21 acciones sencillas para alimentar la felicidad
Seguramente conoces a muchas personas que parecen vivir en un continuo estado de buen humor: a pesar de todos los problemas y pesares que pasan en su vida, nunca los verás tristes ni quejándose del dolor o del sufrimiento. Pero, ¿Cómo lo logran? Te damos algunas pistas en el siguiente artículo.
Los 21 hábitos que alimentarán tu felicidad
Los expertos en psicología dicen que para ser feliz no hay que tener millones en un banco, ni siquiera un trabajo “perfecto”, una familia “soñada” o la casa más bonita del barrio. Es más bien una cuestión de actitud frente a la vida, saber cómo afrontar las situaciones difíciles y siempre estar agradecido por todo lo que tenemos (que si te pones a pensar, es más de lo que crees).
1 – Aprecia la vida: cada mañana agradece que te hayas podido levantar de la cama, por estar vivo.
2 – Elige sólo buenos amigos: Es mejor que estés rodeado de personas alegres y positivas, porque te harán ver el mundo de otra manera. Prefiere aquellas amistades que tengan la misma ética y valores que tú, que te ayuden a cumplir tus sueños y tú a ellos.
3 – Sé considerado con los demás: acepta a los otros como son y lo que les gusta. Respetar al prójimo, sin importar su religión, creencia política, ideología o pensamiento. Acércate a las personas con un espíritu generoso y amable.
4 – Aprende todo el tiempo: si tienes una afición o una carrera, debes mantenerte al día de las últimas noticias al respecto. Experimenta cosas nuevas y hasta atrevidas, que nunca te habías animado antes. No te prives de hacer lo que te gusta.
5 – Encuentra soluciones prácticas a tus problemas: No te sientas oprimido ni desesperado ante cualquier situación. Todo tiene una solución esperando, pero la debes encontrar primero. No dejes que los contratiempos ajenos a ti cambien tu estado de ánimo.
6 – Haz todo aquello que amas: sólo el 20% de las personas están a gusto con su empleo. Por ello es que hay tanta gente caminando por la calle con un gesto de amargura en sus rostros. Piensa que una gran parte de nuestros días (y de nuestra vida) la pasamos trabajando. Entonces, elige aquello que te guste y no te sentirás frustrado nunca más. El dinero adicional de un empleo que odias no vale la pena.
7 – Disfruta de lo bueno: observa la belleza que te rodea en una flor, un pájaro o una caricia. Hay mucho más luego del trabajo. No dudes en mirar la puesta del sol o del amanecer, salir a pasear por la playa, ir de excursión con tus hijos, vive el momento y cuida el presente. De nada sirve vivir en el pasado ni para el futuro.
8 – Ríe más: no te tomes todo tan en serio. Encontrarás algo de humor en todas las situaciones. Ríete de ti mismo, porque nadie es perfecto. Recuerda que la risa cura.
9 – Perdona: si cargas con resentimiento sólo tú te estarás lastimando. Perdonar a los demás es sinónimo de salud propia. En el caso de que seas el que te equivocas, confiésalo y aprende de ello.
10 – Agradece: seguro que tienes muchas razones por las que dar las gracias, hasta por lo que a veces pasa desapercibido: un hogar, una familia, un trabajo y un plato de comida. Debes estar feliz con lo que tienes.
11 – Invierte en tus relaciones: tus seres queridos deben saber que los amas. Cuida de ellos en todo momento, pasa horas a su lado, no los dejes para “cuando tengas tiempo”.
12 – Cumple tus palabras: la honestidad es una de las virtudes más importantes del hombre. Todas tus acciones deben estar basadas en ella.
13 – Medita: le darás un descanso a tu mente y a tu cuerpo. Es algo sencillo, sólo tienes que sentarse en silencio y lograrás la paz interior.
14 – Ocúpate de tus asuntos: no te preocupes por lo que dicen otras personas, no te dejes llevar por los chismes, no juzgues, no perjudiques a terceros.
15 – Sé optimista: mira siempre el medio vaso lleno, busca lo positivo de cada situación, saca provecho de los problemas, transforma un mal pensamiento en una nueva posibilidad de crecer.
16 – Sé digno: la dignidad hará la diferencia entre una vida plena y una miserable. Quiere decir hacerse respetar y lo mismo con los demás.
17 – Sé persistente: nunca bajes los brazos, has frente a todos los retos que te presenta la vida, con una buena actitud de superación. Debes concentrarte en aquello que deseas conseguir, armar un plan de éxito y tomar medidas.
18 – Sé proactivo: acepta lo que por el momento no puedas cambiar, no desperdicies energía en lo que no está bajo tu control. Acepta que como ser humano tienes limitaciones.
19 – Cuida de ti mismo: si no lo haces tú, ¿quién lo va a hacer? Cuida de tu cuerpo pero también de tu mente. Hazte chequeos regulares, practica deportes, come sano y duerme los suficiente. No te olvides de beber mucha agua y de agilizar el cerebro con retos o lecturas.
20 – Confía en ti: no quieras ser alguien distinto a lo que eres, nadie prefiere a los farsantes. Conoce tus gustos y lo que no te agrada, ten confianza en tus habilidades y virtudes.
21 – Sé responsable: esto no quiere decir que todo el día debes ser una persona formal y racional. Lo que si no puedes permitir es ser irresponsable en tu estado de ánimo, tu actitud, tus pensamientos, tus palabras, tus acciones y tus sentimientos.