Reconócelo, eres una persona bella
Puedes encontrar una persona bella en todas partes porque cada uno de nosotros emanamos belleza. Lo hacemos con nuestra sensibilidad, con la expresión de nuestras emociones, con el amor que compartimos y con cada uno de los actos que nacen de nuestra bondad sin límites.
La propia naturaleza nos ha aportado el don de la belleza, siendo algo intrínseco al ser humano. Un aspecto básico que todas las personas poseemos. La belleza no es de unos pocos, ni está reservada a los seres más privilegiados. Se encuentra en cada uno de nosotros y tenemos capacidad para poder explorarla e ir descubriéndola.
“La belleza es la apreciación, la sensibilidad a las cosas que a uno lo rodean: la naturaleza, la gente, las ideas.”
-Jiddu Krishnamurti-
No existen personas más o menos bellas, simplemente hay quienes indagan más en su propia naturaleza y son capaces de observar y manifestar toda la belleza que se encuentra en su interior. Haciendo de sus vidas una experiencia digna de admiración, por la bondad y el amor que son capaces de albergar y transmitir.
Tú eres una persona bella, obsérvate
Obsérvate, verás en ti a una persona bella que ha tenido que pasar por muchos senderos diferentes en su vida. Has hecho un recorrido lleno de dificultades desde tu nacimiento. Te has enfrentado al dolor, al sufrimiento, a la amargura, a la soledad. También a multitud de decisiones difíciles de afrontar, haciéndolo lo mejor que has podido a cada momento.Te has tenido que enfrentarte a ti, a tus indecisiones, a tus emociones, a tus sentimientos; a todo lo que has vivido y experimentado para ser hoy quien eres, con algo más de conocimiento hacia ti y del mundo en el que vives. Te has ganado a pulso la sensibilidad para apreciar toda la belleza que te rodea.
“Las personas más bellas con las que me he encontrado son aquellas que han conocido la derrota, conocido el sufrimiento, conocido la lucha, conocido la pérdida y han encontrado su forma de salir de las profundidades. Estas personas tienen una apreciación, una sensibilidad y una comprensión de la vida que los llena de compasión, humildad y una profunda inquietud amorosa. La gente bella no surge de la nada.”
-Elisabeth Kubler-Ross-
Escúchate y te sorprenderás
Escúchate, has adquirido una sensibilidad especial para poder dar valor y sentido a todo lo que vives, para apreciar cada momento atesorándolo como único. Solo tienes que escucharte, atenderte y confiar en lo que sientes. Toda la belleza que eres capaz de percibir fuera es gracias a tu estado interno.
“Todas las personas quieren ser bellas, pero como no saben cómo serlo, se siguen maquillando la cara, cortando el pelo, probándose este vestido o el otro, haciendo dieta o todo tipo de cosas, sólo para ser bellas. Pero no saben que eso no les servirá de mucho. La belleza es algo interior. Una vez que está ahí, descubierta, comienza a irradiar de tu cuerpo, de tu mente, de todo aquello de lo que tú estás compuesto. Una vez que tu belleza interior está ahí todo se embellece”.
-Osho-
Reconocerás y percibirás mejor tu belleza cuando te escuches, cuando te tengas en cuenta y prestes atención a tus necesidades. Ser una persona bella no depende de nada ni de nadie, salvo de ti. Es tu responsabilidad…
Agradezcamos nuestra belleza
El agradecimiento por lo que somos y lo que tenemos es una muestra de humildad y compasión, para llegar a aceptarnos tal y como somos; de tal manera que nos perdonemos y reconciliamos con todo aquello que nos disgusta y rechazamos de nosotros mismos.
En tu actitud se encuentra la belleza. En tus pensamientos, tus ideas y tus creencias. También en lo que compartes con los demás; en tu fuerza de superación y tus ganas por vivir. La belleza está en todas las emociones y sentimientos que experimentas, en todo lo que haces de corazón. Todo en ti es belleza.
Obsérvate, escúchate y reconócelo, tú eres una persona bella, digna de amor y cariño. Mereces tu respeto, tu admiración y toda tu comprensión. No te castigues, ni te maltrates, ni te exijas más de lo necesario. Tu valor como persona está por encima de toda condición. Tú eres la vida misma y en tus manos está cuidarla.
Imagen cortesía de Christian Schloe