Superar la depresión es posible si cambiamos determinados hábitos

Superar la depresión es posible si cambiamos determinados hábitos
Gema Sánchez Cuevas

Revisado y aprobado por la psicóloga Gema Sánchez Cuevas.

Última actualización: 22 junio, 2020

Cuando nos encontramos ante un problema cada vez más frecuente, como es la depresión, es importante acudir a un psicólogo que nos ayude a salir del pozo en el que nos encontramos. ¿Por qué? Porque al contrario de lo que se podría pensar desde fuera, superar la depresión requiere de algo más que de voluntad y de apretar los dientes: requiere de la utilización de diferentes herramientas que nos ayuden en este proceso.

Las funciones de un psicólogo ante este cuadro son varias. En primer lugar, se encargará de confirmar que exista la depresión de la que sospechamos; en segundo lugar, aunque no pueda recetar, sí puede derivar al paciente a alguien que puede pautar un tratamiento farmacológico, muy positivo especialmente en las primeras fases de la terapia; en tercer lugar, establecerá un plan de acción o tratamiento adecuado al paciente y lo acompañará en su aplicación, pudiendo realizar ajustes y un seguimiento cuando la depresión haya desaparecido.

Sin embargo, todos sabemos que la depresión no es precisamente un estado en el que somos especialmente  pro-activos para cambiar o adquirir determinados  hábitos, mantenerlos en el tiempo y que ellos hagan su efecto. De ahí que la voluntad sea importante, pero también la inteligencia, el plan de acción establecido por el especialista o el tratamiento farmacológico.

La depresión se marcha cuando sacamos fuerzas de donde no las tenemos para dar pequeños pasos hacia esa dirección que es la correcta, pero que se nos resiste tanto.

Aislarse puede ser necesario, pero no nos conducirá a la solución

Las personas con depresión suele sentirse especialmente tentadas a adquirir nuevas costumbres que alimenten a la propia depresión: una de ellas es la de aislarnos de los demás. No queremos ver a nadie, estamos tristes todo el tiempo y el gimnasio, las clases de pintura, la música… todo lo que antes nos gustaba, nos motivaba, nos hacía sentirnos llenos ahora nos causa una gran indiferencia.

Quizás ese tiempo de pausa y distanciamiento sea bueno en algunos casos y por un corto espacio de tiempo. Especialmente cuando la depresión ha aparecido como consecuencia de un periodo prolongado de estrés. Sin embargo, a largo plazo, cortar este tipo de hábitos “melancólicos” es fundamental para dejar atrás la depresión.

Superar la depresión es posible cuando empezamos a hacer lo contrario a lo que ella nos insta. ¿No queremos salir? Salgamos con nuestros amigos. ¿No nos apetece hacer deporte? Levantémonos bien temprano y sin pensarlo tomemos nuestra mochila para irnos al gimnasio o vayámonos a correr por la naturaleza. Dado el primer paso, veremos que después no cuesta tanto e incluso se convierte en una actividad placentera. Quizás no a los niveles de antes, de acuerdo, pero esto todavía la hace más valiosa.

Lo importante es salir de ese ciclo al que la inercia nos conduce o en el que ya hemos caído. Ya hemos comprobado que no tiene sentido seguir así, que nada cambia, que todo sigue igual si seguimos en la misma dirección.

Aprender a meditar, relativizar los problemas, gestionar las emociones buscar fuentes de refuerzo son herramientas que un psicólogo nos puede facilitar si queremos salir de la depresión.

Así, una de las claves para superar la depresión es empezar a introducir hábitos diferentes o recuperar aquellos de los que disfrutábamos y hemos abandonado. Hay algunos, por ejemplo, como tocar música que quizás nos ha dejado de gustar, que puede ser recomendable no recuperar. Sin embargo, seguro que hay muchos otros por los que seguimos conservando cierto gusto y que no hacemos por el esfuerzo inicial que nos demandan; un esfuerzo que parece una montaña frente a las escasas fuerzas que sentimos tener.

Ir al gimnasio y hablar con desconocidos o conocidos, salir con esos amigos para los que siempre teníamos alguna excusa, empezar a comer más saludable (practicar lo que se conoce como mindful eating) y hacer algo de ejercicio moderado serán pasos importantes con los que les iremos diciendo “adiós” a la depresión. ¿Por qué? Simplemente porque propiciarán momentos momentos en los que nos sintamos mejor.

mujer pintando demostrando cómo la depresión se marcha

Escribir un diario emocional para superar la depresión

Muy bien. Ya sabemos que la depresión va a tender a marcharse cuando recuperamos o buscamos actividades que nos hagan sentir bien, enfrentándonos y haciendo un ejercicio de voluntad para recuperar actividades que nos gustaban o para incorporar algunas nuevas que nos puedan gustar. Pero…., ¿y qué más?

Antes hemos dicho que una de las características de la depresión es que suele propiciar la introspección. Nos dice, “¡eh, estás en una crisis!” y nos sitúa en un estado en el que parece que es más fácil pensar. Bien, pues podemos aprovecharlo para intentar conocernos mejor y poner en orden nuestras emociones. Sí, nuestro orden interno no funciona, pues analicemos cómo es y busquemos uno nuevo.

En este sentido, escribir puede ser muy positivo para desahogarnos emocionalmente y, también, para llevar un seguimiento de nuestros vaivenes emocionales. Asimismo, también nos permite volver sobre nuestras palabras para descubrir en qué continuamos fallando y ser más conscientes de la situación en la que nos encontramos.

Muchos profesionales consideran la escritura como terapéutica y no les falta razón. En ocasiones no podemos o no queremos decirle a nadie lo que nos pasa, pero aún así tenemos una necesidad por comunicarlo de alguna manera. Llevar un diario emocional es muy importante y no tan solo cuando suframos depresión o algún problema. Tomarlo como un hábito será muy sanador.

Hombre empezando a escribir para superar la depresión

Lo natural es que al principio nos cueste hojear las páginas donde hemos plasmado todo nuestro dolor. Sin embargo, con el tiempo, esto se convertirá en una necesidad para sentir, revivir y sanar. Hasta que llegue el momento en el que podamos hojear las páginas como quien lee un libro, rescatando recuerdos de una situación experimentada que ya reside en el pasado.

“La victoria siempre es posible para la persona que se niega a dejar de luchar”

-Napoleon Hill-

Llegados a este punto ya sabemos que superar la depresión es posible cuando cambiamos determinados hábitos, sin embargo, el camino será duro, largo y en el que muchas veces dejaremos de avanzar para dar pasos hacia atrás. Sin embargo, intentándolo una y otra vez, nadando contracorriente, siguiendo la ayuda de un psicólogo, al final la depresión llegará a su fin. Porque sí. La depresión también muere cuando cortamos todas las fuentes que la abastecen.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.