¿Qué cualidades debe tener la pareja perfecta?
La atracción física y el amor a primera vista son dos factores de peso a la hora de encontrar pareja. Es difícil negarlo. Pero se trata, al fin y al cabo, de un inicio donde puede primar una pasión momentánea, intensa pero fugaz, donde pocas veces se llega a encontrar una estabilidad. Encontrar la pareja perfecta y ser correspondido es una aspiración que muchas personas ansían.
Sin embargo, para conseguirlo, primero hay que tener claros unos aspectos fundamentales sobre nosotros mismos. ¿Qué es lo que más valoras en una persona? ¿Cuáles son tus necesidades? ¿cuáles tus límites?
Puede que la pareja perfecta no exista como tal, pero sí esa persona capaz de despertar felicidad y seguridad. Un compañero/a con cualidades y valores apropiados para ti. Esa persona cuyas diferencias no son más que pequeños desniveles donde encajar tus propias piezas para conformar el puzzle perfecto.
“Aprendemos a amar no cuando encontramos a la persona perfecta, sino cuando llegamos a ver de manera perfecta a una persona imperfecta”.
-Sam Keen-
La necesidad de conocerse a uno mismo
A la hora de encontrar la pareja adecuada siempre es necesario que hagamos un ejercicio de autoconocimiento. Valorar nuestra experiencia vital y las antiguas relaciones compartidas nos hará comprender qué es aquello que más apreciamos en una pareja.
Debemos pensar en aquello que valoramos, o en aquello que jamás podríamos aceptar. ¿Aceptarías a una persona celosa? ¿Eres de las que valoran la independencia y tener un espacio propio? ¿Eres una persona indecisa y buscas alguien que te aporte seguridad? ¿O eres quizá una persona controladora que encajaría mejor con alguien más comprensivo? Todos estos son aspectos que debemos tener muy claros.
En ocasiones nos podemos ver iniciando relaciones donde poco a poco van apareciendo situaciones donde nos sentimos contradichos, o tal vez heridos. Bien es cierto que muchas veces la atracción aparece sin que seamos capaces de controlarla, pero es indispensable saber cuáles son nuestros límites y hasta dónde somos capaces de permitir, ceder o aceptar.
Cuando nos conocemos a nosotros mismos seremos capaces de establecer relaciones mucho más sanas. No buscaremos en la otra persona aquello que nos falta. Muchas gente cree que en una relación perfecta debemos encontrar en el otro lo que nos falta para llenar un vacío interior, sin embargo, esto puede llevar al apego y a la dependencia. Lo más sano es que ambas personas tengan una buena autoestima y estén juntas por elección propia y no por dependencia ni necesidad.
¿Qué cualidades tiene la pareja perfecta?
Se puede decir que hay tres pilares básicos que ayudan a consolidar la relación de pareja. Vamos a verlos.
Comunicación
Una buena comunicación es indispensable para mantener una relación estable y efectiva. Es esencial poder expresar nuestros pensamientos libremente, nuestras necesidades y sentimientos, establecer una escucha activa con el otro para ser comprendidos. Es un modo efectivo de superar cualquier conflicto que surja en la pareja.
Compromiso
Encontrar una persona que nos asegure su compromiso con nosotros y con la relación es indispensable para sentirnos seguros y para confiar en lo que se está viviendo. La fidelidad, la confianza, el ver que existe un compromiso emocional con nosotros y que somos el centro del interés de la otra persona y de sus proyectos de futuro es imprescindible para sentirnos bien y ser felices.
Afinidad
Compartir aficiones y gustos semejantes es un valor muy efectivo. Contribuye a hacer de nuestra relación algo vivo, algo donde encontrar complicidad, placer y unión. Tampoco se trata de compartir al 100% las mismas cosas, y aquí entra en juego la enriquecedora dimensión de aprender mutuamente el uno del otro.
Dejar que nuestra pareja nos enseñe y enseñarle nosotros nuestras inquietudes, nuestros gustos y placeres… Son los pilares que asentarán una relación eficiente y verdadera con la que encontrar esa deseada estabilidad.
“Puede uno amar sin ser feliz; puede uno ser feliz sin amar; pero amar y ser feliz es algo prodigioso.”
-Honoré de Balzác-
Para concluir, destacar unas frases de Manuel Villegas (2006) en su artículo Amor y dependencia en las relaciones de pareja: “La expectativa excesiva, sin embargo, transferida a la relación de pareja puede ser tan asfixiante que acabe por destruirla totalmente o por desequilibrar los roles sobre los que se sustenta, favoreciendo la actitud de dependencia en uno o ambos miembros de la misma, a fin de preservar el vínculo, una vez establecido“.
Bien es cierto que la pareja perfecta o ideal no existe, todos somos personas con grandezas pero también con defectos. Pero mientras existan cualidades básicas como una buena comunicación, empatía, compromiso y afinidad, día a día podremos ir edificando esa relación perfecta con la persona soñada.