Demolición, cuando el duelo se convierte en dolor no expresado
¿Hasta qué punto somos capaces de reconstruir nuestras vidas tras un duro trauma emocional? Al perder a un ser querido, nos podemos encontrar en una situación de vulnerabilidad, incluso hasta llegar a perder el verdadero rumbo de nuestra vida. Esta es la idea que se plantea en la película Demolición, donde el duelo se convierte en dolor no expresado.
El argumento de este filme nos invita a reflexionar sobre lo efímera que es la vida y todas las consecuencias que pueden derivarse de un accidente de tráfico. ¿Cuál es nuestra reacción tras una situación de este tipo? ¿Cómo nos podemos encontrar tras un bloqueo emocional de esta envergadura? Vamos a dar explicación a estas cuestiones tomando de referencia la historia que se cuenta en esta película.
Breve contexto de Demolición
El director Jean-Marc Vallé realiza un filme que se clasifica dentro del drama psicológico, un género que da mucho juego a nivel argumental y donde se suelen trabajar las emociones desde distintos puntos de vista. En este sentido, se transitan los comportamientos de una persona que, tras un shock psicológico tan fuerte, pasa por una serie de etapas hasta empezar a recuperarse.
El protagonista Davis Mitchell, interpretado por el actor Jake Gyllenhaal, asume un rol en el que más de una persona puede verse identificada. No solo se plantea una temática de drama y dolor, sino que también tenemos algunas partes donde existe cierta carga de humor y sarcasmo.
En ningún momento se quiere ofrecer el sufrimiento de este personaje; en realidad, se quiere trabajar el comportamiento del ser humano ante ciertos golpes vitales.
El alegato que se muestra en esta historia es la de una persona que, a pesar de las dificultades que ha padecido, puede salir adelante. De este modo, van a aparecer personas como Karen, interpretada por Naomi Watts, y su hijo, con quienes inicia una reconstrucción de su vida. Por tanto, existen rasgos de esperanza.
“El hombre solo mantiene su equilibrio cuando se mueve hacia delante”.
-Maxwell Maltz-
Afrontar la pérdida de un ser querido
Cada uno de nosotros tiene una manera particular de afrontar la pérdida de un ser querido. Algunos no levantan cabeza en mucho tiempo, mientras que otros tratan de salir adelante y recuperarse lo antes posible. Es aquí donde entran en juego distintas circunstancias, como la experiencia, la personalidad o la calidad de la red de apoyo. Veamos algunos aspectos importantes que plantea la película en este sentido:
- La figura de Davis nos deja una cosa clara: la actitud frente a los problemas lo es casi todo. Es posible que la tristeza y el abatimiento sean factores que influyen en las emociones, pero eso no tiene que ser una tónica permanente ni predominante, sino que podemos mejorar nuestro estado anímico y recuperarnos.
- La película gira en torno al significado de la pérdida y el dolor de un ser querido. De ahí que el comportamiento de Davis llegue a ser, incluso, extraño. Los psicólogos Enrique Echeburúa y Arantxa Herrán explican que algunas personas se muestran resistentes a superar este trance, algo que puede interferir en sus vidas y padecen la pena mórbida.
- Sin embargo, también está la otra vertiente, en la que un individuo que padece un trauma de este estilo consigue recuperarse. Esto se debe a que recibe algunos factores positivos que le ayudan a salir del bache. Así sucede entre Davis y Karen, una muestra de que no todo está perdido.
Empatizar con el protagonista
La película es homónima en el desarrollo a su título. Vemos que para el protagonista es duro de concebir una situación así, pero a su vez consigue entablar con el espectador esa empatía que, a grandes rasgos, nos impulsa al deseo de que todo vuelva a estar bien.
El mensaje esperanzador que va adquiriendo el argumento según se desarrolla la historia, despierta nuestra confianza. En realidad, deseamos que vuelva a encauzar su vida adecuadamente. No obstante, es evidente una cuestión: el duelo es un reto universal. Es una situación a la que, tarde o temprano, todos nos enfrentamos.
De todas formas, el dolor no expresado puede llegar a ser una carga emocional que, poco a poco, se puede ir superando, tal y como sucede con Davis. Las emociones intensas no aparecen de forma ordenada y, en ocasiones, se mezclan con otras, tal y como explica el psicólogo Vicente Prieto.
En definitiva, una película con la que mucha gente se puede sentir identificada por exponer estados y desafíos por los que ha pasado, algo parecido a lo que sucede cuando vemos un documental sobre una ciudad a la que conocemos. Por tanto, Demolición nos enseña todo el recorrido, desde el sufrimiento y el hundimiento hasta el momento en el que el personaje encuentra una salida.
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- Echeburúa, E. y Herrán, A. (2007). "¿Cuándo el duelo es patológico y cómo hay que tratarlo?" en Análisis y Modificación de Conducta, Vol. 33, N° 147. Universidad del País Vasco.
- García Fernández-Abascal, E. et al. (2010). Psicología de la emoción. Editorial Universitaria Ramón Areces. Madrid.
- Prieto, V. (2018). La pérdida de un ser querido. La esfera de los libros. Madrid.
- Vargas Solano, Rosa Elena. (2003). Duelo y pérdida. Medicina Legal de Costa Rica , 20 (2), 47-52. Obtenido el 31 de octubre de 2021 de http://www.scielo.sa.cr/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1409-00152003000200005&lng=en&tlng=es.
