¿Qué es la brecha digital?
Desde finales del siglo XX hasta principios del siglo XXI hemos presenciado un avance tecnológico sin igual. Sin embargo, ¿hemos llegado todos a ello? Respondiendo a esta pregunta llegamos al concepto de “brecha digital”.
Kofi Annan, antiguo Secretario General de la ONU decía: “Las tecnologías de la información y la comunicación no son una fórmula mágica, pero pueden mejorar la vida de todos los habitantes del planeta”.
Esta brecha se refiere a la separación que existe entre las personas que usan las Tecnologías de información y comunicación (TIC) y las que no lo hacen. Bien porque no pueden, bien porque no saben. En el siguiente artículo analizaremos más en profundidad este concepto, así como los problemas que este conlleva y las posibles formas de solucionarlo.
¿Qué es la brecha digital?
Las innovaciones tecnológicas no se difunden de forma regular por el sistema. Es decir, no todas las empresas o individuos se convierten en usuarios y, menos, en usuarios avanzados. Así, las diferencias culturales y económicas en los países subdesarrollados hacen que solo un 10 % de la población tenga acceso a Internet, mientras que en los países industrializados la cifra es de un 58 %.
De este modo, nos damos cuenta de que la mayoría de la población tiene un desierto de conocimiento en este proceso que abre puertas a un mayor desarrollo y comodidad en todos nuestros aspectos de la vida cotidiana. Ya que, hoy en día, la tecnología se puede considerar como una herramienta clave para el desarrollo y el avance de nuestras vidas.
Las desigualdades se producen especialmente en:
- El acceso a equipamientos. Esto es lo que se denomina como la primera brecha digital.
- El desconocimiento de las que se encuentran a nuestro alcance. Lo que sería la segunda brecha digital.
La primera y la segunda brecha digital
La clave es comprender que la barrera más difícil no es la del acceso, sino la del uso. Esto se debe a que las innovaciones tecnológicas dependen del uso que se haga de ellas y de la forma en la que afecten a la vida de las personas. Por lo tanto, es crucial que cada individuo pueda utilizar las innovaciones en función de sus necesidades e intereses.
El acceso a Internet no es suficiente. Así, es la brecha del conocimiento de las “habilidades digitales” la que es necesaria para vivir y trabajar. Sobre todo, en sociedades caracterizadas por la creciente importancia de la información y el conocimiento.
Aquí, un punto que hemos de destacar son las diferencias de género en relación con las habilidades digitales. Mientras que la primera brecha digital tiene un claro componente generacional y educativo, la segunda brecha digital afecta mucho más a las mujeres que a los hombres. Por lo tanto, la preocupación por las diferencias de género en el uso de ordenadores e Internet es creciente, además de ser un asunto difícil de resolver.
Problemas de la brecha digital
Desde la perspectiva social, si parte importante de la población no tiene acceso a partes de la tecnología consideradas cruciales, se pueden generar desigualdades económicas y sociales y reforzar otras previamente existentes.
Por otro lado, vemos que las nuevas tecnologías han creado dos polos con una clara incidencia en el mercado laboral: personas con fácil acceso a las tecnologías y los que tienen un acceso difícil, costoso o imposible. Esta fractura se puede dar entre países, pero también entre personas de un mismo país o ciudad.
De este modo, los países que no pueden aprovechar las ventas de las TIC pierden competitividad. Además, dentro de cada país, la diferencia entre quienes tiene acceso y los que no genera una nueva segmentación en el mercado laboral en el que los primeros tienen privilegios de entrada y elección del lugar de trabajo.
¿Existe una solución?
Verdaderamente, el avance cada vez mayor de la tecnología ha traído consigo numerosas ventajas. Entre ellas, es posible destacar las siguientes:
- Dan la posibilidad de comunicarse con cualquier rincón del mundo de manera rápida y sencilla.
- Son una herramienta idónea para poder formarse.
- Son una fuente inagotable de entretenimiento.
Por ello, el Estado, a través de políticas públicas ha de trabajar para eliminar la brecha digital y democratizar el acceso y el uso de las TIC.
Una reducción de la brecha digital implica una reducción en las desigualdades en general, lo que permite que más gente tenga la posibilidad de aprender y de encontrar mejores empleos.
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- Mujeresenred, http://www.mujeresenred.net/spip.php?article1567
- BBVA Openmind, https://www.bbvaopenmind.com/humanidades/sociologia/la-brecha-digital/
- Definición.de, https://definicion.de/brecha-digital/