5 preguntas que deberías hacerte sobre tu relación de pareja
El vínculo de pareja es uno de los más importantes que establecemos durante la vida adulta. El compañero sentimental se convierte en nuestro principal proveedor de afecto, apoyo, validación y compañía. Nos acostumbramos tanto a su presencia y a las ventajas de su compañía que a veces pasamos por alto señales de alarma. Por esto, queremos hacerte algunas preguntas sobre tu relación de pareja que deberías hacerte periódicamente.
Compartir la vida con otra persona no es una decisión que se tome una vez y de la que podamos olvidarnos. Las relaciones cambian y evolucionan, y es tarea nuestra analizar si siguen siendo beneficiosas para nosotros con el paso del tiempo o si, por el contrario, han comenzado a dañarnos. Así, para evaluar el estado actual de tu vínculo, puedes hacerte las siguientes preguntas.
1. ¿Es una relación equilibrada?
Todos tenemos presente que cualquier relación debe ser equilibrada y recíproca; un espacio en el que podamos dar y recibir, en el que se nos tenga en cuenta tanto como nosotros consideramos al otro. Desafortunadamente, esta cuestión tan básica está ausente en muchos casos.
Para darte cuenta de que esto está sucediendo, piensa si la relación seguiría funcionando en caso de que dejaras de esforzarte. ¿Tu pareja propone planes y actividades? ¿Se preocupa de que disfrutéis de tiempo compartido y de calidad? ¿Presta atención a tus necesidades y sentimientos o únicamente espera que tú cumplas con lo que ella quiere?
Si sientes que tú inviertes mucho más tiempo, energía y dedicación, si piensas que tu pareja comete transgresiones que para ti están prohibidas o si, de algún modo, crees que obtienes menos respeto, amor y apoyo del que ofreces, estás en una relación desequilibrada (por supuesto, lo mismo sucede si los roles son a la inversa).
2. ¿Te aporta estabilidad?
Uno de los mayores beneficios de estar en una relación de pareja es gozar de la tranquilidad de saber que contamos con otra persona, que somos amados sin condiciones y que podemos confiar en el otro. No obstante, para muchas personas su relación supone más una fuente de estrés, angustia e incertidumbre que un refugio seguro.
En ocasiones, la falta de estabilidad es completamente visible: cuando las rupturas y reconciliaciones se suceden, podemos sufrir enormes daños emocionales. Pero, incluso, si nunca has terminado con tu pareja, los conflictos frecuentes, los reproches o las amenazas hacen que vivas en una inestabilidad emocional realmente perjudicial. Finalmente, no puedes estar seguro de que el otro es tu aliado en cualquier circunstancia, pues fácilmente puede colocarse en el bando contrario.
3. ¿Volverías a escogerla?
Esta es una de las principales preguntas sobre tu relación de pareja que debes hacerte. Imagina que hoy conoces a tu pareja por primera vez, que es el primer día que pasáis juntos. En función de su actitud, de su comportamiento, de su forma de tratarte, ¿escogerías comenzar a salir con ella?
Con demasiada frecuencia, nos quedamos anclados en un inicio de relación que fue idílico, pero del que ya no queda ni rastro. Seguimos conviviendo con una persona grosera o indiferente, con la que ya no tenemos nada en común o que no nos despierta ningún sentimiento solo por la inercia de lo que fue en el pasado.
Darse cuenta de eso es realmente complicado y doloroso, pero es una realidad a la que tenemos que enfrentarnos.
4. Si te aseguran que en 10 años tu pareja será exactamente igual, ¿seguirías con ella?
Es evidente que, en el mejor de los casos, ninguno de nosotros seremos en 10 años la misma persona que somos ahora; todos evolucionamos, aprendemos con las experiencias y pulimos nuestro carácter. Sin embargo, no nos referimos a esto, sino al hecho de que, pasado ese tiempo los valores, la personalidad y las prioridades sigan siendo similares a los de ahora. En este caso, ¿seguirías con tu pareja?
Para muchas personas, solo imaginarlo resulta aterrador; y es que en realidad viven con la esperanza de que esa persona con la que comparten su vida cambie. Quizá esperan que desee en el futuro casarse y tener hijos cuando ha dejado claro que no es lo que quiere; tal vez anhelan que con el tiempo se vuelva más comprensiva y amorosa, o que comience a dedicarles el tiempo que hoy no les dedica.
Esta actitud es sumamente dañina y solo contribuye a alargar el sufrimiento a largo plazo. Procura mirar a tu pareja por lo que es actualmente y decide, en función de lo que ves, si es lo que deseas para tu vida. Lo que hay es lo único que tienes seguro.
5. ¿Te ayuda a crecer personalmente?
Dentro de las preguntas sobre tu relación de pareja que puedes hacerte, has de incluir aquellas que hablen directamente de ti. ¿De qué forma te influye, a nivel personal, formar parte de este vínculo? ¿Te ayuda a confiar en ti y a desarrollar tu potencial?, ¿contribuye a tu crecimiento y te impulsa a alcanzar tus metas? Si es así, ¡enhorabuena!, eres afortunado por tener un compañero que te acepta y te admira y una relación que te hace brillar.
Sin embargo, son muchas personas las que no se encuentran en esta situación. Con frecuencia las personas se ven anuladas en sus relaciones, se ven obligadas a renunciar a sus intereses, amistades o hobbies, a posponer sus propios proyectos y a dedicar todo su tiempo (incluso el que deberían darse a sí mismas) al vínculo. Recuerda que estar en pareja debe sumar a tu vida; si esto no está sucediendo, algo anda mal.
Responde a estas preguntas sobre tu relación de pareja y toma acción
¿Las preguntas anteriores te han hecho reflexionar? Que tu relación no esté cumpliendo tus expectativas, no significa que tengas que romperla. Analizar el estado del vínculo y descubrir en qué estamos fallando o dónde detectamos ciertas carencias es un excelente punto de partida para comenzar a trabajar.
Es natural que el paso del tiempo y la rutina generen cierto deterioro en la relación, pero es importante no mirar hacia otro lado y hacer equipo para encontrar soluciones. En estos momentos, la terapia de pareja es una magnífica alternativa, pues no solo ayuda a superar las dificultades que se han detectado; también permite obtener recursos para, en futuro, saber hacer frente a nuevas situaciones.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Camino, JL & Coca, A. (2009) Juegos, guión y pareja. Revista de Análisis Transaccional y Psicología Humanista, 60, 47-54.
- Vennum, A., & Johnson, M. D. (2014). The impact of premarital cycling on early marriage. Family Relations, 63(4), 439-452.