¿En qué consiste el trastorno de juego por internet?
Las demandas de tratamiento de adolescentes con problemas relacionados con el uso de internet han incrementado significativamente. Así, no resulta extraño ver en las consultas a jóvenes con trastorno de juego por internet.
Los jóvenes utilizan internet para acceder a una gran variedad de contenidos a través de múltiples dispositivos. Las principales finalidades son relacionarse, divertirse o aprender. Sin embargo, en los últimos años se ha evidenciado que el uso inadecuado o en exceso de internet puede tener consecuencias negativas. Hablamos de repercusiones en las funciones de la vida cotidiana, las relaciones familiares e interpersonales y la estabilidad emocional.
El trastorno de juego por internet, ¿un verdadero trastorno?
El Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5) señala que la adicción a internet no tiene entidad suficiente como para ser catalogada como trastorno. No obstante, propone la existencia del trastorno de juego por internet, indicando que requiere de estudios posteriores (American Psychiatric Association, 2013).
Esta situación ha motivado diferentes investigaciones. En ellas encontramos evidencia suficiente para afirmar que usar los videojuegos de manera excesiva o desmedida puede tener consecuencias peores o igual de negativas que las que tiene cualquier otra adicción más conocida.
¿Cómo se diagnostica el trastorno de juego por internet?
A continuación veamos qué criterios diagnósticos se exigen para la existencia del trastorno de juego por internet según el DSM-5:
Uso persistente y recurrente de internet para participar en juegos, a menudo con otros jugadores, que provoca un deterioro o malestar clínicamente significativo tal y como indican 5 (o más) de los siguientes en un período de 12 meses:
- Preocupación con los juegos de internet. El individuo piensa en actividades de juego previas o anticipa jugar el próximo juego. Internet se convierte en la actividad dominante de la vida diaria. Este trastorno es diferente de las apuestas por internet, que se incluyen dentro del trastorno por juego.
- Aparecen síntomas de abstinencia al quitarle los juegos por internet. Estos síntomas se describen típicamente como irritabilidad, ansiedad o tristeza, pero no hay signos físicos de abstinencia farmacológica.
- Tolerancia. Hace referencia a la necesidad de dedicar cada vez más tiempo a participar en juegos por internet.
- Intentos infructuosos de controlar la participación en juegos por internet.
- Pérdida del interés por aficiones y entretenimientos previos como resultado de, y con la excepción de los juegos por internet.
- Se continúa con el uso excesivo de los juegos por internet a pesar de saber los problemas psicosociales asociados.
- Ha engañado a miembros de su familia, terapeutas u otras personas en relación a la cantidad de tiempo que juega por internet.
- Uso de los juegos por internet para evadirse o aliviar un afecto negativo. Por ejemplo, sentimientos de indefensión, culpa o ansiedad.
- Ha puesto en peligro o perdido una relación significativa, trabajo u oportunidad educativa o laboral. Ello es debido a su participación en juegos por internet.
Solo se incluyen en este trastorno los juegos por internet que no están relacionados con las apuestas. No se incluye el uso de internet para realizar actividades requeridas en un negocio o profesión. Tampoco se pretende que el trastorno incluya otros usos recreativos o sociales de internet.
El trastorno de juego por internet es similar a una adicción
El trastorno de juego por internet es un patrón de uso excesivo y prolongado de juegos por internet. Tiene como resultado un grupo de síntomas cognitivos y de comportamiento, como la pérdida progresiva de control sobre el juego, la tolerancia y los síntomas de abstinencia. Estos son análogos a los síntomas de un trastorno por consumo de sustancias.
Al igual que en los trastornos relacionados con sustancias, las personas con trastorno de juego por internet continúan sentados delante de un ordenador realizando actividades de juego a pesar de que están descuidando otras actividades.
Típicamente dedican 8-10 horas o más al día y, al menos, 30 horas por semana a realizar esta actividad. Si se evita que utilicen un ordenador y sigan jugando, se agitan y se enfadan. A menudo pasan largos períodos de tiempo sin comer ni dormir.
Juegos sociales que interfieren en la vida cotidiana
Otro síntoma es que desatienden las obligaciones normales, tales como la escuela el trabajo o las obligaciones familiares. La característica esencial del trastorno de juego por internet es una participación persistente y recurrente en los juegos de ordenador, típicamente juegos de grupo, durante muchas horas.
Estos juegos conllevan la competición entre grupos de jugadores (que a menudo están en diferentes regiones del mundo) que participan en actividades complejas y estructuradas que implican un aspecto significativo de interacción social durante el juego.
Los sentimientos de equipo parecen ser una motivación clave. Resisten tenazmente a los intentos de reconducir al individuo hacia sus tareas escolares o sus actividades interpersonales. De este modo, se descuidan las ocupaciones personales, familiares o vocacionales.
Por otro lado, las personas encuestadas suelen afirmar que utilizan el ordenador para “evitar el aburrimiento” antes que para comunicarse o buscar información. En algunas de las personas estudiadas se ha encontrado una activación cerebral desencadenada por la exposición al juego de internet en regiones específicas que no se limitan al sistema de recompensa.
La descripción de los criterios relacionados con esta afección está adaptada de un estudio realizado en China. Deben, aún, determinarse empíricamente los criterios y el umbral óptimos para el diagnóstico. Por lo tanto, recomendamos tomar con precaución la información recogida en este artículo.
Si crees que tienes un problema relacionado con el juego por internet, lo mejor que puedes hacer es acudir a un psicólogo especializado. Podrá ayudarte a superar esta “adicción” y a hacer que el impacto sobre tu vida no sea tan grande.