sigues saliendo, porque eres un buen perro. Así que entiende que ahora que duermen en tu corazón, dormirán más y más tiempo.
Pero que no te engañen. No están “muertos” Eso no existe. Duermen en tu corazón y se despertarán cuando menos te lo esperes. Así son los perros. Lo siento por los que no tienen perros durmiendo en su corazón. Te has perdido tanto. Disculpa, tengo que irme a llorar”.
