Los maquiavélicos: mentes brillantes y corazones oscuros

Estudios recientes nos demuestran que los psicópatas no disponen precisamente de una mente brillante. Es el perfil maquiavélico el que demuestra una inteligencia más elevada y quien se alza como un gran genio de la manipulación.

Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater.

Última actualización: 01 agosto, 2022

Existe la creencia de que la personalidad psicopática dispone de una superioridad intelectual capaz de poner en jaque a cualquiera. Dicha idea, la de que la genialidad va a menudo de la mano de este tipo de perfil, nos la ha transmitido el mundo del cine. Sin embargo, la realidad es otra, porque de quienes deberíamos tener más cuidado es de los maquiavélicos.

A este hecho lo llaman los expertos «el mito Hannibal Lecter». Se trata de suponer que los psicópatas son tan brillantes, refinados y sofisticados como nos hicieron ver en El silencio de los corderos. Ahora bien, en investigaciones como las realizadas en la Universidad de Cambridge nos demuestran algo muy claro: el psicópata, generalmente, puntúa por debajo de la media en los test de inteligencia.

La maldad, representada a menudo a través de esos villanos que hemos conocido por los libros, la series y el cine casi siempre nos sorprenden con ese aire de ingenio absoluto que tanto parece atraernos. Pero la realidad es otra. Porque el comportamiento agresivo, dañino y manipulador esconde -por término medio- una mente con un cociente intelectual bajo, guiada solo por impulsos.

Sin embargo, en investigaciones recientes hemos encontrado una interesante y curiosa excepción. Se ha podido descubrir que el maquiavelismo, esas personas altamente calculadoras, confabuladoras y cínicas, sí disponen de una inteligencia más elevada que la media.

Sabiendo esto podríamos decir que los genios malvados existen, pero eso sí, no son psicópatas.

Los maquiavélicos, maestros de la manipulación

Las nuevas teorías sobre la relación entre la maldad y la inteligencia nos aportan nuevos e interesantes datos. Así, según los expertos, es momento de diferenciar a los maquiavélicos de los psicópatas. Esto mismo es lo que nos señalan en estudios como los llevados en la Universidad de Western Ontario, de Canadá por parte del doctor Christopher Kowalski. Ahí donde destacan que los psicópatas y los narcisistas son ordinarios, mientras que los maquiavélicos son brillantes.

No debemos dejarnos deslumbrar por este detalle. Definirlos como «brillantes» solo implica que demuestran una alta competencia en tareas como el ingenio, el razonamiento espacial o matemático, la planificación a largo plazo, la resolución de problemas, el autocontrol, etc.

Sin embargo, esa inteligencia lejos de ser útil sigue siendo dañina, por que continúa conteniendo una esencia claramente maligna. Para comprenderlo mejor, veamos cómo definen al maquiavélico en este estudio antes citado y llevado a cabo en el 2018.

La diferencia entre los maquiavélicos y los psicópatas

La principal diferencia entre el maquiavelismo y la psicopatía es la impulsividad. Mientras estos últimos se definen sobre todo por una baja conciencia, falta de planificación e incluso una baja capacidad para aprender de la experiencia, los maquiavélicos son un poco más «sofisticados»:

• Son hábiles a la hora de planificar a largo plazo.
• Pueden retrasar beneficios y gratificaciones para conseguir objetivos más elevados.
• Son oportunistas y calculadores, saben aprovechar muy bien cualquier situación.
• Asimismo, los maquiavélicos son extremedamente hábiles y efectivos en negociaciones y debates.
• Por otro lado, mientras los psicópatas son capaces de arriesgarse para conseguir lo que quieren, los maquiavélicos miden muy bien los riesgos que están dispuestos a asumir.
• Son más prudentes, pero eso sí, compensan ese enfoque más cauteloso pensando en estrategias más sofisticadas (y seguras) para lograr algo.

El maquiavelismo y la inteligencia fluida

Una de las definiciones más destacables sobre la inteligencia nos la ofreció Raymond Cattell (1905 – 1998). En este enfoque, se estableció una interesante distinción: inteligencia fluida e inteligencia cristalizada.

• La primera (fluida) hace referencia a nuestra habilidad para adaptarnos y afrontar situaciones nuevas, sin que nuestros aprendizajes previos nos sirvan de ayuda.
• La segunda (cristalizada) conforma la totalidad de conocimientos, capacidades y estrategias adquiridas a través de nuestra interacción con el medio, como por ejemplo, a través de nuestra educación.

Bien, las investigaciones nos dicen que los maquiavélicos puntúan alto en una de estas dos inteligencias: la fluida (Kowalski et al., 2018). ¿Qué significa esto?

• Implica, que el maquiavelismo demuestra una elevada capacidad para razonar sobre ideas abstractas.
• Tienen un buen razonamiento lógico.
• Demuestran una notable capacidad para establecer relaciones o extraer diferencias.

Los maquiavélicos y el componente emocional

El maquiavelismo, como la psicopatía, presentan un rasgo en común que la mayoría conocemos: el desapego emocional. Sabemos que los psicópatas se distinguen por su falta de conciencia y también, por hacer uso de una empatía instrumental, es decir, conectan con los demás para sondear sus realidades y necesidades internas y poder así controlarlos mejor.

El maquiavélico también presenta este rasgo, con lo cual, estamos ante un tipo de personalidad altamente peligrosa. En ellos confluyen la alta inteligencia (la fluida al menos) y esa frialdad emocional para pasar por encima de los valores éticos o morales en favor de sus intereses.

De ahí que muchos expertos los definan ya como el perfil de mente brillante y oscuro corazón. Para ellos, como bien decía Maquiavelo en El Príncipe, el fin justifica los medios. Sean cuales sean…