Platón: biografía de este filósofo griego
Platón es considerado como el padre de la filosofía occidental, junto a los presocráticos, el propio Sócrates o Aristóteles. Si bien en su tiempo hubo otros grandes pensadores, con Platón la disciplina filosófica trasciende la adolescencia. Fue alumno de Sócrates y maestro de Aristóteles, así como el fundador de “la Academia”, una institución que se mantuvo por más de 900 años.
La filosofía de Platón gira alrededor de la teoría de las ideas. Esta plantea que más allá del mundo de los objetos físicos (es decir, de aquellos que se pueden captar con los sentidos), hay otra realidad conformada solamente por las ideas: un mundo inteligible.
Este mundo de las ideas es perfecto y eterno, según Platón. En él hay una idea que gobierna sobre todas las demás: el Bien. Ese contraste con este mundo ideal, esencia del pensamiento platónico, está el mundo material e imperfecto.
“La ignorancia es la semilla de todo mal”.
-Platón-
Platón, el origen de un filósofo
El verdadero nombre de Platón era Aristocles, pero un maestro de gimnasia le puso el apodo con el que sería conocido para siempre. La palabra “Platón” significa “aquel que tiene anchas espaldas”. Se cree que nació hacia el año 427 antes de nuestra era, en Atenas.
El filósofo provenía de una familia aristocrática. Su padre se llamaba Aristón y, al parecer, era descendiente de un rey de Atenas. La madre era Perictione o Períctiona y estaba emparentada con el famoso legislador griego Solón. Tuvo dos hermanos mayores: Glaucón y Adimanto.
A la muerte de su padre, su madre se casó de nuevo y tuvo otros dos hijos. Cuando nació el filósofo, Atenas pasaba por épocas muy convulsas. Se adelantaba la Guerra de Peloponeso y la democracia ateniense peligra.
En el hogar de Platón la política tuvo un lugar importante, ya que uno de sus tíos y un primo de su madre formaban parte del gobierno autocrático conocido como “dictadura de los Treinta Tiranos”. Esta tomó el poder en Atenas cuando concluyó la guerra.
Discípulo de Sócrates
A los 20 años, Platón conoció a Sócrates y se convirtió en su discípulo. Este último tenía unos 70 años y cautivó la mente del joven filósofo. Recordemos que Sócrates nunca escribió y lo que conocemos de su pensamiento se lo debemos a la destreza de su aplicado alumno.
Durante ocho años, Platón siguió a Sócrates. Sin embargo, este último fue condenado a muerte en el año 399 antes de nuestra era. Se le acusó de impiedad, de introducir nuevos dioses y de corromper a la juventud.
El episodio de la muerte de Sócrates quedó plasmado en una obra de Platón llamada Apología. Este hecho marcó un antes y un después en la vida de filósofo, que quedó devastado por la muerte de su maestro.
Desilusionado, decidió viajar. Se sabe que estuvo en tierras italianas, más concretamente en Sicilia. Durante la travesía conoció otras escuelas filosóficas y quiso involucrarse en la política como consejero del tirano Dionisio. Todo fue un desastre y, al parecer, al final Platón fue vendido como esclavo. Después sería rescatado en la isla de Egina.
La Academia
Tras estas vicisitudes, Platón volvió a su tierra natal y se instaló en las afueras de Atenas. Allí fundó su propia escuela, a la que dio el nombre de “Academia”, en honor a un héroe griego llamado Academo. Según la mitología, este había salvado a Atenas de una guerra y en el jardín sagrado donde estaba su tumba se edificó la academia platónica.
La academia tenía una gran biblioteca y habitaciones para los estudiantes. En la entrada podía leerse esta inscripción: “Aquí no entra nadie que no sepa geometría”. Fue allí donde Platón le dio forma a su extensa obra, la cual escribió en forma de diálogos.
En sus Diálogos, Platón trata todo tipo de temas. Psicología, política, pedagogía, ética, antropología, epistemología, cosmología, etc. Emplea con frecuencia los mitos y las alegorías para exponer sus ideas e impartir sus enseñanzas. Hizo más de 30 diálogos y el más famoso de ellos fue La República.
La academia sirvió como modelo para otras escuelas como el posterior y célebre “Liceo” de Aristóteles, el más destacado de los discípulos de la academia platónica. Platón murió a los 80 años y su academia persistió por nueve siglos. Cerró definitivamente cuando el emperador Justiniano prohibió la enseñanza de la filosofía griega en el año 529 de nuestra era.
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- Solana Dueso, J. (2007). Platón: la transición a la ciudad ideal. L'Antiquité classique, 76(1), 51-62.