Ocho ideas para agilizar tu mente
En primer lugar, los expertos dicen que es preciso mantenerse siempre aprendiendo algo diferente. La buena noticia es que esto es inevitable: cada día llega a nuestra mente mucha información, aunque no nos demos cuenta. Y, como dice la frase “siempre se aprende algo nuevo”. Desde una calle hasta cómo preparar un platillo, pasando por una palabra en otro idioma a una regla de un deporte, todo esto puede ser de gran ayuda para agilizar tu mente.
Si además prestas atención a los siguientes tips y cumples con algunos de ellos, podrás aprender constantemente y también mantener a tu mente en la maravillosa tarea de explorar e incorporar muchas cosas cada jornada.
Agilizar tu mente te permitirá mantener la agudeza mental y salud mental a medida que envejece
1. Usa tu mano “débil”
Si eres diestro, utiliza la zurda y viceversa. Pasa todo un día (o al menos una hora) haciendo cosas con tu mano “no dominante”. Abre la puerta, trata de escribir, usa las llaves, toma una cuchara, todo con tu mano contraria. Será muy divertido y además con esta tarea tan sencilla tu cerebro tendrá que pensar de una manera diferente a la que está acostumbrada, estableciendo a su vez conexiones nuevas.
También tendrá que “repensar” antes de mandar las señales a los miembros superiores o inferiores, algo que no hace a menudo y que permiten ejercitar un sector más olvidado. Ponte el reloj en la otra muñeca para recordar el resto de cambio de manos en tus tareas domésticas.
2. Disfruta de los juegos de mente
Son una excelente manera de hacer que el cerebro se ponga en movimiento. Por ejemplo, los crucigramas, el sudoku, los juegos electrónicos del tipo “brain training”, las preguntas y respuestas, los multiple choice, la sopa de letras, etc.
Todos estos juegos son estupendos para agilizar tu mente, que esta aumente y a la vez tengas la capacidad de memorizar más información. Es que están basados en la lógica y las capacidades (como ser matemáticas o verbales). Y no hay dudas de que son más que divertidos.
Deja un poco de lado la televisión y consigue una revista de juegos de ingenio, será un bien para ti y otro para tu cerebro. Se obtiene mucho beneficio por tan sólo 15 minutos al día.
3. Alimenta tu cerebro correctamente
Al igual que ocurre con tu cuerpo, tu mente también necesita estar bien alimentado. Ingiere grasas, pero de las saludables. Es decir, aquellas que contiene el pescado (salmón principalmente), los frutos secos (las nueces sobre todo) y los aceites vírgenes (como el de oliva o el de linaza).
No dejes de consumirlos en tu dieta diaria y reduce las grasas malas, o sea, las saturadas. Elimina todos los ácidos transgrasos de tu plan alimentario porque no son buenos ni para el cuerpo ni para el cerebro.
4. Recorre sitios diferentes
No vayas siempre por el mismo camino, sea a pie, en coche o en autobús. De lo posible trata de cruzar por otras esquinas, cambiar la línea de transporte público, bajar antes o elegir las calles laterales en lugar de las Avenidas. Es un pequeño cambio a la rutina que te servirá para muchas cosas, desde no aburrirte hacia o desde el trabajo hasta ayudar al cerebro a practicar lo que se denomina la “memoria espacial”.
Además aprenderás nuevas direcciones y conocerás sitios que de otra manera no. Intenta aunque sea cambiar de acera y modifica el orden en el que vas a una tienda. En vez de pasar siempre por una calle con edificios, busca una que tenga parques o casas bajas.
5. Adquiere una habilidad nueva
Esto hará que tus múltiples áreas del cerebro se pongan en acción. La memoria es la que entrará en juego, además de otros beneficios. Aprenderás a su vez nuevos movimientos, asociarás datos e información de varias cosas de una forma diferente. Aprende a cocinar, haz un curso de idiomas, ve a una clase de baile, de cerámica, de literatura. Si te gusta leer novelas, elige ensayos o viceversa.
Todo sirve para “retar” a tu cerebro y ofrecerle nuevas cosas para pensar
Como destaca el equipo de investigación de Marlén Velásquez (2009) : “el aprendizaje se considera como un aspecto de la plasticidad neuronal, puesto que es la modificación de la conducta de la persona, a partir de experiencias previas; ello indica que el cerebro aprende y debido a su plasticidad se modifica produciéndose cambios sinápticos de orden anatómico y funcional”.
De esta forma, se demuestra que a través del aprendizaje de nuevas habilidades la plasticidad neuronal permite cambios a nivel cerebral. Tanto los cambios como la plasticidad cerebral, ayudarán a mantener una mente ágil. Cabe recordar que el cerebro es un músculo, por lo tanto, cuanto más lo entrenemos más en forma y más ágil estará.
6. Rompe con la rutina
Como se decía anteriormente, es bueno de vez en cuando cambiar lo que se hace “por costumbre”. Cuánto más nos habituamos a una tarea más se convierte en algo arraigada y el cerebro no tiene que hacer demasiado para terminarla o llevarla a cabo.
Si realmente quieres ayudar a tu mente y que siempre esté joven, es preciso que la rete a nuevos desafíos. Todo aquello que esfuerce a tu cerebro a despertarse y dejar de lado los hábitos es bienvenido. No tendrá otra opción que prestar más atención.
7. Aprende números de teléfono útiles
Por causa de los smartphones, la gente ya no se acuerda de memoria el número de teléfono de sus padres, de su pareja, de su mejor amigo. Todo está en ese aparato. Esta es una maravillosa actividad para ejercitar la mente. Puedes agilizar tu mente aprendiendo un número nuevo cada día, pero teniendo cuidado de no olvidarte el anterior.
8. Haz listas
Agilizar tu mente nunca ha sido tan fácil como con las listas, realmente maravillosas porque ayudan a relacionar un dato con otro. Por ejemplo, crea un listado con los sitios a donde has viajado, las comidas más deliciosas que has probado, los mejores regalos que has recibido, los nombres para tus futuros hijos, etc. No hace falta que lo escribas en un papel, mejor que queden “guardados” en tu memoria, el mejor lugar que existe.
“La mente que se abre a una nueva idea, jamás volverá a su tamaño original”
-Albert Einstein-