Descubre las 92 palabras más raras en español


Escrito y verificado por la psicóloga deportiva Gloria Redondo
Las palabras más raras del español atraen a muchos curiosos deseando ampliar su léxico. Si hay algo que caracteriza a nuestro idioma, es la variedad de términos para describir todo tipo de objetos, situaciones y estados internos. Con la ayuda de la Real Academia Española (RAE) descubriremos algunos de estos vocablos.
Y este es apenas un abrebocas, pues en un idioma tan extenso como el español, es una tarea imposible llegar a conocer todas las palabras y más si son tan raras.
Según la RAE, en la última edición del diccionario académico (2014) se registraban 93.111 artículos y 195.439 acepciones. Sin embargo, el siguiente listado te será de ayuda si quieres sorprender a tus cercanos con nuevos términos o solo conocer más a fondo sobre la lengua.
Las palabras más raras en español
Nuestro idioma es muy rico. En el día a día tan solo manejamos un conjunto muy reducido de términos, pero si nos aventuramos a mirar en el diccionario, aprenderemos un montón de vocablos que enriquecerán nuestro discurso. A continuación, te presentamos 92 de las palabras más raras en español. ¡Comencemos!
- Acendrado: algo que carece de defectos y manchas, que es puro.
- Agibílibus: habilidad o ingenio para alcanzar una meta propuesta. Capacidad de manejar las dificultades con picardía.
- Alexitimia: es un término que se utiliza en psicopatología para referirse a la incapacidad para describir los sentimientos mediante las palabras.
- Alcorque: hoyo que se hace al pie de un árbol para aprovechar mejor el agua de los riegos o de la lluvia.
- Arabesco: línea con trazado sinuoso que se entrecruza. Por ejemplo, el humo de un cigarro mientras se consume.
- Arrebol: color rojo de las nubes iluminadas por los rayos del sol. También, puede ser el mismo tinte que se da en otras cosas, como el colorete.
- Ataraxia: literalmente significa ‘ausencia de turbación’. Es un sinónimo de serenidad, la capacidad de mantener la calma frente a la adversidad.
- Atolondrar: hacer que una persona actúe de manera precipitada, sin reflexionar y con torpeza.
- Bahorrina: agua sucia mezclada con tierra e inmundicias. Se puede aplicar también para el conjunto de cosas o personas ruines y despreciables.
- Barbián: una persona desenvuelta, gallarda o valiente.
- Befar: hacer una burla o broma de alguien.
- Bonhomía: una actitud que se podría describir como la sencillez unida con la bondad en el carácter y los modales.
- Burdégano: mamífero nacido del cruce de un caballo y una burra.
- Cacosmia: término médico que se utiliza para describir la alteración del sentido del olfato, causando una percepción anormal de los olores fétidos.
- Cazcalear: andar o deambular de un sitio a otro fingiendo que se está haciendo algo útil.
- Celaje: aspecto del cielo cuando está cubierto de nubes tenues y de distintos colores, en especial durante la salida o puesta de sol.
- Cenaoscuras: persona tacaña que se priva de las comodidades regulares.
- Chundarata: esta palabra es en realidad una onomatopeya, pues designa a la música estridente y bulliciosa.
- Depauperar: es un sinónimo de empobrecer, debilitar o extenuar a una persona, o una parte de ella.
- Desleír: disolver una sustancia, de contextura sólida o pastosa, en un líquido.
- Denodado: una persona que posee mucha energía, valor o decisión.
- Deyección: es una forma de referirse a la eliminación de los excrementos.
- Ebúrneo: objeto hecho de marfil o de material que se le parece.
- Entronque: relación de parentesco entre personas que tienen un tronco de linaje común.
- Falcado: algo que tiene una curvatura similar a la de una hoz.
- Faramalla: charla artificial cuyo propósito es engañar.
- Farmacodinamia: es la ciencia que estudia los efectos bioquímicos y fisiológicos de un medicamento y su mecanismo de acción específico en un órgano.
- Garambaina: adorno de mal gusto y sin valor en los vestidos u otras cosas.
- Gaznápiro: persona tonta, simplón, torpe, que se queda embobado con cualquier cosa.
- Haiga: coche de gran tamaño y llamativo, como por ejemplo una limusina o un autobús privado.
- Heresiarca: el primer autor de una herejía o líder de una secta herética.
- Hermenéutica: el arte de la interpretación, explicación y traducción de los textos, actuales y antiguos.
- Histriónico: persona que actúa de una manera muy emocional y dramática, atrayendo la atención hacia ellas. Es sinónimo de histérico.
- Idiosincrasia: modo de ser que es característico de una persona o cosa y la distingue de las demás.
- Inefable: algo que resulta tan impactante que no se puede describir con palabras.
- Isagoge: preámbulo o introducción de una obra literaria.
- Jerapellina: vestido viejo y desgastado. También, pieza de tela que no puede dar más de sí.
- Jitanjáfora: texto carente de sentido literario cuyo valor estético se basa en la sonoridad y en el poder evocador de las palabras, reales o inventadas, que lo componen.
- Jipiar: llorar produciendo gemidos entrecortados y emitiendo sollozos.
- Joviano: que pertenece o está relacionado con el planeta Júpiter.
- Jumera: estado de borrachera o embriaguez.
- Limerencia: trastorno mental que tiene ciertos rasgos en común con el enamoramiento, pero que a la par genera una serie de problemas y síntomas negativos, como la depresión.
- Lobanillo: bulto leñoso que se forma en la corteza de los árboles. En versión humana es un bulto superficial, no doloroso, que se forma en la cabeza y otras partes del cuerpo.
- Luminiscencia: propiedad de un cuerpo para emitir luz luego de absorber energía de otra radiación, sin elevar su temperatura corporal.
- Mainel: columna delgada que divide en dos partes el hueco de una puerta o ventana.
- Malacia: en medicina se utiliza como el reblandecimiento anormal de una estructura, por ejemplo un hueso o un cartílago.
- Melifluo: que contiene miel. También se emplea para describir a las personas muy cariñosas.
- Muérgano: objeto que es inútil, viejo o invendible. Aplicado a una persona significa tonto o de poco entendimiento.
- Nadir: punto de la esfera celeste diametralmente opuesto al cenit.
- Nefando: algo que causa repugnancia u horror cuando se habla de ella. Resulta abominable y asqueroso a partes iguales.
- Nefelibata: persona que vive en las nubes, que es muy soñadora y distraída.
- Núbil: persona que está en edad de casarse.
- Ñaque: compañía ambulante de teatro que estaba compuesta por dos cómicos.
- Ñomblón: persona rolliza y nalgona.
- Oclocracia: estado en el que gobierna la muchedumbre o la plebe.
- Oleaginoso: que tiene textura aceitosa.
- Onicofagia: costumbre de comerse las uñas.
- Ortoepía: el arte de pronunciar de modo correcto las palabras.
- Paila: sartén de cerámica o metal redonda, con poca profundidad y de gran tamaño, que se usa para asar, hervir o freír.
- Perdulario: que se muestra o viste muy desaliñado, desprolijo, descuidado.
- Perihelio: punto de la órbita de un cuerpo celeste más cercano al Sol.
- Petricor: nombre que se le otorga al olor que emana la lluvia cuando cae y humedece suelos secos.
- Plañir: gemir y llorar de forma escandalosa, de manera que los demás lo escuchan.
- Querocha: conjunto de huevos que pone una abeja reina.
- Quincalla: conjunto de objetos de poco valor. Pueden ser botones, piezas de una máquina estropeada, tijeras, entre otros.
- Recipiendario: persona quien es recibida de forma solemne por una institución.
- Regnícola: habitante natural de un reino. También dicho de quien escribe de las cosas especiales de su patria, como códigos penales, hábitos nacionales, cultura en general.
- Réprobo: condenado a las penas eternas. Aparte, es alguien condenado por su heterodoxia religioso.
- Sabrimiento: una forma antigua de decir sabor. Puede ser un chiste o un chascarrillo.
- Selenofilia: atracción desmedida por todo aquello que tenga que ver con la luna y sus efectos. En griego, selene significa ‘luna’ y filia, ‘amor’.
- Sempiterno: que no tiene fin; que durará para siempre. Que carece de principio y de fin.
- Serendipia: hallazgo inesperado y afortunado que se produce cuando se está buscando algo diferente a lo encontrado.
- Testaferro: persona que aparece como titular en un negocio o contrato, cuando en realidad solo presta su nombre a otro que es el verdadero negociador o contratante.
- Tragaldabas: persona con un apetito voraz, que come mucho.
- Trapisonda: agitación del mar, formada por olas pequeñas que se cruzan en diversos sentidos.
- Trémolo: concepto musical que describe una rápida sucesión de repeticiones de una misma nota.
- Ubérrimo: cualidad de ser fértil y abundante.
- Undísono: el sonido que produce el movimiento de las olas.
- Unigénito: persona que es hija única.
- Uróboro: símbolo que muestra a una serpiente o dragón engullendo su propia cola y formando un círculo con su cuerpo. Representa los ciclos o la repetición de un patrón.
- Vagido: el llanto o gemido que produce un recién nacido.
- Vectación: acción de desplazarse en un vehículo.
- Velicomen: copa grande para brindar. Viene del alemán medio willekomen que significa ‘bienvenida’.
- Vituperio: insulto, calumnia o infamia que provoca la acción de haber ofendido a alguien.
- Volatinero: persona que con habilidad y arte anda y voltea por el aire sobre una cuerda o un alambre, y hace otros ejercicios semejantes.
- Vulpino: palabra usada para designar a todo aquello que esté relacionado con los zorros.
- Xantinas: grupo de sustancias psicoactivas de perfil estimulante. El café y el té son ricos en este tipo de moléculas.
- Yatagán: especie de sable o alfanje que utilizan los orientales.
- Yatrogenia: alteración negativa del estado del paciente producida por el médico o un tratamiento.
- Zafirino: del color de zafiro (azul).
- Zaperoco: desencadenar una riña, alboroto o pelea entre dos o más personas.
- Zoomorfo: que tiene forma de animal.
Amplía tus horizontes con las palabras más infrecuentes
¿Conocías alguna de las palabras mencionadas? Ten en cuenta que los términos extraños del español pueden llegar a ser miles, pues los idiomas se renuevan a cada instante y, en muchas ocasiones, la adaptación de extranjerismos y variantes según la región impulsan a que se extienda el listado.
También, hay palabras que se quedaron en el tiempo o que son usadas en ámbitos específicos y que pueden llegar a parecernos extrañas. Las que te hemos compartido son algunas de las más infrecuentes, sin embargo, aluden a conceptos que utilizamos en la cotidianidad. Seguro sorprenderás a más de uno si empiezas a implementarlas en tu léxico.
Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.