3 beneficios de la dieta mediterránea
La dieta mediterránea es una de las más apoyadas por los expertos en nutrición. Se caracteriza por la inclusión de alimentos frescos, priorizando los de origen vegetal. Además, este tipo de dieta apuesta por la ingesta de grasas de calidad y por la presencia regular de cereales y alimentos con carbohidratos en la pauta.
Aunque existen algunos puntos de la misma que han sido muy controvertidos, como el consumo de harinas y panes o de alcohol, en líneas generales se considera un tipo de alimentación positivo para el organismo. Aporta nutrientes esenciales en grandes cantidades, así como alimentos de calidad.
Beneficios de la dieta mediterránea
Vamos a explicarte a continuación cuáles son los principales beneficios para la salud de la dieta mediterránea. Eso sí, es importante asegurarse de que esta sea equilibrada desde el punto de vista energético. De lo contrario, puede experimentarse una ganancia de peso nada recomendable.
Mejora la salud cardiovascular
De acuerdo con un estudio publicado en la revista Circulation Research, el planteamiento de una dieta mediterránea consigue mejorar el perfil lipídico y reducir el riesgo cardiovascular. Esto se debe a la presencia de ácidos grasos de alta calidad y de antioxidantes en la pauta diaria. Dichos elementos modulan los procesos inflamatorios, evitando que se promocionen en exceso.
Además, es beneficioso acompañar la pauta dietética con la práctica de ejercicio físico de forma regular. También se recomienda dormir al menos 7 u 8 horas de forma diaria, para asegurar la recuperación y disminuir los niveles de estrés. Así se consigue reducir la hipertensión, un factor de riesgo para los accidentes relacionados con el corazón.
Favorece la disminución de la incidencia del cáncer
La presencia de vegetales en grandes cantidades en la dieta mediterránea es clave para prevenir el desarrollo del cáncer. Esta patología se inicia a partir de un desequilibrio inflamatorio y oxidativo que repercute sobre la salud de las mitocondrias. En este punto se experimentan ineficiencias en la replicación celular que dan lugar a las células tumores.
Según una investigación publicada en la revista Nutrients, la aplicación de una dieta mediterránea puede ayudar a reducir el riesgo de tener un cáncer a lo largo de la vida. Si bien la relación entre esta pauta dietética y la incidencia de los tumores no es similar en todos los casos, es realmente significativa en el contexto de aquellos que atacan al sistema digestivo.
En este sentido, el aporte de fibra generado por la dieta mediterránea es otro punto muy a favor. Al aumentar el volumen del bolo fecal se limpian los posibles restos y sustancias tóxicas que quedan en el tubo digestivo, limitándose el riesgo.
Mejora el estado de composición corporal
Para conseguir este beneficio es importante que la dieta mediterránea sea equilibrada desde el punto de vista energético. No obstante, si se cumple dicha premisa este tipo de alimentación ha demostrado contribuir a alcanzar un buen estado de composición corporal. Esto se debe a que prioriza el consumo de alimentos frescos frente al de ultraprocesados industriales.
Así se mantiene baja la ingesta de azúcares simples, de grasas trans y de aditivos que pueden impactar negativamente sobre el metabolismo. Si se acompaña con una pauta de ejercicio regular el éxito está casi garantizado.
El consumo de alcohol en la dieta mediterránea
Uno de los puntos más criticados de la dieta mediterránea es que permite el consumo regular de cantidades moderadas de alcohol. En la actualidad se sabe que dicha sustancia resulta tóxica independientemente de la dosis consumida, por lo que lo más recomendable es restringir su presencia en la pauta.
De este modo se mejora el estado de salud y se previenen muchas patologías crónicas y complejas a medio plazo. El agua mineral ha de ser el elemento preferido a la hora de asegurar un buen estado de hidratación.
La dieta mediterránea, una alimentación saludable
Como has podido comprobar, la dieta mediterránea se puede considerar como saludable por su variedad de alimentos y presencia de vegetales. Este planteamiento dietético consigue asegurar el buen funcionamiento del organismo a medio plazo, sobre todo si se combina con otros hábitos adecuados.
Ten en cuenta que dentro del contexto de la dieta mediterránea resulta clave adecuar la ingesta de nutrientes a los requerimientos individuales. Es posible adaptar la pauta a diferentes situaciones, como es el caso de las personas que practican mucho deporte.
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