Claves para convertirnos en una persona miserable
Todos conocemos a alguna persona miserable, puede que incluso varias. El número de personas miserables crece día a día, a medida que se van viendo ciertas actitudes como algo normal. Aún así, todavía hay personas que aún no han sido víctimas de esta epidemia moderna y están viviendo con alegría y en paz, irradiando amor y felicidad.
Pero esto no parece estar de moda. Si eres de esos a los que la miserabilidad no le ha invadido, las siguientes claves te ayudarán a convertirte en la persona miserable por excelencia. Si, por el contrario, prefieres seguir como estás, considera que lo siguiente es precisamente lo que tienes que evitar.
“La naturaleza ha hecho al hombre feliz y bueno, pero la sociedad lo deprava y lo hace miserable”
-Jean-Jacques Rousseau-
Vive según las expectativas de otros
La sociedad en general y tu familia en particular tiene muchas expectativas para ti. Si no cumples con esas expectativas estarás abandonando a los que te rodean y haciéndoles sufrir, especialmente si tú no consigues lo que no consiguieron ellos o no sigues con la tradición familiar.
Para ser uno más y hacer lo que se espera que hagas debes asegurarte de que encajas bien en el molde, que eres como tienes que ser, vistes de la manera indicada, sigues todas las reglas -aunque no tengas muy claro por qué tienes que hacer las cosas así- y haz lo que te digan que tienes que hacer.
Deja que otros piensen por ti
Si otros pueden pensar por ti, no pierdas el tiempo pensando por ti mismo. Pensar es agotador y es un riesgo. No pierdas el tiempo contemplando alternativas para ser más libre, más feliz y estar más a gusto contigo mismo. Con eso solo te arriesgas a estropear tu miseria.
A tu alrededor hay un increíble batallón de personas dispuestas a decirte lo que tienes que hacer e incluso lo que tienes que pensar. No te desgastes en preguntar los porqués de las cosas y haz lo que te digan. Ya verás lo miserable que serás evitando cualquier tipo de reflexión y decisión.
Oculta tu verdadero yo en tus relaciones con los demás
Vivir el amor y la alegría supone tener relaciones íntimas con otras personas. Pero ser tú mismo puede hacer que sea difícil relacionarte con personas que encajen en el molde y cumplan con las expectativas que los demás tienen para ti.
Si realmente quieres ser una persona miserable ponte la máscara en todo momento, oculta todo lo que se salga de lo que debe ser y actúa de forma políticamente correcta siempre. Si muestras tu verdadero ser, corres el riesgo de ser descubierto y de que las personas que te conozcan te empujen a salirte de lo que se espera de ti. Si quieres ser realmente miserable, ser un hipócrita deshonesto te ayudará a mantener tu status mucho más tiempo.
Haz que el dinero sea tu principal objetivo en la vida
La mejor manera de tener una vida miserable es hacer todo lo posible para amasar una gran cantidad de dinero y que esta sea la única meta en tu vida. En lugar de emplear tu tiempo en construir una vida saludable, alimentar relaciones con las personas que te importan y a las que les importas, haciendo lo que realmente te guste hacer, debes estar trabajando todo lo que puedas, planificar tu día a día solo en función de tu trabajo y no gastar nada más que lo imprescindible para satisfacer tus propias necesidades.
No gastes en más caprichos que los tuyos, aunque no tengas a penas tiempo para disfrutarlos porque tienes mucho trabajo. Y no olvides enseñar a tus hijos que el que quiere algo tiene que ganárselo con el sudor de su frente. Si es necesario, sé tú el primero en explotarlos para que aprendan lo dura que es la vida y lo mucho que cuesta ganar el dinero.
Culpa a los demás de tus problemas
Las personas miserables jamás se hacen responsables de sus acciones y nunca reconocer su responsabilidad ante los problemas y las dificultades. En cambio, critican a los demás y los culpan de sus problemas e incluso de sus actos.
Aprender de sus errores no es algo que acompañe a las personas miserables, así jamás pienses que puedes hacer algo para cambiar las cosas, porque nunca será culpa tuya. Así conseguirás una vida de miseria cada vez mayor.
Compárate con el resto
Todas las personas más miserables piensan que no son lo suficientemente buenas como son y están comparándose con los que les rodean constantemente, sintiéndose inferiores a ellas y tratando por todos los medios de llegar a ser como ellos. Solo así consiguen sentirse mejor consigo mismos.
Para alcanzar esa meta de absoluta miseria debes convertirte en una persona insatisfecha de ti misma. Asegúrate de centrar toda tu atención en lo buenos que son los demás y la mierda que eres tú comparado con ellos. No cometas el error de perdonarte por tus defectos ni mucho menos de amarte por lo que eres.