Estrategias para enfrentarse al miedo a morir
Es normal tener un cierto miedo a morir, especialmente si se presenta una situación peligrosa, como un accidente o una enfermedad. Otra cosa bien distinta es la tatanofobia o fobia a la propia muerte.
La tanatofobia es un temor a la muerte persistente, anormal e injustificado, y afecta de manera importante a la vida cotidiana. Las personas tanatofóbicas suelen ser hipocondríacas y pueden sufrir ataques de pánico.
Sin llegar a presentar estos síntomas, en la vida actual es muy habitual que la gente no se enfrente a la realidad de que, en algún momento, la muerte nos llegará a todos. En muchos casos se evitan estos pensamientos.
“La muerte es una vida vivida. La vida es una muerte que viene.”
-Jorge Luis Borges-
Cómo se manifiesta el miedo a morir
Hay muchos expertos que dicen que gran parte de la conducta humana actual está de algún modo influía por los “reality shows”, las novelas, las historias, incluso los videojuegos. De esta manera, se realizan “actividades de desplazamiento”, cuyo objetivo es defenderse de la conciencia evidente de lo que es inevitable.
Sin embargo, todo esto no hace más que exacerbar e incrementar los temores y, cuando estos se manifiestan, pueden provocar situaciones de angustia y ansiedad, especialmente cuando nos enfrentamos a situaciones reales en las que tenemos que enfrentarnos a una enfermedad o situación grave personal o de un ser cercano.
El miedo a morir también puede influir en el desarrollo de nuestra vida diaria, y puede hacer que situaciones tan normales como conducir, viajar o incluso salir de excursión sean una fuente importante de estrés y ansiedad que, además de influir en los demás, conlleve consecuencias personales para la salud y el bienestar físico y emocional.
Estrategias para detener el miedo a morir
Afirmar la vida es la mejor manera de detener el miedo irracional de la muerte. Veamos qué estrategias podemos seguir para ello.
1. La conciencia de muerte debe ayudarte a vivir
A todos nos llegará el día final, inevitablemente. Pero el miedo a ese día hará que todos los días sean un infierno. ¿Qué sentido tiene, entonces, la vida? ¿Esperar la muerte? ¿Burlarla? ¿Por qué no aprovechar lo que tengamos, sea más o menos?
La conciencia de la muerte puede ser utilizada para disfrutar más de la vida, para agradecerla como un regalo que hay que aprovechar y exprimir hasta la última gota.
La muerte en la cultura occidental se ha convertido en algo tabú. Somos una generación tan poderosa que pensamos que podremos incluso vencer la naturaleza para mejorar algo que no debería suceder realmente. Por otra parte, la pereza, el miedo a actuar y la mezquindad que rodea todo consigue contrarrestar la necesidad de reflexionar sobre nuestra propia fugacidad.
La falta de valores que se respira en el ambiente hace que no reflexionemos sobre el sentido de nuestra vida y que lo esencial carezca de sentido.
Es necesario recapacitar sobre nuestra esencia, hay que encontrar aquello que realmente merece la pena para nosotros, esa huella que queremos dejar para que, de algún modo, nuestro paso por este mundo le haya servido a alguien para tener una mejor vida.
2. Busca los desencadenantes de tu miedo
A menudo el miedo a morir tiene su origen en algún hecho traumático. Si encuentras ese origen, la muerte de un familiar querido o de una mascota, o incluso un suceso ajeno a ti pero que te causó gran impacto, será más sencillo racionalizar lo ocurrido.
Si encuentras la causa de tus miedos, los sentimientos traumáticos que genera se desplomarán, por lo que será más fácil superar el miedo a la muerte.
Y si el problema tiene su causa en la no superación de la muerte de alguien es importante buscar ayuda profesional para superar el estrés y el efecto dominó que ejerce en la vida diaria.
3. Relájate mientras piensas en ello
Evitar los pensamientos sobre la muerte no conduce a superar el miedo a la misma. Al contrario, es necesario mantener la calma cuando sobreviene el pensamiento, porque no se trata de lo que pensamos que puede pasar, sino de cómo nos sentimos ante la incertidumbre.
Aprender a relajarse es vital para intentar controlar esos sentimientos y contrarrestar la carga que el miedo ejerce sobre nosotros.
“No le temas tanto a la muerte, sino más bien a la vida inadecuada.”
-Bertol Brecht-
4. Considera la idea de que la naturaleza es sabia
En muchas situaciones en las que la muerte parece inminente, la naturaleza puede ayudar. Eso es lo que se desprende de los testimonios de muchas personas que han estado muy cerca de morir. La falta de dolor o el estado de desapego son algunas consecuencias que hacen que la certidumbre del final se haga más fácil. Durante las emergencias que amenazan la vida, la naturaleza ayuda.
Personas cercanas a la muerte describen cómo se empiezan a sentir preparadas. Las personas muy longevas o que llevan años padeciendo una enfermedad grave sienten la muerte como una parte más del ciclo natural de las cosas. La naturaleza tiene su manera de ayudarnos a manejar las cosas cuando se presentan. ¿Por qué preocuparnos antes de tiempo?