¿Sabes qué es la psiquiatría?
¿Sabrías decir qué diferencia a la psicología de la psiquiatría? Muchas personas no son capaces de responder adecuadamente a esta pregunta. Si tú eres una de ellas, no te preocupes. En otros artículos hemos hablado ya de la diferencia entre psicología y psiquiatría. En este vamos a definir qué es la psiquiatría.
Según el doctor Juan José López-Ibor, la psiquiatría es la rama de la medicina en la que los fenómenos psíquicos son importantes como condicionantes, manifestaciones o agentes terapéuticos. Además, el ámbito de la psiquiatría se extiende a la colaboración con otras especialidades para el estudio de determinadas actividades clínicas concretas, enfermedades o síntomas. Por ejemplo, problemas psicológicos que se presentan derivados de otras enfermedades con un correlato físico claro.
Este es el camino de la medicina psicológica y de la psiquiatría de enlace que han venido a suceder a la llamada medicina psicosomática. Esta última aspiraba a estudiar las causas psicológicas y tratamientos de las enfermedades somáticas.
La medicina psicosomática y su evolución
Así pues, la medicina psicosomática aplicaba el modelo causa-efecto. Este modelo es muy importante en la tradición científica y en la formación de los médicos. Sin embargo, poco a poco se va abriendo una nueva perspectiva.
Esta nueva perspectiva, multifactorial o integradora, entiende que los fenómenos psicológicos no son algo añadido a los procesos biológicos. Por el contrario, formarían un conjunto unitario, integrado, de acuerdo con el llamado modelo biopsicosocial.
Según este modelo biopsicosocial, los aspectos psicológicos, biológicos y sociales no son más que distintas caras del mismo fenómeno. De acuerdo con esta nueva perspectiva, las enfermedades en general no pueden ser consideradas solo como la expresión de los daños inducidos por agentes externos (traumáticos o infecciosos, por ejemplo).
Ante todo, serían la expresión de mecanismos de adaptación a situaciones estresantes. Lo que pretenden es mantener un equilibrio del que depende la supervivencia individual. Las células del organismo necesitan de un medio interior regulado de modo preciso (homeostasis), siempre amenazado por las variaciones del medio externo.
De un modo análogo, la personalidad se desenvuelve en un mundo propio que necesita mantenerse dentro de unos cauces. Cabe decir que la patología (somática y psíquica) es más la expresión de los mecanismos adaptativos que no la de las posibles causas que los ponen en marcha.
Los médicos recurren, de hecho, a tratamientos para mitigar esas respuestas que, en principio, tuvieron, o pudieron tener, importancia para la supervivencia del individuo. Ejemplos de estos tratamientos son los corticoides para inhibir los fenómenos inflamatorios, analgésicos para calmar el dolor, etc.
La psiquiatría es una especialidad médica
Como especialidad médica, la psiquiatría se ocupa de trastornos provocados por malformaciones, lesiones, daños y enfermedades cerebrales (trastornos mentales orgánicos) o de otros órganos que afectan secundariamente a las funciones cerebrales (trastornos mentales sintomáticos).
La psiquiatría también se ocupa de los patrones de comportamiento que llevan al consumo de sustancias tóxicas y de sus consecuencias (trastornos debidos al consumo de sustancias, como el alcoholismo). También se ocupa de la esquizofrenia y de otros trastornos susceptibles de cursar con delirios, como los trastornos afectivos, las neurosis o los trastornos adaptativos.
La psiquiatría puede desarrollar funciones importantes en salud mental en colaboración con otras ramas de conocimiento y aplicación. Estos pueden ser educadores, psicólogos, enfermeros, asistentes sociales, etc. En este sentido, cada vez son más importantes para la medicina los estilos de vida que implican un riesgo para la salud. Ya sea para la prevención de enfermedades o para la rehabilitación de los que ya enfermaron.
Lo que la psiquiatría no es
Es importante señalar lo que la psiquiatría no es. Desde el principio de siglo hasta hace pocos decenios, la influencia del psicoanálisis llevó a la psiquiatría a una inflación: la psiquiatría tenía explicación (o pretendía tenerla) y respuesta para todo tipo de problema humano.
En los últimos años, la psiquiatría ha pasado por un proceso de “remedicalización”. Ha pasado a constituir un apoyo importante en la investigación clínica y biológica, caracterizándose por un mayor rigor en la aplicación de sus métodos terapéuticos. Además, asume una conciencia más precisa de sus límites y de sus posibles y más eficaces campos de actuación.
Es en este sentido en el que su colaboración con la medicina se perfila con mayor nitidez. Es de esperar que también en su apoyo a otros sectores de la investigación.
Para finalizar, me gustaría responder a la pregunta del inicio de una forma muy sencilla. Se podría decir que el psicólogo indaga en las características psicológicas y mentales del paciente mientras que el psiquiatra enfoca su labor hacia el ámbito médico-farmacológico. Dos campos “condenados”, por el bien del paciente, a trabajar en sintonía.