8 claves para desarrollar una mentalidad de crecimiento

Un enfoque mental orientado al crecimiento te permite afrontar desafíos para tener una vida más plena. En el siguiente artículo te damos todas las claves para desarrollar esta competencia y ser más feliz.
8 claves para desarrollar una mentalidad de crecimiento
Valeria Sabater

Escrito y verificado por la psicóloga Valeria Sabater.

Última actualización: 30 julio, 2023

¿Cómo sueles actuar ante las dificultades? ¿Te estancas y frustras con frecuencia? ¿O ves estas situaciones como oportunidades de aprendizaje? Aplicar en tu día a día una serie de claves para desarrollar una mentalidad de crecimiento puede dar un giro a tu vida. Descubrirás nuevas herramientas para resolver mejor los problemas y sentirte más competente.

Es más, algo como dejar de buscar la aprobación ajena o regular tu miedo al fracaso te aportará también un gran bienestar mental. Podrás percibirte como alguien capaz de cualquier cosa.

Entrenar una perspectiva más motivadora y desafiante requiere de una serie de pasos que te describimos a continuación. Siempre es buen momento para iniciar el cambio que necesitas.

Intentas algo, no funciona, y tal vez la gente incluso te critique. En una mentalidad fija, dices: ya no vuelvo a intentarlo. En una mentalidad de crecimiento, aprendes del error para intentarlo de nuevo.

~ Carol S. Dweck (Mindset: la actitud del éxito 2006) ~

¿Por qué es importante desarrollar una mentalidad de crecimiento?

La forma en que piensas no solo te permite dar sentido al mundo. Además, conforma la manera en que te ves a ti mismo y la percepción que tienes sobre lo que puedes lograr y lo que no. Cultivar una mentalidad de crecimiento te permite entender que la inteligencia es maleable y que, con esfuerzo, puedes aprender nuevas competencias para enfrentar desafíos.

Siempre es posible asentar nuevos talentos y estrategias si te comprometes con el aprendizaje y la superación de las dificultades. Esto nos lo enseñó Carol S. Dweck, en su célebre libro Mindset: la actitud del éxito, publicado por primera vez en el 2006. Esta destacada psicóloga e investigadora introdujo un nuevo concepto de gran trascendencia que vale la pena desarrollar.

A continuación, te describimos las claves para poder habilitarte en esta competencia.



1. Entiende que el cambio es posible

Un aspecto que aprendes cuando profundizas en los trabajos de Carol S. Dweck es que una mentalidad de crecimiento no se consigue en exclusiva siendo positivo. Este enfoque se adquiere cuando descubres que puedes mejorar y que el cambio forma parte del ser humano. Entrenar y potenciar tus competencias te permitirá evolucionar de forma constante a lo largo de la vida.

Un ejemplo destacable de esto lo puedes encontrar en un estudio publicado en Nature. Cuando se entrena a los estudiantes en este tipo de mentalidad y descubren que es posible desarrollar mucho más las habilidades intelectuales, su rendimiento mejora. Por tanto, tenlo en cuenta: no eres una entidad estable, eres una persona capaz de cambiar para dar siempre lo mejor de ti.

2. Acepta los desafíos

¿Te dan miedo los cambios? ¿Dudas de ti mismo cuando te expones a situaciones nuevas? Entonces, es momento de dar un giro a dicha percepción. Una de las claves para desarrollar una mentalidad de crecimiento es buscar retos y desafíos. Es en las experiencias complejas donde te pones a prueba y descubres tus fortalezas. Para ello, ten en cuenta lo siguiente:

  • Regula el estrés. Una manera de hacer frente a esas experiencias nuevas y hasta amenazantes es aplicar adecuadas estrategias para regular tus emociones y mantener el estrés y la ansiedad siempre bajo control.
  • Desafíos como oportunidades de aprendizaje. En efecto, para desarrollar un enfoque mental de crecimiento debes reformular el modo en que ves los retos. Son escenarios emocionantes donde adquieres nuevas valías y competencias que mejorarán la imagen que tienes de ti. Vale la pena probarlo.
  • Mejor paso a paso. No es necesario que te pongas a prueba marcándote una meta demasiado elevada. No hace falta beber de la charca de los leones para descubrir tus valías. Basta con retos sencillos para ir, poco a poco, elevando la dificultad. La mentalidad de crecimiento forma parte de un proceso constante de adquisición de conocimientos.

3. Trabaja tu motivación intrínseca

Carol S. Dweck señala en su libro Mindset, la actitud del éxito (2006) algo interesante que te gustará recordar. Una persona con mentalidad fija se rinde cuando su entorno le dice que no vale para algo. Sin embargo, quienes aplican una mentalidad de crecimiento, dejan a un lado las opiniones externas para guiarse por la motivación intrínseca.

En este sentido, una investigación divulgada en Brain Sciences destaca que existe una interacción neurológica entre este tipo de mentalidad y esa motivación que parte de tu amor propio, confianza y fuerza interior. Gracias a esta combinación de fortalezas, podrás alcanzar grandes metas y crecer como persona a lo largo de tu vida.

Alcanzarás la mentalidad de crecimiento cuando te sientas cómodo en medio de un desafío o problema. Antes, deberás manejar tus miedos e invertir esfuerzos en potenciar tus habilidades. Recuerda también que eres una persona en proceso de crecimiento, capaz de cambiar para lograr sus propósitos.

4. No temas equivocarte, forma parte del proceso

Una de las claves más decisivas para desarrollar una mentalidad de crecimiento es perder el miedo a los fracasos. Es cierto, nada mina más el ánimo que fallar, que caer una y dos veces en el mismo bache y sentirte incompetente. Sin embargo, es necesario que no te desanimes. A veces, un paso atrás no es más que un modo de coger mayor impulso.

Ten en cuenta que todo error te ofrece un aprendizaje o, como dijo Thomas Edison: «Una experiencia nunca es un fracaso, ya que siempre viene a demostrar algo». Intenta aplicar este razonamiento a partir de ahora y verás el cambio.

5. Entiende el poder del «todavía»

Hace unos años Carol S. Dweck dio una charla TED muy interesante. Para desarrollar un enfoque mental de crecimiento debes entender que eres una persona en proceso de aprendizaje. Esto implica tener en cuenta que hay habilidades y competencias que «todavía» no dominas, pero que, en un futuro, harás tuyas.

Se trata solo de comprometerte contigo mismo y mejorar un poco más cada día. La perseverancia, la disciplina y la confianza en ti serán tus guías en ese avance.

6. Sé compasivo contigo mismo

La autocompasión es la herramienta con la que superarás esos momentos en que las dudas y las críticas minan tus valías personales. En un artículo de la revista Annual Review of Psychology se destaca cómo esta competencia reduce esos juicios negativos que, a menudo, ponen en jaque tu potencial y la oportunidad de seguir desarrollando tu mentalidad de crecimiento.

Por tanto, procura hablarte de manera más empática, como si fueras tu mejor amigo, regula tu crítico interno y respétate. El mundo ya es lo bastante complejo para que seas tu peor enemigo.

7. Sé persistente y trabaja en ti todos los días

Siempre es buen momento para mejorar tus competencias e integrar nuevos aprendizajes. Como bien señala la doctora Carol S. Dweck, puedes descubrir nuevos talentos y optimizar tu inteligencia si inviertes tiempo y esfuerzo en dicho propósito. Pero, para ello, debes ser persistente y desarrollar acciones como las siguientes:

  • Acepta las críticas constructivas y consejos de los expertos.
  • Sé constante y procura superarte para alcanzar la excelencia.
  • Reflexiona sobre tus experiencias y obtén valiosos conocimientos de todas ellas.
  • Mantén el entusiasmo y la curiosidad por descubrir nuevos conceptos y destrezas.
  • Mira el mundo como un escenario lleno de oportunidades que puedes aprovechar.

8. Sí a un enfoque resiliente

Mentalidad de crecimiento y resiliencia tienen una relación directa. Tal y como señalan en un estudio publicado en Educational Psychologist, el cual fue realizado por la propia Carol S. Dweck, cuando un estudiante hace uso del enfoque resiliente en sus estudios toma consciencia de que con su esfuerzo puede superar los desafíos académicos.

No lo dudes, aplica en tu día a día esa mirada que procesa las dificultades como oportunidades de aprendizajes para avanzar de forma más satisfactoria y plena. En ti hay recursos que puedes desarrollar para utilizar a tu favor y manejar cualquier reto, problema o encrucijada. Esta valía te aportará un gran bienestar.



Una mente que florece para crecer y descubrir todo tu potencial

Desarrollar una mentalidad de crecimiento es un proyecto de vida que te puede traer grandes beneficios. Es más, seguro que te has dado cuenta de que, a tu alrededor, hay muchas personas que aplican un enfoque mental fijo. Son aquellas que ante cualquier desafío solo ven innumerables problemas y son incapaces de aportar una sola solución.

Deja a estas figuras a un lado y procura florecer como ser humano, invierte en esta competencia y podrás trabajar mejor en tus sueños y proyectos. Tal labor es un arte cotidiano, un viaje de esfuerzos y descubrimientos que nunca se detiene. No dudes en embarcarte en este proyecto tan emocionante por tu bienestar.


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